❝No me beses así. Me haces sentir querido.❞
❝Eres un alfa querido, Kim Taehyung.❞
Kim Taehyung es un alfa recién divorciado y con dos hijos. Su ex-esposa se ha llevado todo, hasta la antigua niñera. Ahora se ha mudado, y tiene que empez...
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— ¿Tú quién eres? — preguntó el cachorro mirándola fijamente.
— No es nadie, amor — respondió su padre — Ya es hora de irnos.
— Pero... acabamos de llegar.
— ¡Mamá! — empezaron a lloriquear los gemelos.
— No molesten a su madre, niños. Apenas puede salir con nosotros los fines de semana — llegó otro omega. El omega de Youngmin.
Minhyuk se sintió demasiado incómodo. Así que, Yoongi le ayudó a levantarse y salir fuera. Jimin dejó dinero de más por las bebidas que ni siquiera se tomaron e hizo una reverencia rápido y salió con Felix tomados de la mano.
— Papi, papi, ¿Qué pasa? — el cachorro corrió hacia su padre.
Minhyuk estaba agachado, con sus manos en las rodillas. Tratando de no vomitar de los nervios.
— ¿Estás bien? — preguntó Yoongi.
Minhyuk trató de ponerse de pie, pero terminó trastabillando así que Yoongi lo sostuvo rápidamente. El omega tembló, no quería mostrarse débil, no quería hacerlo frente a su hijo.
En realidad, Youngmin no le remueve ninguna emoción dentro de él, su lobo ya no reacciona con ella. Son, los recuerdos los que le atormentan, lo que le hace que todo vuelva a su cabeza, incluido Alessandro y el aborto que tuvo.
— Quiero ir a casa — chilló — Por favor.
— De acuerdo, de acuerdo — Yoongi palmeó su espalda.
Minhyuk se aferró a él.
Felix estaba consternado y confundido porque no sabía que había pasado. Solo sabe que, su padre se volvió a poner mal gracias a otro alfa.
Caminó un poco lejos de ellos y se acercó a la otra familia que también iba de salida.
— ¿Qué le hiciste a mi padre? — preguntó el pequeño.
Youngmin le miró.
— Deberías ir al auto, cariño — dijo la alfa a su omega.
— Amor — dijo él — No entiendo, ¿lo conoces?
— Solo ve. Llévate a los niños.
— ¿Lo invitarás a jugar, mami? — preguntó uno de ellos.
— Si, yo hablaré con él, no te preocupes — sonrió y el cachorro también.
Ambos niños se fueron calles abajo con su padre tomado de la mano.
— ¿Qué haces aquí? — preguntó ella — ¿Acaso te mandó tu padre? ¿Es por el dinero?
— ¿Qué? — Felix no entendía.
Youngmin puso una rodilla en el suelo y se agachó. Se quitó los grandes lentes de su cara, hizo su largo cabello hacia atrás y miró fijo a Felix.
