Cita De Juegos [Ben Hardy Y Tú] I & II COMPLETA ✔️

Capítulo 52

52. Noche de fiesta II

La noche comenzaba a caer sobre Londres.

Todos a quienes había invitado ya se encontraban aquí.

Y al azotar una ventisca de aire frío doy por hecho que la hora de encender la fogata ha llegado.

— Cariño, ese palo se cayo.

— Voy cielo.

Veo a mi cuñado seguir el dedo de mi hermana señalado la madera y seguido acomoda está.

— Ben, sopla con fuerza.

— ¿Porque no vienes a ayudarme?

— Desearía que fueras más como Seb.

— Y yo que dejaras de ser tan mandona.

Ruedo los ojos y seguido descanso mi espalda sobre el respaldo de la silla en la que me encuentro.

— Tranquila linda — me vuelvo hacia Andy y le doy una pequeña sonrisa.

— ¡Ustedes pueden chicos!

Se burla mi prima Ashley, quién no se ha movido del sitio donde se encuentran los chicos intentando obtener la atención de alguno.

— Como quisiera quemar a esa chica.

Se escucha la voz de Andy cuando vemos cómo está se inclina junto a Dylan fingiendo estar ayudándole.

— Solo deja que enciendan el fuego, y yo misma te ayudaré a arrojarla — le respondo a Andy cuando veo a mi prima intentar llamar la atención de Ben dándole órdenes.

— Ash, querida, ¡Ven acá! Olerás a humo — mi hermana intenta hacer que la chica venga a con nosotras pero es ignorada.

Cuando los chicos logran encender la fogata está comienza a crear un sin fin de humo negro el cual se va todo directo a la impertinente chica. Y no es hasta que Ashley comienza a toser que todos comenzamos a reírnos.

— ¡Carajo hermana, ven aquí!

Mi prima se vuelve hacia su gemelo y este le reprocha con la mirada y seguido la chica comienza a andar hacia él. Gorge Miller, hermano gemelo de Ashley y mi primo favorito en todo el mundo.

Un chico que en pocas palabras es todo lo contrario a su gemela. Se lleva genial con todos e incluso sabe manejar la actitud que se carga Louis. Al ser el menor de los primos se volvió en el consentido de todos los Miller y por ende el más caprichoso y fastidioso.

— Vanne, querida.

Toda volvemos la mirada hacia Nat quién trae en sus manos una calientita taza de chocolate caliente.

— Gracias prima.

Andy y yo miramos cómo mi hermana se lleva la taza a los labios y bebé un sorbo disfrutando de este.

— ¿Que se tiene que hacer para tener esos cuidados?

Mi hermana escucha la pregunta de la chica a mi otro lado y se vuelve a mirarnos sonriente.