Gracias, Tom

311 26 7
                                    

Amelia

-Gracias por traerme -digo cabizbaja-

-Deberías hablar con Harrison -me mira-. él jamás haría algo que sabe que podría hacerte daño. No hubiera hecho lo que hizo si supiera lo que sientes por él.

-No quiero que me trate diferente, tampoco quiero perderlo, Tom... él podría alejarse si lo sabe -lo miro fijamente-. por favor no le digas nada.

-No lo haré, tranquila.

-Gracias -sonrío a medias-. y lo siento por interrumpir tú noche, dos veces.

-No hay problema Amelia.

-Adiós Tom -abro la puerta. Acto seguido, bajo del auto-

-Amelia.

Volteo, cerrando la puerta y miro a Tom por la ventana.

-Dime.

-Piensa lo que te dije ¿si? -sonríe- y avísame cuando te sientas mejor, me dejarás más tranquilo.

-Bueno, gracias.

Me alejo del auto. Tom se pone en marcha, por lo que, en unos minutos ya lo pierdo de vista. Volteo en dirección a casa.

A penas abro la puerta, veo a Maura.

-¿Estas bien? -pregunta preocupada-

El recuerdo de Harrison besando apasionadamente a esa chica rubia vuelve a invadir mi cabeza. Mi pecho se aprieta nuevamente, y la falta de aire comienza a sentirse. Miro a Maura y mis lágrimas comienzan a desprenderse por mis mejillas. Mi hermana se acerca rápidamente, abrazándome con fuerza.

-Oh, pequeña -susurra-. todo va a estar bien, todo va a estar bien.
__

Harrison

-Sam, Harry ¿Han visto a Amelia? -pregunto preocupado-

-Estaba con Tom hace un momento -responde Sam-

-¿Cuánto es "hace un momento"?

-¿15 minutos? -dice Harry-

-Genial -ruedo los ojos-. ¿Dónde estaban?

-En la cocina -dice Sam-

-Gracias.

Comienzo a caminar entre la gente para llegar a la cocina. Sin embargo, cuando ya estoy allí no hay señales de Tom ni mucho menos de Amelia.

Le envío un mensaje a ambos para saber dónde están. Guardo el móvil y veo a Leo.

-¡Leo! -grito acercándome-. ¡Leo!

-¡Harrison! -sonríe-. el buen amigo Harrison -me toma por el hombro-. Sophie ¿Sabías que este chico es el mejor amigo de Tom Holland?

Perfecto, está ebrio. Sophie asiente soltándo una carcajada. Corrección, los dos están ebrios.

-¿Has visto Amelia? -pregunto-

-No -responde-. mi amiga está pérdida -hace un puchero-

-No te preocupes, la voy a encontrar -me suelto de su agarre-. volveré por ti cuando lo haga.

Rápidamente me alejo de él, sé que si me quedaba un poco más no podría sacarlo de encima.

Me muevo entre la gente buscando a Amelia y Tom, pero, no hay señales de ellos por ningún lado.

Al cabo de unos minutos, logro visualizar por fin a Tom, quien aparece por la puerta de la casa. Sin embargo, Amelia no está con él. Me acerco rápidamente.

Tom

Ingreso a casa nuevamente. Harrison, me encuentra con la mirada y se acerca.

-¿Has visto a Amelia? -pregunta Hazza-. tus hermanos dijeron que estaba contigo.

-Sí -respondo-. pero, no se sentía bien y me pidió que la fuera a dejar.

-Mierda ¿Qué pasó? -me mira preocupado-. ¿Estaba mareada? ¿Le dolía la cabeza? ¿Bebió alcohol?, dime que no lo hizo.

-No era nada de eso Hazza -intento tranquilizarlo-. ¿Recuerdas a Erick?

-Sí -responde-. ¿Qué tiene que ver Erick con que Amelia se...

-Tiene todo que ver -lo interrumpo-. ese idiota intentó pasarse de listo con Amelia -explico-. le afectó la situación y quiso largarse -miento-

Bueno... no es una mentira al cien por ciento, pero, tampoco es toda la verdad.

-¿Por qué no me pidió a mí que la fuera a dejar? -me mira-. en eso habíamos quedado, yo le había prometido a su mamá que...

-Te vió ocupado Hazza -lo vuelvo a imterrumpir-.  y como tenía muchas ganas de largarse me lo pidió a mí.

-Entiendo -resopla-. iré a verla.

-¿Qué? ¿Ahora? -lo miro sorprendido-

-Sí -se encoje de hombros-

-¡No! -le grito-

-¿Por qué no? -me mira extrañado-

-Porque... -pienso-. porque Maura ya la estaba consolando y porque... había tomado un medicamento que... que la haría dormir, así que, debe estar durmiendo -miento-

Mierda, soy pésimo mintiendo.

-¿Medicamento para dormir? -Hazza entrecierra sus ojos- Amelia nunca me ha hablado de eso.

-Oh si, es que, la situación la puso tan mal que creyo que sería una buena idea para dormir tranquila -explico- ¿Una cerveza? -sonrío-

-¿Entraste a casa de Amelia?

-No -respondo-.

-¿Entonces cómo sabes que Maura ya la estaba consolando? ¿o que se tomó esa pastilla? -mira confundido-

-Digo, sí, pero, sólo un momento -suelto nervioso-

-Eh... ok -eleva una ceja-

-Mira, mañana podrás hablar con ella. Ahora deja de interrogarme, que me pongo nervioso -me excuso- ¿Quieres una cerveza o no?

-Está bien -suspira Harrison-

Por dios, eso estuvo cerca. Espero que Amelia no vuelva a pedir que la cubra con algo.

Harrison

Conozco a Tom, sé que ha inventado la mitad de lo que ha contando, pero, no voy a insistir.

Saco el móvil y marco el número de Amelia, sin éxito, pues no responde. Lo intento unas 5 vecez más y nada. Debe estar durmiendo -pienso-. le dejo un par de mensajes, mañana iré a verla. Ahora, ese idiota de Erick las va a pagar.

Cuando nuestros caminos se cruzan // Harrison OsterfieldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora