Capítulo dieciocho: Fuy un grandísimo imbécil

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Narra: Camil.

---¿Y las preguntas?---pregunto al ver que no llevaba con sigo su libreta de apuntes.

--- No te llame para eso---me dice con una coqueta sonrisa.

No comprendía lo que pasaba.

---¿Entonces para que me llamaste?---pregunto muy curiosa por saber su respuesta.

El no me responde y solo se fue acercando poco a poco a mi. Mi corazón comenzó a latir ha tal intensidad, que por un segundo pense que seme iva a salir del pecho. Nuestros labios se encontraban a pocos centímetros de distancia.

Y cuando decidí cortar esa amarga distancia entre nosotros dos. El timbre de su departamento nos interrumpió, ocasionando ha que yo me alejara de él.

---¿Y el baño?---pregunto disimulando mi molestia.

Él con una sonrisa me señala en donde se encontraba el baño. Yo solo asenti.

Narra: Oliver.

---Te vas a quema en las llamas del infierno si continúas con esto---me regaña Broily.

Mi padre avia muerto hace muchos años, como para ahora soportar los reproches de mi amigo.

---Eso no es su problema---le digo con enojo---ademas---me doy la vuelta encontrándome con la mirada enojada de Elías, no estaba de acuerdo con lo que estaba tratando de hacer---pense que Thomson no te agradaba---le digo cruzandome de brazos y demostrandole una sonrisa.

---No, la chica es diferente. En un buen sentido---me dice mi amigo de copas con una boba sonrisa.

---Deten esto antes que ya no puedas. Ella no merece que te involucres con ella puro por su apellido.

--- No se preocupen chicos---esa voz me hizo temblar, por un solo segundo avia olvidado que la rubia se encontraba en mi baño---y muchas gracias por tratar de protegerme.

Mi corazón se partió al ver sus ojos llorosos. No sabía que era justamente lo que pasaba con migo, pero sinceramente este sentimiento no me estaba ayudando para nada.

--- Yo te lo puedo explicar---le digo con nerviosismo.

---Ushhh... No trates de defender lo indefendible---su rostro lucía triste, pero ha la misma vez dolido---fue mi culpa por quererte ayudar. Ahora comprado el empeño de mi padre con que jamás aceptará una entrevista.

---Se que suena bastante mal. Pero no es tan malo como parece.

---Malo o bueno. Eso ya no importa, lo que realmente importa aqui es que te di una entrevista exclusiva---ella sonríe con amargura---y aún así tu intentaste hacerme daño.

--- Mi intención no fueron esas---era la primera vez. En la cual no sabía que hacer o decir para que me creyera.

---¿A no?. Por que al parecer eres una persona muy ambiciosa, una persona que no se conforma con lo que tiene o con lo que puede llegar a lograr en un futuro. Que lastima que fuy tan estúpida como para llegar a pensar que en ti avia algo más que eso.

Sus palabras me dolieron. Me hirieron de alguna cierta forma y no sabía por que, era una niña rica que al parecer sabía mucho más de sentimientos que yo.

Yo. Un hombre que no le importa los obstáculos que tenga que pasar, con tal de alcanzar mis sueños. Y hay estaba.

Viendo como la chica que me ayudaría a conseguir el asenco que tanto anhelaba. Se marchaba de mi departamento, era mi boleto.

Mi Ángel [Terminada].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora