Profesor (En Edición)

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"¿Ya basta no?" Zack cruzó sus brazos y miró a su primo.

"No estoy haciendo nada malo" rodó los ojos.

"Tampoco nada bueno. Si yo hiciera lo que tú, ¿cómo crees que reaccionaría Melina?" El beta había conocido a una chica de su casta, tan compatible con él que no pudo pasar del segundo mes sin pedirle que sea su novia.

"Melina entendería que eres un universitario, con amigos y muchos trabajos pendientes"

"Claro, amigos, muchos, no solo un omega que no te deja en paz"

"También es mi amigo, además es mi compañero en cuatro clases. Gabriel es un buen chico y sabe de Mateo y mi hija"

"Por eso mismo no deberías dejar que esté tan cerca a ti"

"Tranquilo Zack, queda muy poco para terminar el semestre y seguramente no lo volveré a ver en el siguiente. Además, a la fiesta de la facultad me acompañará Mateo"

"Sólo.." suspiró "Sólo no hagas que lastime a Olivia ni a su madre. Tus intenciones pueden ser buenas pero Gabriel no me da buena espina"

"El que estudies psicología no significa que aciertes cada que intentas analizar a las personas" rió el beta.

"Bien, bien. Hoy iré por la tarde a ver a Olivia ¿estarás ahí?"

"Mañana tengo un examen importante, tengo que estudiar. Le mandaré un mensaje a Matt"

Zack apretó los puños y respiró hondo.

"Tu hija cumple un mes más, sabes que a Emma le gusta reunirnos"

"Mateo entiende lo demandante de mis clases. ¿Por qué tu no?"

"Eres mi hermano, no quiero discutir. Solo te pido que hagas las cosas bien"

El beta se alejó de Aarom y salió del campus universitario.

Ahora era él quien visitaba más al omega y su bebé, llevando siempre las disculpas de Aarom por no poder llegar a las reuniones.

Sí, el alfa tenía clases más complicadas que él. Todo su horario estaba lleno de cátedras de números y fórmulas extrañas, pero ahora pasaba más tiempo en el campus con cierto omega.

Gabriel tenía la edad de ellos. De cabello azabache y ojos verdes, irónicamente similar al alfa.

Aarom lo había conocido una tarde saliendo del campus, a unas calles de la universidad encontró a un alfa hostigado al omega.

No pudo prestar mayor atención pero la conversación se basó en reclamos que tenían al chico llorando y al alfa frente a él con las manos en sus hombros sacudiendo su cuerpo con fuerza.

Aarom no pudo evitar intervenir antes de que el omega termine herido. Tuvo que forcejear con el más alto para que se aleje del chico y luego de eso lo acompañó a su casa.

Desde ahí el omega no pierde cualquier oportunidad para estar con Aarom.

- o -

"Le compré un regalo a Olivia" la voz de Esteban sorprendió a Mateo.

"No era necesario, pero gracias" sonrió cortés.

"Claro que sí, en un mes más estará cumpliendo año y medio. No puedo creer lo grande que está"

Mateo se sonrojó al notar que Esteban había recordado la fecha de su hijita.

"¿Esta vez si me invitarás?" Los meses anteriores el alfa supo de la reunión al siguiente día de que se diera y Mateo se excusó diciendo que salió a último momento, sin embargo Esteban sabía que se debía a la presencia de Aarom, su alfa.