Otro par de días pasan y todo está bastante bien. Lo cierto es que he tomado coraje, me senté frente a Nikolai y Andrei y les dije que necesitaba limitar las escenas al club, porque necesitaba aprender a confiar en ellos de nuevo.
Si, están perdonados porque se han equivocado pero eso no quita que haya querido tener algún tipo de respuesta.
Al menos en el club, siempre hay otras personas alrededor que están vigilando las escenas. Aceptaron, claro que lo hicieron. Se mostraron comprensivos y lo entendieron perfectamente.
Dije que de todos modos podíamos seguir viéndonos fuera de Seks pero sin escenas, al menos por un tiempo.
Así que aquí estoy, a pocas cuadras del club, luego de un largo día de trabajo. Es viernes, nuevamente y la semana en sí ha ido con bastante calma. La sumisa de Demian, Lianna, y yo hemos estado hablando por mensaje porque le he prestado un libro que creo que podría ayudarla con sus tesis. A pesar de ser bastante tímida, es agradable y realmente veo que es buena para el gruñón.
Cuando llego al club, saludo a Owen e ingreso. Dejo mis cosas en el casillero y luego, saludo a Alexis y Vania, dos sumisas que también llevan un tiempo aquí. Las tres hablamos unos minutos y caminamos hacia la barra. Marcus está allí con Carol y ambos nos sonríen. Quiero reirme por la forma en la que ella está caminando y estoy segura de que ha hecho algo para cabrearlo. Los castigos con plugs son horribles.
—hola, mascota— Marcus me sonríe y yo le devuelvo el gesto. Sus ojos caen en mi cuello y frunce el ceño. Él sabe que el dúo y yo estamos juntos, pero ninguno de ellos dijo algo respecto al collar, así que traje mi collar verde—¿Ha pasado algo?
—no—me apresuro a decir—es solo que no tengo uno de reemplazo y no es algo que hayamos hablado—explico.
Hace una mueca extraña y asiente.
—no te metas en problemas—me apunta con un dedo y luego, comienza a preparar tragos para las personas.
—Bruno y yo pactamos una escena—dice Alexis— pero... no lo sé, me da un poco de miedo que sea más sádico de lo que puedo manejar.
—habla con él— le sugiero.
—no es tan malo—acota Vania—hice algunas escenas con él algunas semanas atrás y es realmente bueno y cuidadoso.
Alexis asiente y no dice nada más. Yo miro a mi alrededor y suspiro.
—¿Qué pasa entre tú y Don Ley y Don Esposas?— sonrío por la forma en la que Alexis se refiere al dúo y niego.
—todo está bien—intento sonreir—es solo qué... hubo una situación incómoda y les dije que quería regresar las cosas al club por ahora— ambas me miran y les explico rápidamente la situación del museo y mi departamento. También mi reacción y la charla posterior—¿Hice bien, cierto?
—pues yo creo que sus métodos fueron una mierda—dice Vania— especialmente sin haberlo pactado previamente—sigue— pero creo que sí es cierto que debes ser capaz de pedir ayuda, barbie.
—no tengo problemas para... —ambas me observan y yo me callo.
—algunos dominantes no saben tratar con sumisas independientes—me dice Alexis— y tú eres demasiado independiente. Es algo que se contradice un poco con su deseo de controlar todo y cuidar.
—pero ellos sabían en lo que se estaban metiendo—señalo.
—honestamente, Gem, ustedes se conocen hace años pero, ¿Se conocen realmente? —aprieto los labios y niego— creo que se han metido en algo muy profundo antes de tiempo.
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Barroco | SEKS #2
RomanceSERIE SEKS, LIBRO #2 Gemma acaba de salir de una relación complicada y está dispuesta a dejar todo el dolor atrás y seguir adelante, sin involucrarse en serio con nadie más. Nikolai y Andrei no están dispuestos a escuchar protestas cuando ponen sus...