Se levantó con los ojos hinchados de tanto llorar y se sentía con ganas de seguir en la cama todo el día, pero el olor de algo dulce le hizo levantarse.
Parecía que todavía no eran ni las 6:00 a.m. y el ruso ya se encontraba cocinando abajo, y por el olor se notaba que era algo delicioso.
Se puso lo lentes para que no viera como estaban sus ojos, y trato de arreglarse un poco el resto de la cara. Bajo a pasos lentos, aún se sentía aletargado por el sueño y el cansancio, aunque también podía deberse a qué aún se sentía mal consigo mismo.
Pero, aún con los ánimos por el suelo, decidió ir a saludar al ruso. Era su casa y tenía que recibir a sus visitas. A parte le encantaba verlo cocinar cuando todavía no se daba cuenta de su presencia, justo como lo estaba haciendo ahora. Y más por la excelente vista que tenía del trasero del menor, no es que fuera tan grande como el suyo, pero si daban ganas de mo...
Rus- Oh, pensé que seguías dormido. - Dijo dándose la vuelta y notando el sonrojo del mayor. - Te iba a llevar de almorzar a tu cuarto.
USA- Perdón por arruinar tus planes. - Trataba de parecer lo más normal posible después de haberse imaginado cosas tan imputado con el ruso. - Es que olía demasiado bien. - Se acercó para ver la pequeña olla en la estufa. - ¿Que preparaste?
Rus- Sbiten, es una bebida que mi papá nos preparaba de pequeños.
USA- Se ve bien. - Sonrió al notar como Rusia sonreía Inconscientemente al recordar su infancia.
Rus- Aún podemos subir las cosas y desayunar arriba. - Apagó el fuego para después ir por dos tazas.
USA- ¿Hoy no me prepararas un desayuno normal? - Pregunto al ver que solo había galletas y lo que parecía ser té.
Rus- Nego mientras llenaba las tazas. - Está algo nublado afuera y pensé que esto podría calentarnos un poco. - Sonrió un ligeramente con un sonrojo en sus mejillas. - Y también pensé que esto podría hacerte sentir mejor.
El americano también se sonrojo, mirando al menor con un brillo en los ojos. Era como tener un ángel cuidandolo y mimandolo, un ángel que tenía la inocencia de un niño, pero que media más de 2 metros.
No podía creer que se perdió de todo ese cariño ruso por todos estos años dónde solo peleaban.
USA- Eres tan lindo. - Se paró de puntitas para besar la mejilla del ruso que estaba más concentrado en servir las tazas. - Te espero arriba. - Salió de la cocina con una sonrisa, Rusia era lo mejor que le había pasado en años, tal vez décadas.
El menor solo se quedó completamente estático mientras su sonrojo iba en aumento. Puede que solo se hayan estado dando besos en la mejilla pero su corazón parecía no soportarlos y su mente siempre se quedaba con una solo idea en la cabeza ¿A qué sabrán sus labios?
Pero a veces se perdía tanto en esa pregunta que no notaba lo de su alrededor, justo como ahora que terminó derramándose el Sbiten.
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ªNØR3XĪÇ
FanfictionAnorexia: Trastorno alimentario que provoca que la persona se obsesione con su peso y lo que ingiere. Quién diría que cierto americano sufriría de aquel trastorno. Rusia solo lo creyó cuando lo vio tirado en el suelo notando lo delgado que estaba...