Día 44

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La noche se sintió tan cálida al lado del ruso, a pesar de que la lluvia había empeorado y el viento golpeaba las ventanas con fuerza. El estaba rodeado por unos cálidos brazos, el rostro del ruso muy cerca del suyo y el pecho sobre el que estaba acostado se sentía ausente...

Ausente.

Estirón el brazo tratando de encontrar al menor pero solo puso sentir las cobijas que está había usado. Se levantó de golpe mirando a donde debería de estar el ruso, pero sólo vio que el lugar estaba en orden como si nadie hubiera dormido junto a él. Pensó que tal vez había soñado que Rusia había llegado para ayudarlo, pero eso era imposible, el nunca dejaba dobladas las cobijas de esa forma, es más, ni siquiera las doblaba.

Supuso que se había levantado para hacer de almorzar. Observo el cuarto esperando encontrar aquello que le había llamado ma atención desde que vio a Rusia. Cuando lo divido se levantó deprisa, lo tomo y regresó a su lugar. Era la mochila de Rusia.

Escucho pasos acercándose al cuarto, pero no le importó que lo descubrieran, el sabía que había algo para él, y que ese algo tenía que ver con dulces. Abrió la mochila viendo que estaba casi llena de dulces, pero eso no fue lo que llamó su atención, era algo que antes había visto. Tomo el objeto conocido al mismo tiempo que sonaba la perilla y la puerta se abría.

Rusia había entrado con una sonrisa que desapareció a los pocos segundos convirtiéndose en una nueva de enojó y vergüenza.

Rus- ¡Devuelmelo! - Dejo la comida de lado y se lanzó a la cama para tratar de tomar lo que le pertenecía.

USA- No sabía que seguías cargando a gorky a todos lados. - Reía alejando de Rusia el muñeco mientras lo detenía con la otra mano.

Rus- ¡Eso no debería de importarte! - Estiraba su brazo lo más que podía para alcanzar a gorky. - ¡¿Y cómo sabes su nombre?!

USA- ¡Tu me lo dijiste! - Su risa no paraba, Rusia cada día le demostraba que seguía siendo un niño.

Rus- ¡Yo no recuerdo haberlo hecho! - Por fin logró tener su preciado peluche entre sus manos e inconscientemente lo abrazo.

USA- ¿Cómo no vas a recordar la primera vez que hablamos? - Rusia lo mataría de diabetes, tan lindo cono cuando era un niño. - Tu a mitad del pasillo abrazando a gorky mientras llorabas. - Seguía riendo mientras se reincorporaba, pero se quedó quieto al ver la confusión del menor. - ¿No lo recuerdas? - El menor negó pensando que el americano estaba loco. - Debí de suponer que no lo harías, apenas habías cumplido 4 años humanos y el cuerpo de un niño de 5 años.

Rus- No se a que te refieres.

USA- Mira. - Se acercó al menor señalando los ojos de botón del muñeco. - Yo le puse este botón, tu habías perdido el otro y por eso estabas llorando por que pensaste que USSR lo tiraría. - La verdad están decepcionado de que el menor no recordará la primera vez que se hablaron. - Después hablamos un rato hasta que te quedaste dormido.

Rus- Creo...que lo recuerdo un poco. - Miro a gorky mientras algunas imágenes llegaban a su mente, aunque no sabía si eran reales o parte de su imaginación.

USA- Es una lástima que no lo recuerdes. - Sonrió tomando la mano del ruso. - Pero voy a hacer que cumplas lo que me dijiste esa vez.

Rus- ¿Te prometí algo ese día? - Volteó a ver al mayor sonrojandose por la cercanía que tenían.

USA- Tendrás que recordarlo. - Le dio un beso rápido para después alejarse y pararse. - ¿Vas a pesarme? Quiero recibir mi recompensa.

Rus- Oh...ci...cierto, la recompensa que...que te prometi. - Sus nervios aumentaron al recordar lo que había dicho hace una semana, y estaba seguro que no podría negarse.

USA- Sip, esa recompensa. - Comenzó a quitarse la ropa sin notar que el ruso desviaba la mirada en medio de un gay panic. Si lo hubiera notado no dudaría en aprovecharlo para ponerlo aún más nervioso. - Así que entre más rápido mejor.

Rus- Asintió mirando de reojo. Se alegró al ver que comenzaba a tener algo más grasa, las costillas ya no se marcaban tanto, y los muslos y caderas tenían mejor forma, y que decir de su...

USA- ¿Qué estás viendo? - Pregunto evitando reír al notar en que parte lo miraba Rusia.

Rus- ¡Nada! - Se levantó de golpe dejando el muñeco a un lado. - ¡Va...vamos a pesarte!

USA- Río por lo bajo haciéndose a un lado para dejar pasar a un ruso lleno de nervios y acomodara la pequeña báscula a pesar de que casi tira las cosas de su mesa de noche.

Rusia le indicó que ya podía subirse, pero antes de hacerlo le dio un pequeño beso en la mejilla, sólo para molestar. Se paró recto y su vista quedo justo frente al peluche de animal desconocido.

USA- Rus, no me has respondido por que gorky estaba en tu mochila.

Rus- Lo llevo cada que viajó en avión, no es que me den miedo, sólo me siento un poco inseguro al subir en uno.

USA- No entiendo como eres el país más alto y al mismo tiempo el más tierno, me dan ganas de abrazarte todo el día y...

Los labios del menor lo callaron de golpe. Movimientos torpes y temblorosos lo llevaron hasta el cielo dejándose llevar aunque el menor fuera inexperto. Las manos frías lo sostenían de sus muñecas acariciandolas con nervios. Y justo cuando iba a profundizar el beso el ruso se separó.

Rus- ¡Lo lograste!

USA- ¿Lograr que? - Pregunto embobado sin ni siquiera recordar de que habían olvidado al pequeño gorky.

Rus- Subiste 2.7 kls, ahora pesas 57.9, eso es mejor de lo que esperaba. - El mayor sólo asintió con las mejillas sonrojadas, totalmente metido en su mundo. - Le diré a Kazajistán que compre los ingredientes para el postre que tu quieras y me los de cuando vaya a su casa por la ropa para la semana. - Se veía bastante entusiasmado con la noticia, tanto que no notó que el americano lo ignoraba. - Veré que hay en la cocina para que no compre cosas de más. - Salió corriendo dejando al mayor como estatua mirando hacia el infinito.

USA- Definitivamente haré que cumplas tu promesa de casarte conmigo. - Dijo al aire mientras una enorme sonrisa aparecía en su rostro. - Espera...- Se quedó pensando en las palabras del ruso apenas comprendiendo lo que dijo. - ¿Cómo que ropa para la semana?
































Terminé chingadamadre.

Perdón, quise actualizar en la semana pero me dio una gripa de esas que no te dejan ni respirar.

Pero ahora si les prometo que actualizaré todos los días.

Ahora el rusito se quedará a dormir toda la semana.

¿Qué creen que suceda?

ªNØR3XĪÇDonde viven las historias. Descúbrelo ahora