Mi Ángel [Terminada].

Capítulo veintiocho: Playa

Narra: Oliver.

Existen tantas posibilidades y a la misma vez tan pocas, no es un mito que los sentimientos te vuelven más débil, por que lo cierto es que no solo se vuelve en una debilidad, si no que puede ser tu ruina total.

Puede destruire mentalmente poco a poco. Cada hora que pasa, cada minuto. Cada segundo se a vuelto una guerra completamente. Una guerra en la cual estoy perdiendo, siempre en una guerra hay un triunfador. Pero la cosa aquí es que el que luche con migo estará destinado a la ruina. Acabaremos siendo dos perdedores, dos perdedores y víctima de un amor que esta creciendo día a día.

Volviéndose cada vez más fuerte, volviéndose cada vez más doloroso. Ella aún no está pagando las consecuencias de vivir esta locura desenfrenada, pero se que tarde o temprano tendrá que pagar las consecuencias con crisis. No importa lo que haga, no importa si lucho con todas mis fuerzas esta batalla. No importa si soy yo el que gano, las consecuencias serán las misma. Nos emos condenado, bueno. Fue ella la que se condenó, quiso estar con una persona que ya estaba condenada hace mucho tiempo. En las sombras, ella desea iluminar ese túnel sin salida. Pero por más que dese iluminar todo su al rededor, si esta a mi lado esa luz será tan inútil como lanzarle un balde de agua a una pequeña fogata. Todo se volvera nada.

Bueno, se volvera en dolor. Ella es mi castigo, el castigo que la vida me ha mandado. Amarla es mi condena, deseo alejarme de ella.

La odio de alguna cierta forma, odio que aún este a mi lado, la quiero tan lejos de mi pero a la misma vez deseo que jamás me abandoné. Que esto no sea una simple tontería, por que para mi no lo es, es lo más real y importante que jamás me ha sucedido. Odio que sea ella la que tenga que pagar con crisis toda esta mierda.

---Es hermosa---me dice con una sonrisa Broily.

--- Lo se. Es demasiado para mi---pronuncio con amargura---no importa lo que haga. Jamás lograré merecerla.

---Quizás ella...---ni siquiera permito que siga hablando.

--- No trates de convemserme de que ella podría cambiar eso---Broily solo da un gran suspiro.

--- En ese caso disfrutala---yo lo miro---al fin de cuentas. Ella esta aquí, y ya no podemos hacer nada---una Camil se acerca a nosotros---bueno. Yo ya me voy---Broily se marcha sin decir nada más.

Narra: Camil.

---¿Te encuentra bien?--- me pregunta un Oliver curioso.

---Si. ¿Por?.

--- Es que hoy te noto como diferente.

---¿Diferente?--- le pregunto con una risita.

---Si. Como si desearas más que nunca expresar alegría, pero por dentro llevas algo que te está matando---desiaria que Oliver no tuviera razón. Pero la tiene, y eso es lo que mas me duele.

*Flash*

8 años antes.

---Son muchos chocolates---le digo a Lola con una sonrisa.

---¿Y??--- me pregunta con la boca repleta de chocolate, no puedo evitar no sonreír al ver su tierno rostro---hay que disfrutar.

--- En una semana en pieso de nuevo con las químios---le confieso, el rostro de felicidad de Lola desapareció por completo. Ella trata de remover el chocolate de sus dientes---lamento haber arruinado el momento---pronuncio con tristeza.

---Cariño. No tenéis ni que lamentarte, ahora mismo estamos en una puta crinica. Esperado ha que una de las enfermeras vengan por nosotras, esta es nuestra vidas. Aquí fue donde nos conocimos---me dice con una sonrisa.

---Habeses solo desearía que todo esto acabará. Y ya no sufrir más---Lola se acerca a mi, y pronuncia las siguientes palabras.

---Probablemente no salgamos bien de esta enfermedad, o quizás si. ¿Quien sabe en realidad?. Esta enfermedad trae dolor, si. Eso no te lo puedo ni siquiera negar, pero el sufrimiento es algo más allá del dolor. Es algo opcional, y tu lo puedes elegir. El dolor no se puedes detener o controlar, pero el sufrimiento si. Ah ese si podemos controlar.

*Flash*

Una escuridisa lágrima sale de la nada al recordar ese recuerdo.

---¿Angel?---Oliver se acerca un poco a mi---¿Te encuentras bien?---su mirada me tranquilizó por completo, me encantaba tenerlo a mi lado. Siento tantas cosas cuando lo tengo aún costado, no es algo que yo pueda controlar. Sólo pasa, y me gusta.

--- Mi hermana se va a casar en ya poco tiempo. ¿Quieres ser mi pareja?--- el me mira con confusión---para la boda, claro---le digo con una sonrisa.

--- Me encantaría---no deseaba que ese pequeño momento terminará, ya que para mi era nuestro momento. Pero en ese instante llega Zuri.

---Ya vamos a comer---nos avisa. Oliver solo asiente y sin mas comenzamos a caminar asia los chicos.

Yo tomo asiento en una silla muy cómoda real mente, Elías me extiende una hamburgesas y yo la acepto con una sonrisa. Yo le pego un mordisco a la hamburguesa

--- El parqué acuático---dice de la nada Zuri asustandome.

--- No te asusté---me susurra un Elías al oído---ella siempre es así---me dice con una sonrisa. Yo solo asiento.

--- Me parece una muy buena idea. ¿Ustedes que piensan?---pregunta ahora un Broily.

---Ah mi me parece una muy maravillosa idea, y más con esta semana que tendremos---dice Elías.

---¿Problemas en el trabajo?---pregunto curiosa.

---Ojala fuera solo eso...---Elías ni siquiera puede terminar de dar su relato, ya que una mirada malumorana de Oliver lo paraliza. Todos solo guardan silencio, el ambiente se sentía real mente incómodo.

---¿Oliver?--- la dulce voz de Zuri rompe completamente el incómodo momento---¿Tu que dices?. ¿Nos acompañas o no?.

---Okay. Cuenten con migo---el le da un sorbo a su refresco de naranja.

---Camil---yo me sobre salto. Me enfoque tanto en Oliver que no me fijé que Zuri estaba llamando mi atención.

---¿Nos acompañas?--- me pregunta Broily. Quede petrificada.

---¿Yo?---pregunto confusa.

---Si. Tu---me dice Broily con una risita---¿Irás con nosotros?.

---Pueesss...--- Todos se concentraban en mi respuesta, esto era raro. No me sentí muy bien---no lo sé.

---Vamos cami. Será divertido---Zuri me da una amplia sonrisa. Yo miro a Oliver que tiene su mirada clavada en la mía.

---Esta bien.