Echoes | WangXian

Capítulo Diecisiete: De vuelta a Yunmeng

Capítulo Diecisiete: De vuelta a Yunmeng

El tiempo pasó y, en un abrir y cerrar de ojos, el verano se hizo presente en La Profundidad de las Nubes y con él, los discípulos externos se marcharían. Esa semana Nie MingJue apareció para tratar algunos asuntos con XiChen y Lan QiRen, junto a él llegó Meng Yao. Los temas de las grandes Sectas se tratarían esa noche a puerta cerrada, sin embargo, esa tarde, después de que MingJue se instalara, dirigió sus pasos acompañado de XiChen en búsqueda de su pequeño hermano.

Nie HuaiSang descansaba bajo la sombra de un árbol, a su lado estaba Jiang Cheng con su expresión de fastidio habitual —¿No crees que hace demasiado calor?— decía el pequeño Omega agitando suavemente su abanico.

—El verano comienza, cada día será más cálido que el anterior— contestó el Alpha mucho más amable de lo que cualquiera esperaría.

—ChengCheng— murmuró HuaiSang recostando su cabeza en el hombro del joven Alpha —Esa vez, en aquella tienda, cuando me defendiste... gracias por hacerlo, sé que soy un inútil y que mi Cultivo no es bueno, pero, tu alejaste a esas personas— su voz era suave, aunque se podía apreciar un dejo de culpa.

—Solo asegúrate de mejorar tu Cultivo— respondió tomando una de las manos de HuaiSang con las suyas y acariciándola suavemente —Así no tendrás que depender de nadie para que te defienda.

—ChengCheng— volvió a llamar HuaiSang cerrando los ojos y soltando un pequeño suspiro —Sé que fui un fastidio, gracias por soportarme.

Ambos quedaron en silencio por un momento, el viento agitó las hojas de los árboles y algunos pétalos de las flores cercanas bailaron frente a sus ojos, quizás porque se trataba de los últimos días juntos, o porque Jiang Cheng sentía la necesidad de no apartar a HuaiSang esa vez, lo que fuese, terminó por dejar un beso en los cabellos del Omega.

—Te llevaré al Embarcadero de Loto alguna vez— susurró y HuaiSang se limitó a sonreír aun con los ojos cerrados.

En la lejanía, MingJue y XiChen apreciaron la escena con emociones encontradas, la primera reacción del Nie mayor sería ir y apartar a su hermano de Jiang Cheng, sin embargo, al verlo por primera vez después de un año entero, su corazón tembló al reconocer que ese niño que envió a la Profundidad de las Nubes, ahora era un joven hermoso que se alejaba cada vez más de su versión infantil... sus ojos se llenaron de lágrimas, HuaiSang creció en ese año, se convirtió en otra persona, entonces comprendió que, por mucho que lo deseara, su hermanito nunca más sería un niño al que pueda proteger eternamente, crecería y un día se marcharía de su lado, entonces, deseó que sus padres pudiesen verlo, ver al joven de cabellos oscuros y rasgos finos en que se transformó el pequeño niño que amaron tanto.

XiChen por su parte guardó silencio, él también tuvo una extraña sensación al ver aquella escena, de pronto a su memoria llegó el día en que despertó, la imagen de HuaiSang siendo solo un niño concentrado en pintar apropiadamente aquel abanico, bajo la sombra de ese árbol, descubrió que no se trataba más de un niño, ahora le parecía notorio el cambio. Quizás porque él podía entender la responsabilidad de guiar a un hermano menor, empatizó tan bien con los sentimientos de MingJue y su corazón se agitó al comprobar que, incluso HuaiSang creció.

Lan WangJi y Wei WuXian observaban las nubes moverse en el cielo, el Omega descansaba entre los brazos de su prometido, ambos sentados en la hierva se limitaban a permanecer cerca, aquel año fue una sorpresa para ambos, ninguno consideró que terminarían comprometidos y enamorados. En los cabellos de Wei Ying aun descansaba la cinta azul que le prestara Lan Zhan aquella mañana en la posada, a partir de ese día el Omega la exhibió con orgullo, el bordado de las nubes en la cinta dejaba en claro que era un artículo exclusivo de Gusu Lan, aun si sus ropas no eran de esa Secta, algún día lo serían.