Empire (The Hunt) [Finalizada]

Episodio 55

—Si resides aquí, compartirás a tus anfitriones como dicta Ariana. Te alimentarás cuando se te diga que lo hagas. Si no obedeces o pones en peligro la casa del Clan de cualquier manera, te decapitaré.— Dijo Adelaide.

La sonrisa de Dante desapareció y echó un vistazo a Elise. Ella no le hizo caso. El asunto de los Vampiros no le preocupaba. Alzó la barbilla y dijo rotundamente: —Lo entiendo y estoy de acuerdo.

—Bueno.— Dijo Adelaide y le acarició la mejilla, rozó los dedos por el centro de su pecho y cerró los dedos alrededor de su entrepierna. Ella apretó lentamente hasta que jadeó, luego se inclinó hacia delante y lo besó.

—Veremos si funciona.— Lo dejó ir y le dijo a Elise:—Ariana te está esperando.

—Por supuesto.— Elise y Adelaide dejaron a Dante al cuidado de Daniela y Carlos y caminaron juntas a la sala de Ariana.

Adelaide llamó, y por orden de Ariana entraron. Ariana descansaba en el centro de la cama, vestida sólo con una camisa blanca larga, desabrochada, sus colas cruzadas sobre los muslos como las manos de un amante. Estaba sola, y al amanecer, debería haber estado rodeada de sirvientes o esclavos, a la espera de servirla.

—Ah.— Dijo Ariana. — Mis dos favoritas.— Ella abrió los brazos. —Vengan y unanse a mí.

Sin palabras, Adelaide y Elise se desnudaron y subieron a la cama, tomando posiciones en lados opuestos de Ariana. Ellos la acariciaban en movimientos de imagen especular, acariciando sus pechos, vientre y muslos. Ella se arqueó y ronroneó aprobación.

—Dime, mi cazador,— Dijo Ariana, acariciando el pecho de Elise.—¿qué noticias traes?— Elise se inclinó hacia adelante y besó el pecho de Ariana, permitiéndole a sus colmillos burlarse de su pezón.

—Creo que he reclutado a un lobo que se formará un grupo de mercenarios para nosotros.— Dijo Elise. Ariana pasó sus dedos por el pelo de Elise y presionó la boca de Elise más cerca de su pecho.

—¿Y qué piensas hacer con él y sus soldados?— Pregunto Ariana.

—Quieren retribución contra los Abraxas. Creo que si los armamos y les prometemos control de los Blackpaws si Lalisa es derrotada, estarán ansiosos de atacar su fortaleza.— Dijo Elise.

—¿Son capaces de destruirla?— Pregunto Ariana. Elise alzó la cabeza.

—Lo dudo. Pero pueden dividir sus fuerzas, y si tenemos suerte, tomar cautivos. Eso podría provocarla para que venga tras ellos y nos dará la oportunidad de atacarla lejos de sus fuerzas principales.— Dijo Elise.

—Me convertirás en un buen comandante.— Ariana presionó a Adelaide para que bajara la cama. Adelaide besó su vientre, mientras se acercaba para acariciar a Elise en la coyuntura de sus muslos. —¿Qué más?— Elise se estiró y separó sus piernas mientras Adelaide jugaba con ella.

—He traído a casa una Vampiro que promete proporcionar esclavos y sirvientes. Ha desertado de otro Clan y busca un nuevo maestro.— Dijo Elise.

—¿Y es bonito?— Pregunto Ariana. Elise siseó mientras los incisivos de Adelaide rozaron su sexo.

—Eso sería para Adelaide decirlo.—Dijo Elise y Ariana se rió.

—¿Adelaide?— Pregunto Ariana. Adelaide levantó la vista.

—Mucho, mi Reina. Creo que lo disfrutarás.— Dijo ella.

—Quizás. Pero no tanto como saber que Lisa ha pagado por su traición. ¿Cómo haremos si los renegados Were fallan?— Dijo Ariana.

—Tengo algunas ideas, mi Reina. — Dijo Elise. Ariana tomó la mandíbula de Elise y la guió hacia arriba hasta que descubrió el cuello de Elise.

—Dime.— Dijo Ariana.

—Necesitamos atraer a Lisa para que venga a nosotros.— Elise jadeó mientras Ariana la inunda de esclavitud.

—¿Cómo?— Pregunto Ariana y lamió el cuello de Elise.

—Podríamos tener que sacrificar a alguien.— La piel de Elise se espesó por el centro de su abdomen.

—La guerra siempre exige sacrificio.— Ariana murmuró y golpeó profundamente. Adelaide se estiró por el cuerpo de Ariana y bebió de la vena grande de la ingle de Elise. Elise se estremeció y su mente quedó en blanco.