Six Lions 👑 G-Idle

Capítulo 56

Soojin

― ¿Esto que tiene? ―era la cuarta vez que hacía esa pregunta y Shuhua sonrió amablemente, no le molestaba tener que explicarle de qué estaban hechos los alimentos o como se elaboraban. Incluso consiguió a uno de los agricultores de calabacines para que le explicaran de primera mano cómo era que se cosechaban aquellos vegetales. Cada vez que Soojin comía algún vegetal, se giraba para ver a Soyeon y en ocasiones la reina negaba poniendo una cara de asco, al principio le pareció raro, pero después la hizo reír.

―La base es de harina de trigo con almendras trituradas, lo rellenan con duraznos y ciruelas rojas, después lo cubren con una crema de azúcar y vainilla ―Soojin sonrió analizando la explicación de la dama, después llevo el pequeño pastel cuadrado a su boca y le dio una gran mordida. Era el sexto postre que probaba esa noche, cada uno de ellos eran sus nuevos favoritos, estaba encantada y se quedó inmóvil cuando Shuhua le quitó migajas de la barbilla con una servilleta de tela.

Aquella noche la dama usaba un vestido rosa de estampado floral, cada pequeña flor debió ser pintada a mano de modo perfecto. Soojin le mantuvo la mirada a Shuhua, que estaba llevando el cabello recogido en una coleta baja, alrededor de su rostro los mechones fueron rizados dándole un aspecto más elegante que el de siempre, estaba maravillosa.

―Es realmente delicioso ―le dijo y Shuhua sonrió radiante, hacía eso cada vez que le comentaba algo bueno de la comida. En el rato que llevaban a un lado de la larga mesa de alimentos, ellas habían comido las distintas carnes con vegetales que la hicieron sentirse más satisfecha de lo que nunca estuvo. Los vinos fueron limitados por la noche, en su lugar Shuhua le enseñó los misterios de otras bebidas como la sidra frutal. Después de la cena pasaron al sector de postres y ahí se habían quedado por lo que ella calculaba que debían ser dos horas. Shuhua recomendaba todo lo que tenía chocolate y Soojin lo terminó probando todo, porque la noche era joven y se estaba divirtiendo.

Los espectáculos se siguieron dando por todas partes, la noche fue un carnaval después de la cena con todos los platillos que se producían en el reino, en su opinión, Soyeon se había excedido al organizar todo aquello. Aunque muchas cosas eran ideas de Shuhua, quien ejecutaba lo que ella deseaba sin consultarlo con la reina, el nivel de poder que esa linda chica manejaba era más del que cualquiera en Muhan soñaría con tener.

Una de las presentaciones era la de las serpientes, cuando la mujer bailó ante ellas, la comandante se fue tan lejos como pudo de la mesa central, pero en ese momento estaba junto a la reina y ambas conversaban amorosamente. No tenían nada que ocultar, los rumores en Muhan habían resultado reales y Soojin se sentía afortunada en poder presenciar aquella pareja siendo feliz. También le gustaba ver las miradas asombradas de los cortesanos que miraban a la reina y su pareja sutilmente, algunos rostros se cargaban de admiración y otras de desprecio, el mundo siempre era así de contradictorio.

―Entonces, la reina de Muhan es nuestra ilustre visitante, que exótica y fascinante mujer... ―un hombre alto de cabello canoso se acercó a ellas sonriendo tan grande que Soojin pudo verle las encías, en una mano sostenía una botella de vino casi vacía, en la otra tenía una copa rebosante. Ella había estado tan distraída viendo a Yuqi haciendo reír a Soyeon, que no se dio cuenta de la presencia tambaleante de aquel caballero.

―Señor, ¿podría retroceder? ―Shuhua se interpuso entre ella y el hombre, el traje elegante del caballero llamó la atención de Soojin, era el mismo hombre que dobló su rodilla porque Minnie prácticamente le forzó a hacerlo. Al parecer buscaba generar más controversia que la que provocó al inicio del banquete, Soojin suspiró sin ganas.

―Oh, claro no quisiera molestar a la reina ―el hombre negó con sus manos alzadas y derramó algo del vino, Shuhua le gruñó una amenaza que ella no consiguió escuchar.