Capítulo Treinta y uno: Caos en las Grandes Sectas III

2K 260 90
                                    

N/A: Antes de iniciar quiero contarles una cosa a modo de curiosidad respecto al capítulo anterior, desde que empecé este fic tenía planeado matar a Wei WuXian de esa forma, refiné muchas veces la escena en mi cabeza y siempre pensé que era dramática, pero, nunca pensé que era realmente cruel para los otros personajes, después de publicarlo y leer sus comentarios, lo noté. 

Por otra parte, aun no estoy lista para traer de vuelta a Lanchita, creo que necesita descansar un poco más. 

Disfruten de la historia de los otros personajes y, nos vemos pronto. 

---------

Capítulo Treinta y uno: Caos en las Grandes Sectas III

YanLi abrió los ojos con dificultad, sus parpados se sentían pesados y su cuerpo era una roca gigante e imposible de levantar, después de parpadear un par de veces para adaptarse a la luz, observó en silencio la habitación en la que se encontraba, no reconoció nada. El sitio es bueno, definitivamente no está en una posada, quizás esté en Lanling, después de todo, fue Jin ZiXuan quien la ayudó en el último minuto.

Tan pronto como los recuerdos volvieron, las lágrimas cayeron silenciosamente de sus ojos, su familia y su Secta desaparecieron esa noche, ahora, en el vasto mundo, solo estaba ella y —¡A-Cheng!— gritó desesperada intentando ponerse de pie para buscar a su hermano.

—YanLi, no te muevas, tu hermano está bien— la voz familiar de Wen Qing detuvo sus intenciones.

—A-Cheng, A-Cheng ¿dónde está? Quiero verlo, necesito verlo— pidió ella con desesperación, necesitaba comprobar con sus propios ojos que su hermano estaba vivo, no soportaría perderlo, Wei Ying murió, sus padres murieron, sin su pequeño hermano ¿qué razón hay para vivir?

—Tú hermano está bien, créeme— Wen Qing extrajo una aguja del cuello de YanLi —Descansa en otra habitación, aunque sus heridas fueron graves, su recuperación es buena y, podrá despertar pronto.

YanLi dejó escuchar un suspiro de alivio, creía en las palabras de Wen Qing, sabía que jamás la engañaría sobre algo tan importante como la vida de su hermano. Su cuerpo se relajó y las lágrimas aparecieron otra vez, la Doctora no dijo nada, en el pasado ella también perdió su hogar y parte de su familia, comprendía el dolor de YanLi como si fuese propio. Ella lloró por mucho tiempo, su llanto fue silencioso, aunque su mente estaba en caos total, desde el primer recuerdo hasta la noche anterior, repasó su vida y se sintió miserable, como hermana mayor ¿por qué no protegió adecuadamente a su hermano?

Después de mucho tiempo, YanLi por fin preguntó: —¿Dónde estamos?

—El Reino Impuro— respondió Wen Qing limpiando con un pañuelo las lágrimas de YanLi.

—Creí que estábamos en Lanling— dijo ella con burla, de alguna forma esperaba que Jin ZiXuan los llevara allí.

—Lanling no es seguro en este momento, por eso el Maestro Jin y Madame Nie acordaron que era mucho más seguro que se recuperaran aquí, después de todo, si Wen Chao decide buscarlos, podría buscarlos allí— Wen Qing parecía tranquila, como si nada le afectase, su carácter solía ser fuerte y muchas veces parecía estar a la defensiva si se trataba de su hermano. Pero, con YanLi siempre fue amable y suave, la joven cuidó de ella cuando estaba al borde de la muerte y, sin exagerar, podría decir que sus cuidados y atenciones la trajeron de vuelta a la vida ¿cómo no puede tratarla de forma especial?

—A-Qing— llamó YanLi suavemente —¿por qué hacen esto? ¿no fue suficiente con matar a su propia sangre? ¿debían matar a la familia de otros?

Echoes | WangXianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora