Me and My Broken Heart.

63. Is Time To Say Goodbye.

Ámbar.

Las últimas semanas han sido una locura, Mike y Kyle se han decidido a que elija entre ellos dos y que mande a volar al otro para siempre, y yo no he podido decidir por ninguno de ellos, por lo que ahora tengo que cumplir citas con ambos y es supremamente agobiante y agotador, ellos no se relajan y las citas son estresantes y todo el tiempo que estamos juntos es demasiado forzado y estresante.

Primero Mike quiere demostrar que puede ser un buen hombre de familia y que puede proveer un hogar y cubrir todas las necesidades de una familia, junto con su hermano recuperaron la granja familiar y la han arreglado tanto que ya es productiva y es un monto de capital que tienen cada mes para ser utilizado en lo que ellos decidan.

Por el otro lado está Kyle, que intenta por todos los medios posibles demostrar que puede ser sensible, cariñoso, un buen ser humano en todo el sentido de la palabra, y no la persona desagradable y prepotente que conocí en la fiesta de cumpleaños de Demian.

Cada uno de ellos a su manera intenta ser el mejor novio posible, y no me quejo, aunque lo parezca, pero es demasiado agotador estar perfecta para dos hombres que son tan diferentes y que vienen de mundos tan distintos.

Es cierto que con Kyle podría estar en el mejor buro del estado, tendría comodidades y tendría todo lo que he soñado tener en toda mi vida, pero me convertiría en el muñeco de porcelana que hace parte de la colección de conquistas, tampoco sería malo, pero quiero ser una mujer independiente y no seguir el rol clásico que se le ha dado en la sociedad.

A pesar de todo este caos con ellos, mi vida sigue igual, voy a clases luego al gimnasio, regreso a casa para hacer los deberes, y por las noches hago un poco de meditación, me ducho y a la cama luego de regresar de alguna cita con uno de mis dos chicos, los fines de semana cambia un poco la rutina, generalmente las sesiones fe fotografía son los sábados todo el día o el domingo en la mañana, así que eventualmente también tengo los fines de semana ocupados.

La relación con mis amigos sigue igual, aunque con Carlos he discutido mucho últimamente, por sus faltas a clase, sospecho que mi amigo ha comenzado a consumir drogas, sus ojos, su cabello y su comportamiento un tanto obsesivo lo delatan y por su novia a la que detesto, Aisha me dio muy buena impresión los primeros días conociéndola, pero últimamente parece una loca controladora, tan toxica como Chernóbil y tan controladora como una dominatrix, además que es una celosa irremediable.

Por otro lado, Luisa anda desaparecida desde hace varios días, envió un mensaje diciendo que se iba con su madre para supuestamente pasar un tiempo en calma y despejar su cabeza de muchos problemas que tenía, el mensaje me pareció extraño, primero Lu no diría que estar con su madre era relajante, segundo, ella no se mete con nadie y no creo que tenga problemas con la gente y por último la forma en que estaba escrito el mensaje me decía que algo no encajaba del todo.

Demian y Mat, siguen en su jueguito de me gustas, no me gustas y eso ya me tiene cansada y agotada mentalmente, además que con la aparición de Kaleb todo se complicó mucho más, pero en ese embrollo no quiero meter mis narices.

Y para terminar Thomas, mi benefactor, reapareció y por lo que me ha dicho, sus negocios lo van a retener en la ciudad por más tiempo del acostumbrado, ósea que mi vida ahora parece un manicomio en llamas.

Lo único que parece funcionar en mi vida es el tiempo, afortunadamente se acerca el final del semestre, el final de la carrera y el final de muchas cosas en mi vida, sería como volver a nacer y podría sentirme libre otra vez.

Me levanté de la cama y fui al baño para hacer mis necesidades fisiológicas, después de haber estado tanto tiempo debajo de las sábanas era hora de depositar. Terminé de hacer lo y me metí en la ducha, abriéndola completamente para que el agua fría lavara todo mi cuerpo desnudo.