Six Lions 👑 G-Idle

Capítulo 68

Soojin

Sus nudillos golpearon la puerta un par de veces, adentro la chica gritó una amenaza para enviar lejos a quien estuviese por perturbar su paz, la reina negó con la cabeza a pesar de estar mediamente divertida por la respuesta de Shuhua. Sin pedir permiso, Soojin abrió la puerta de la habitación de la dama y entró dándose cuenta que la chica se estaba atendiendo las manos. Las quemaduras habían tomado un color menos enfermizo, su piel estaba limpia y cada vez más recuperada.

―Se ven bastante bien, sanas rápido ―Soojin fue al sofá que la dama ocupaba para terminar de rodear sus dedos de suaves vendas. Shuhua parpadeó viéndola sin entender por qué la reina de Muhan estaba ahí con ella.

―Su majestad, dígame ¿Cómo resultó el juicio? ¿Hicimos justicia tal como esperaba? ¿Necesita algo? ―Shuhua parecía confundida con su presencia y había optado por aquel tema, lo que tenía mucho sentido. Soojin iba a responderle con un regaño, pero se contuvo cuando notó que Shuhua hizo una mueca de dolor, de inmediato la reina se disculpó con una mirada apenada.

―Creo que lo sabes, el juicio resultó bien. Mark y Presley fueron a la plataforma esta mañana, los bandidos están todos muertos, no tardaron tanto como creímos.

―Ya estaban muy golpeados antes de ir a la plataforma y el clima...

―No vine aquí por eso Shuhua ―Soojin cortó sus meditaciones― en estos días, has visto a todo el mundo menos a mí. Por alguna razón rechazas mis pedidos para visitarte y eso se me hace muy injusto. ¿Te molestaría explicarme que pasa contigo?

―Yo, no lo sé... ―Shuhua se llevó las manos al regazo viendo como Soojin ordenaba los frascos con lociones y medicamentos en la mesita de café.

Por primera vez desde que Soojin había llegado a aquel castillo, veía a la mano derecha de la reina quedarse en silencio. Era algo bastante inusual. Soojin había pedido verla y Shuhua se había negado varias veces, a la reina de Muhan nadie le negaba las cosas. Así que esa mañana ella fue por su cuenta, ignorando los guardas que le pidieron anunciarla.

El juicio de los Oaks generó toda clase de habladurías como era de esperarse, las torres negras estaban impuestas en medio del lago, incluso cuando los criminales estaban ya todos muertos. Durante los tres días que pasaron ahí colgando, había llovido y después nevado. El clima les había la tenido la misericordia que la reina les negó.

Soojin se había ido a dormir con esa vista desde su habitación, la plataforma le gustaba. Los gritos agonizantes fueron perturbadores, pero la justicia no era bonita.

―Te metiste en una situación riesgosa de la que nadie me comentó nada, te quemaste gravemente, casi te rompen el cuello y ahora te reúsas a verme ―Soojin no estaba segura de porqué quería molestar a Shuhua, le gustaba ponerla nerviosa y en ese instante sin duda lo estaba. Tampoco entendía por qué le estaba exigiendo una explicación a la dama de hermosos ojos oscuros.

― ¿Me está pidiendo un informe a mí? ¿Yuqi no le ha dado un reporte de lo que pasó? Pensé que ellas lo habían narrado todo ―Shuhua se puso de pie, se veía aturdida. Soojin se quedó en el sofá grande viendo como la dama se paseaba por el lugar luchando con sus propias ideas, lo que era realmente entretenido de ver.

―Claro que lo hizo, he leído todos los reportes, pero no es lo mismo a saber de ti.

La dama se giró haciendo su largo cabello bailar en su espalda, Soojin sonrió de modo apenas perceptible ante ese bello gesto que Shuhua hacía sin darse cuenta. En realidad, la dama hacía cosas realmente bellas y adorables con sus muecas, incluso en ese momento mientras la veía con el entrecejo hundido, se veía realmente linda.