Gracias mamá p.2

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Amelia

No sé a quién odio más en estos momentos si Harrison por aceptar la invitación de mamá o si a mamá por decir todas esas cosas en inglés y frente a Harrison.

-Bonita casa -le dice Harrison a mamá-

-Gracias -responde- voy a la cocina a buscar lo que prometí, ya vuelvo -sonrie-

-¿Tan mal está que haya aceptado la invitación? -me pregunta Hazza-

-Claro que no -intento mostrar mi mejor sonrisa-

-Avísale a tú cara -sonrie-

-Que gracioso -lo fulmino con la mirada-

-Lo sé -responde-

Solo le pido a la vida que ni mi hermana ni papá lleguen a casa.

-Espero que te gusten -dice mamá quien volvió de la cocina-

Harrison saca uno de los dulces y enseguida se lo echa a la boca. Suelto una pequeña carcajada al ver como se forma una expresión de placer en su cara.

-Esto está delicioso -dice- ¿Tú también sabes hacerlos? -pregunta-

-Si, a veces le ayudo a mi mamá a hacerlos -me encojo de hombros- cuando me avisa que hará -digo entre dientes-

-Tienes que venir conmigo a casa, a Tom le encantarán -comenta-

¿Yo cocinando para Tom Holland? Sería una locura. Bueno, esto ya es una locura.

-¿Dónde se conocieron ustedes? -suelta mamá-

-Caminando por la calle -respondo-

-Amelia chocó conmigo -agrega Harrison-

-¿Fue a propósito Amelia? -mamá me mira curiosa-

-¡¿Qué?! ¡No! claro que no, y-yo no lo vi, fue sin querer -termino de decir-

-Buena técnica -bromea Harrison-

Lo fulmino con la mirada. Estos dos quieren que me de un ataque de vergüenza.

-Y... ¿Cuántos años tienes? -pregunta mamá-

-23 -sonrie Harrison mientras toma otro dulce-

-¿Naciste aquí en inglaterra?

-Sí

-¿Trabajas o estudias?

-¡Mamá! ya basta, pareces policía -le regaño-

-Lo siento -sonrie nerviosa-

-No se preocupe, no me incomoda -dice Harrison- gracias por los dulces, están exquisitos

-Cuando quieras podemos hacerte más Harrison -dice mi mamá-

Jamás volveré a traerlo a casa -pienso-

-Obvio -sonrio con sarcasmo-

Harrison se da cuenta y suelta una carcajada, realmente ha logrado fastidiarme, pero, no puedo enojarme con él.

-Bien, creo que es mejor que me vaya, se me hará tarde -explica Hazza-

-¡Espera! -mi mamá se va a la cocina y vuelve rápidamente- toma -le envuelve los dulces a Harrison- para que ese tal Tom los pruebe y tú puedas comer más

-Es muy amable, de verdad muchas gracias -sonrie-

-Bien, te dejo en la puerta -interrumpo-

-Vamos -Harrison rueda los ojos-

-Que estés bien Harrison, espero volver a verte por aquí -mamá se despide-

Camino con Harrison a la entrada de mi casa para despedirlo.

-Lo pasé bien hoy -comenta con una sonrisa-

-Yo también -respondo-

-¿Segura? -levanta una ceja-

-Si -suspiro- es solo que mi mamá dice cosas sin sentido -suelto una risa nerviosa- pero eres un buen guía turístico y una gran compañía. Gracias por lo de hoy

-No hay de qué, sabes que podemos repetirlo cuando quieras -dice alegre-

-Suena bien -le sonrio-

-Bien, me voy antes de que se me siga haciendo tarde -rie-

-Mejor, avísame cuando llegues -lo miro fijamente-

-Lo haré -me guiña un ojo y comienza a caminar-

Me doy media vuelta y cierro la puerta de mi casa. Mamá me debe muchas explicaciones, primero habló inglés de maravilla, luego soltó comentarios vergonzosos y para finalizar interroga a Harrison. La amo, pero hoy estuvo a punto de hacerme explotar.

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Capítulo cortito, espero les guste!!

Muchas gracias a quienes leen, me motiva a seguir para llegar a más gente🙏🏻💚

Cuando nuestros caminos se cruzan // Harrison OsterfieldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora