Capítulo 67

292 62 30
                                    

Minnie

― ¿De verdad te has negado a ver a la reina Soojin? ¿Sabes que a ella no se le pueden negar las cosas? Estas jugando a algo riesgoso con esto ―Minnie tuvo que preguntarlo de nuevo porque el que alguien le dijera que no a Soojin era difícil de comprender, además su amiga había estado hablando entre gruñidos mientras se cambiaba los vendajes y no estaba segura de haberle entendido bien.

―No quiero que me vea así, no preguntes porqué, solo no quiero verla.

― ¿Acaso pasó algo? Te estabas llevando muy bien con la reina ―la ruda mirada de Shuhua se encontró con la suya, en ese instante Minnie temió por su vida.

La mano derecha de la reina llevaba cuatro días encerrada en sus aposentos, la habitación olía a menta por los tónicos que ella sola se aplicaba en sus manos quemadas. Minnie no estaba segura qué había motivado a su amiga a aferrarse de un candelabro de hierro hirviendo, cuando se lo preguntó a Miyeon esta no quiso explicar nada, era muy claro que parte de aquel encuentro fue más riesgoso de lo que ellas decían. La duda la estaba devorando internamente así que Minnie decidió probar su suerte.

―Puedes contarme lo que sea Shuhua, lo sabes.

La dulce joven hizo un mohín mientras dejaba las vendas usadas en un cesto de tela, ahora sus manos tenían vendajes limpios bien colocados en las zonas más afectadas, pero al paso que iba, ella no tendría que ponerse nada muy pronto.

―La reina Soojin es maravillosa, es muy inteligente y bella y me vuelve algo loca.

Minnie sonrió curiosa mientras se llevaba un chocolate a la boca, en el sofá de enfrente Shuhua enterraba su rostro en un almohadón. Era la primera vez que le comentaba algo como aquello. Ellas nunca habían sido chicas enamoradizas, no tenían tiempo para eso considerando los trabajos ocupados que tenían, pero ahora con la reina de Muhan ahí, muchas cosas estaban cambiando.

― ¿Por qué te pone algo loca? ―Minnie no estaba segura de querer saberlo, pero de todos modos lo preguntó porque eso hacían las amigas, se entrometían.

―Pues no lo sé, cuando te gusta alguien a veces no hay una buena explicación, solo sucede y con ella, bueno... sucede.

Minnie movió la cabeza de modo afirmativo, en su mente aquellas palabras tenían sentido y sin duda comprendía cómo se sentía Shuhua en aquel momento. Verse débil delante de las personas que deseas impresionar no es sencillo, la vulnerabilidad no es para todos. Lo que Minnie dudaba, era que Soojin fuese a quedarse con una negativa, estaba casi segura que la reina haría a Shuhua pagar por su irrespeto.

―Pues te deseo buena suerte con la reina, ella te hará pedirle perdón por más tiempo del que vas a vivir―la soldado puso malicia en la frase, la dama le tiró un almohadón y se arrepintió al instante porque el lanzamiento le lastimó las manos.

―Te golpearía, pero no puedo. ―la dulce chica hizo un puchero.

―No eres tan aterradora como piensas Shuhua.

―No eres tan graciosa como piensas Minnie ―a pesar de esta discutiendo, Shuhua sonrió cuando la soldado fue hacia a ella para despedirse―. Buena suerte con tus suegros.

―Oh cállate... ―Minnie empezó a reírse y le dejó un beso en la cabeza a la dama. Pero ella tenía razón, porque antes de ir a ver a Shuhua había recibido la orden de reunirse con Yuqi en los calabozos. Los padres biológicos de la princesa estaban en los terrenos del castillo y alguien tenía que acompañar a Miyeon a verlos.

Aquella mañana el clima estaba un poco más amigable, el sol había salido y el cielo estaba tan azul que dolía verlo. La mueca de la princesa debía ser por el resplandor brillante del sol que las calentaba ligeramente.

Six Lions 👑 G-IdleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora