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"Maaaaamá" la boca de Emma hacía formas extrañas que provocan sutiles risitas en Mateo "No, no, Maaaaa-má" repitió frente a Olivia. 

"Non non" dijo la rubia aplaudiendo. 

"Si tu primera palabra es 'no' sabremos que serás muy rebelde, jovencita" achinó los ojos y negó divertida. 

"Se está tomando su tiempo para hablar ¿no crees?" preguntó Mateo desde uno de los sofás, no sabía mucho de bebés pero no creía que tardaran mucho en decir su primera palabra.

"Sí, pero no hay ningún problema con eso. No todos los bebés hablan antes de su primer año" 

"¿Es verdad?, ¡Ah! sobre eso. Ya tengo la lista de invitados para la fiesta de Olivia" dijo emocionado

"¿Quiénes son? ¿Invitarás a los padres de Aarom?" 

"Claro que sí, aunque no sé si querrán venir. Sabes que la señora es un poco.. especial" dejó caer sus hombros algo frustrado "Pero todos los que vinieron a mi fiesta de cumpleaños estarán en la de Olivia" sonrió 

"¿También ese alfa?" 

"¿Quién? ¿Esteban? Sí, también. El cumpleaños de Olivia es días después de concluidas las clases. Así que Aarom podrá venir sin inconvenientes de la escuela, ya la habrá terminado para ese entonces. 

"Solo que no es 'Aarom' el que deberá venir" Mateo la miró extrañado "Deberá ser 'Elliot' ¿recuerdas?"

"¡Diablos! es verdad, ellos vieron a un alfa de traje, con barba y .. ¿Se veía muy guapo, no?" sus mejillas se colorearon. 

"Sí, se veía como todo un alfa, ¿pero qué harán con eso? ¿Lo disfrazarán nuevamente?"

"No, no quiero eso. No saldrá nada bueno con sostener esa mentira. Ya se nos ocurrirá algo" 

Mateo pasó la tarde enviando mensajes a sus amigos y a sus padres. Quería que la primera fiesta de su bebé saliera bien. Habló muy bien con cada uno de ellos y en especial con sus padres.

Por otro lado el alfa de ojos verdes, buscaba las palabras adecuadas para hablar con sus padres. Quería que de una vez por todas conocieran a Olivia. 

"¿Qué pasa?" preguntó su padre sentándose frente a él. 

"Mamá, papá. Ya no falta mucho para el cumpleaños de la bebé de Mateo y él los consideró entre sus invitados, quería saber si ustedes.."

"No" respondió tajante "No iremos" 

"¿Por qué?" 

"Es una fiesta familiar, Aarom. Ese muchacho seguramente invitará a sus padres y gente cercana, nosotros por suerte solo lo vimos una vez y a esa niña nunca" las palabras de su madre le hacían recordar lo mal que llevaba su relación con el omega. 

Mario notó la tristeza en los ojos de su cachorro y con un gesto pidió a Amanda que le ceda la palabra. 

"Hijo, podemos hacer algo. Claro, si tu madre acepta" Amanda levantó un ceja y miró a su alfa, que sonreía tranquilamente "Quizás podamos encontrarnos días antes de la fiesta, conocer a la cachorra y un poco más de Mateo"  la omega rodó los ojos pero su hijo sonrió con fuerza.

"¿Qué dices mamá?" 

"Que situación tan molesta" cruzó los brazos "Más vale que sea pronto porque puedo desanimarme" respondió.

"Gracias, gracias, gracias" dijo antes de salir corriendo a su habitación para llamar al omega. 

El teléfono timbraba y el caminaba de un lado a otro esperando que el castaño atienda. 

Profesor (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora