19

2.3K 145 8
                                    

Me desperté a la mañana siguiente con una pierna encima de Eduardo y dándonos la cara el uno del otro. Su brazo estaba sobre mi cintura yo estaba usando su otro brazo de almohada y una de sus piernas estaba por entre las mías. El todavía respiraba despacio y profundamente cuando me desperté y vi sus cadenas colgando en su pecho.
Me moví, quitando la pierna encima de su muslo para volver a cerrar los ojos, lo sentí respirar profundamente y se alejó un poco de mi.
Agarró su teléfono y escuche como sus dedos empezaban a tocar la pantalla, me estire un poco y el se asustó.

-¿Estás despierta?.- pregunto

-Si.- susurré.- Es hora de levantarnos, Carlos debió haber llegado en la madrugada, así que tendremos que ser silencios.

El se vistió y yo me puse unos shorts junto a una playera que era de el y que había olvidado hace algunos días.

-Te queda mejor que ami.- dijo depositándome un beso en la frente.

Bajamos las escaleras despacio y lo despedí en la puerta, me fui hacia la cocina y empecé a hacer el desayuno.

-¿Ya se fue Marcos?.- me preguntó Carlos sacándome un susto y tomando una manzana.

-¿Que?.- dije confundida y un poco nerviosa.

-Hermanita, somos casi gemelos, te conozco mejor de lo que crees, solo ten cuidado, mi papá piensa que todavía eres una niña.- dijo subiendo nuevamente las escaleras.

Seguí cocinando y después comí sola, deje un poco por si Carlos quería y subí a mi habitación.
Mas tarde la puerta de mi habitación se abrió dejando ver a Mayve quien traía a su perrita.

-Hola, me tienes muy abandonada.- me dijo soltando a la perrita que se fue corriendo al balcón.- Hoy en la noche, vamos a ir a la casa de Ana, Kevin va a ir a pedir su mano y mi mamá quiere que vayas tú también.

-Yo?.- me sorprendí un poco.

-Si, ya eres parte la familia, ademas mi abuela espera que la próxima boda sea la tuya.- Dijo riendo.- O el próximo nieto sea el de ustedes.

-Mayve, que cosas dices.- dije un tanto nerviosa.

-Ay Isa, no te hagas, que anoche no llego a dormir Eduardo, mi mamá ya está planeando el baby shower.- dijo entre risas y yo me puse colorada.

Seguimos platicando un rato más y después ella se tuvo que ir a cambiar.

Oí la puerta de abajo y baje a ver quien había llegado, vi a mi papá un poco cansado, su cara lo decía todo, su trabajo era de los más agotantes y muchos no valoraban el esfuerzo que hacen todos los camioneros.

Calenté la comida que le había dejado a Carlos y se la serví.
El comió entre bromas y platicas.

-Oye hija, tú y Carlos ya están grandes, tú mamá aún me duele, pero siento que es momento de hacer mi vida.- suspiro pesado y yo me quede en silencio.- he estado platicando con la secretaria de mi patrón, no es nada serio pero si quiero que lo sea.

-Papá... yo no se que decir, tú tienes el derecho de rehacer tu vida nosotros no somos quien pare juzgarte.

-Mi Isabela, es que verte a ti es verla a ella, me dedique a ustedes, quise hacer lo mejor que pude como padre, ahora ustedes ya están grandes y yo tengo miedo de quedarme solo.-Dijo reteniendo sus lágrimas.

-Tú no vas a estar solo, me tienes a mi y tienes a mis otros hermanos, hiciste un excelente trabajo como padre por que gracias a ti somos lo que somos, te amo papá y si ella te hace feliz entonces no tienes nada que pensar.- Lo abrace haciéndole saber que si el era feliz yo lo sería.

Mi papá es el hombre más honesto y humilde como conozco, es momento de que el pueda hacer su vida tranquilamente sin preocuparse de nosotros.

-saldré un momento, tengo que pensar en cómo se lo voy a decir a tus hermanos ¿Vas a salir?.- dijo parándose de la mesa.

-La señora Vero me invito a pedir la mano de Ana ¿Puedo ir?.- le supliqué.

-Claro que si, pero no llegues tarde que mañana trabajas.

Subí después de que mi papá saliera y comencé a arreglarme, recibí una llamada de Eduardo haciéndome saber que me iría con el y Mayve en el carro.

La cena estuvo de lo más tranquila y los papás quienes ya sabían de la propuesta, cedieron la mano de Ana haciendo los planes de la boda.

Se veían muy felices, ojalá llegue un día en el que yo esté así de feliz como ella.

TENIAS QUE SER TÚ (Markitos Toys)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora