TENIAS QUE SER TÚ (Markitos Toys)

4

Tenía mucho miedo, era la primera vez en esta casa que dormía sola, le marqué a Mayve para que se viniera a quedar conmigo pero no contestó.
Me paré enseguida y prendí la luz para ver si podía dormir con la lámpara encendida.
Apenas estaba agarrando el sueño cuando se escuchó que tocaban la puerta de abajo.
Parecía histérica, pero encerio tenía mucho miedo, fui al cuarto de Luis y agarre el bay de baseball, lo agarre con las dos manos.

-¿Quien es?.- mi voz sonó temblorosa.

-Soy Marcos, ¿Estás bien?.- contestaron del otro lado, me asegure por la ventana y efectivamente era el.

Abrí la puerta inmediatamente y solté el aire comprimido.

-Vi la luz prenderse y me preocupe, quise venir a ver si estabas bien antes de llamar a la policía.- Si mirada se posó en el bat.- Pero creo que no es necesario.- soltó una risa.

-Lo siento, no podía dormir por que tenía miedo y encendí la luz para ver si así podía, me asuste cuando tocaste.- expliqué.- Pero pasa ¿Quieres que te prepare un café?

-No está bien.- se sentó en un sillón.- ¿A que hora llega tu papá?.- Cheque la hora en mi teléfono y supuse que era la hora en la que debió haber llegado.

-Pues se supone que ya debería estar aquí.

-Me quedó hasta que llegue pues.

-Ay no como crees, puras molestias.- dije tratando de convencerlo.

-Nombre ninguna molestia mija, para eso estamos.

Se recostó en el sillón y yo acepté encendiendo la tele, empezamos a ver una serie muy sonada en estos días.

Los dos reíamos de vez en cuando cuando lo ameritaba y chocábamos las miradas.

Marcos era muy lindo, sus facciones eran sutiles y tenía una manía de lamer sus labios a cada rato.

Me le quede viendo un rato más hasta que escuche el motor del camión y el aire al apagar el camión.

-Ya llegó.- Se paró Marcos.-Nos vemos mañana mija.

-Muchas gracias por acompañarme.- Dije en el momento en el que entró mi papá y nos miró con una sonrisa.

-Que onda Marquitos, que te trae por aquí?.-Pregunto saludándolo.

-Me asuste cuando vi la luz de arriba prendida .- Se notaba que estaba un poco nervioso.- Vine a checar pero estaba bien, decidí acompañarla en lo que usted llegaba.

-Gracias Marquitos, se que puedo confiar en ustedes para que me la cuiden cuando no estamos.- dijo mi papá verdaderamente agradecido.

Marcos salió de la casa, mi papá me volteó a ver con una sonrisa cómplice.

- Papá NO.- dije riendo

-Te gusta.- afirmó

-No, no me gusta.- dije tratando de ocultar una sonrisa.

-Si te gusta.- volvió a afirmar

-¿Quien le gusta?.- pregunto Dani abriendo la puerta.

-El vecino.- contestó mi papá.

-¡QUE NO ME GUSTA!

-¡SI TE GUSTA!.- Grito mi papá más fuerte haciendo reír a mi hermano.
No aguante más y subí nuevamente las escaleras, antes de apagar las luces nuevamente, me acerqué a la ventana para cerrar las persianas, Marcos estaba de píe frente a la mía, me saludo con una mano y yo hice lo mismo , cerré las persianas y apagué la luz, me quede pensando un poco ¿De verdad, me gustara Marcos?

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Mi alarma me despertó exactamente a las 7:00 am, como estábamos en cuarentena tenía clase de literatura a las 7:30 am.
Tome mi toalla de baño y me dirigí con toda la pesadez del mundo, me aseé y volví al cuarto, me cambié y peiné, me puse lo más presentable que pude y baje como rayo y Calente agua que después vacíe en un termo y prepare café.

Encendí la computadora y me conecte al igual que mis compañeros.

Salude a unos cuantos antes de que se conectara el maestro.

La clase finalizó una hora después, ¿los maestros pensaban que uno no tenía vida social o qué pedo?.

Pinché coronavirus te odio.

Cuando a note mis deberes, baje a desayunar junto a mi papá.

-Al rato  iremos a la iglesia.- Me aviso, creo que vio mi cara de ¿WTF? Por que explicó.- Es el aniversario luctuoso de tu mamá, llevaremos las cenizas a la iglesia y ofreceremos una misa, invitaré a los de enfrente por si quieren ir.- Me dio una mirada triste y levantó su plato.

El también la extrañaba tanto como yo a ella.
Con todas las cosas en mi cabeza había olvidado una fecha tan importante, hoy se cumplían once años desde la muerte de mi mamá. Y dolía como si hubiera sido ayer.

Subí hacia el cuarto y comencé a cambiarme. Nuestra tradición era ir todos de blanco, era el color preferido de mi mamá.

Salimos una hora después y esperamos en la puerta a que llegara la familia de Marcos y Enrique, ademas Kevin traía a la que supuse era su novia, eran nuestros únicos invitados.

La misa transcurrió y llegó el momento de que alguien dijera algunas palabras hacia nuestra madre. Nadie se levantó.
Tome todas las fuerzas del mundo y me levante y camine hacia el padre quien me cedió el micrófono.

-Mamá, no sabes cuánto te extraño, hace once años que me dejaste y parece que es el primer día, no puedo evitar recordar la llamada de mi papá avisándole a mi abuela del accidente , aún recuerdo cuando llegamos al lugar y te vi dentro del camión deshecho, tú tenías tus ojitos abiertos y mi papá no dejo que nos acercáramos a ti, aún recuerdo la última llamada, el último beso que me diste cuando te fuiste, te extraño mucho y quisiera que estuvieras aquí para que vieras todo lo que he logrado.-No me di cuenta en que momento había terminado llorando a mares.- Se que siempre te llevo en mi corazón y que siempre me estás cuidando, gracias a ti tengo a mis hermanos y a un papá excelente, te fuiste pero me dejaste la mejor familia.- terminé soltando un sollozo bastante fuerte, Carlos de paro de su asiento y vino a mi a abrazarme y después se él todos los demás.

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Me costo mucho escribir este capituló, literalmente estoy llorando a mares!