Capítulo 53

299 64 45
                                    

Shuhua

― ¿Es extraño que dos reinas se vean tan cómodas estando en un jardín congelado? A mí me parece algo raro, considerando que pensamos que Soojin vendría a arrancarnos la cabeza, pienso que es un poco anormal que ella esté viendo plantas muertas junto a Soyeon, quién nunca se ha interesado en eso ―Shuhua vio una sonrisa creciendo en los labios del general Hyun, este había estado viendo a las dos reina caminando juntas por los senderos blancos, incluso las capas de las damas estaban empezando a transformarse en mantos con copos de nieve recién caídos del cielo cada vez más gris.

― ¿Alguna vez hablas? ―Shuhua ladeó la cabeza, Mark seguía a su reina con la mirada de un modo protector, pero también parecía adorarla en silencio. Ella lo entendía, trabajar para una reina tan hipnotizante debía ser difícil, Soojin le robaba el aliento cada vez que sus miradas se cruzaban.

―Claro que lo hago, sobre todo cuando algo me interesa.

― ¿Entonces por qué no me respondes? ―Shuhua frunció el ceño.

―Porque no estás diciendo nada interesante ―Mark susurró sonriendo.

― ¿Hablar conmigo no es interesante? ¡Oye! Que descortés ―ella se encontró alzando la voz al instante, Mark no mostró ninguna reacción ante el grito que bien pudo dejarlo sordo. A la distancia las dos reinas dejaron de hablar de lo que fuese que las reinas hablaban en medio del frío jardín y Soojin interrogó a su general con la mirada, él solo se encogió de hombros viéndose inocente, Shuhua le vio malhumorada.

―Solo para que quede claro, yo soy una dama sumamente interesante, todos me lo dicen siempre ―dijo ella haciendo un mohín, porque estaba molesta y porque se estaba muriendo de frío. Las reinas eran unas locas por estar afuera.

―Supongo que lo eres ―Mark respiró hondo, después dejó salir el aire creando una nube blanca en su rostro, lo hizo que Shuhua quisiera intentarlo, pero no funcionó. Al lado del general vestido de negro, la mano derecha de la reina siguió suspirando con fuerza para crear una nube con su aliento, cada vez que fallaba ella gruñía como un gatito peleando y Mark le sonreía de manera apenas perceptible.

Cuando se quedó sin aire, ella dejó al misterioso hombre para acercarse a las dos reinas, que seguramente perdían el tiempo afuera del castillo para evitarse el bullicio de los sirvientes que decoraban el lugar para el banquete. Adentro todo era un poco caótico, se movían decoraciones, se guardaban piezas de arte, se sacaban sillas, se abrían ventanas, se desempolvaban vajillas, se instalaban candelabros, se preparaban alimentos, se pulían copas, todo era sumamente complicado y a Shuhua la estresaban más que a los demás, su opinión era consultada para la mínima cosa y se había hartado después de cinco minutos.

Las dos reinas la vieron acercarse, ellas estaban analizando abonos y semillas, parecía realmente aburrido, pero Shuhua no se atrevió a juzgar. Cuando Soojin estaba cerca ella intentaba ser una dama bien educada, no quería asustar a la reina o hacer que cambiara de opinión respecto a declarar la guerra. Sonriendo de modo inocente, Shuhua vio a su reina y esta esperó a que ella dijera algo.

―Los viejos emblemas se mancharon al estar guardados...

―Oh por los viejos dioses, ¿hablas en serio? ¿Los emblemas de mi madre?

―Si esos mismos ―Shuhua retrocedió tres pasos cuando Soyeon se le acercó, detrás de la reina rubia con corona dorada, otra reina de cabello negro y labios rojos sonreía.

―Ella vendrá a este banquete, quería que viera sus emblemas ―Soyeon suspiró creando una nube más grande que las del general, Shuhua pateó una roca molesta. Todos podían hacer eso menos ella, ¿acaso estaba defectuosa? No quería una respuesta.

Six Lions 👑 G-IdleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora