Cita De Juegos [Ben Hardy Y Tú] I & II COMPLETA ✔️

Capítulo 19

19. No te acordarás.

La fiesta aun continuaba, pero los señores Jones decidieron que ya era hora de irnos.

Porque a alguien se le habían pasado un poco las copas.

Llegamos finalmente a la casa y veo como Dylan deja sobre el sofá a Ben para descansar. El pelinegro suelta un suspiro y Andy llega a tomar asiento junto a su hermano.

— ¡Hermanita linda! — el rubio se acerca y le da un largo beso a su hermana quién hace una mueca.

— Basta Ben — se queja la chica mientras aparta a su hermano.

Me acerco un ocio y me detengo en el marco de la puerta. Entonces los ojos del rubio dan conmigo.

— ¡Ahí está! ¡Mi chica favorita!

Frunzo el ceño y miro a mis espaldas sin encontrar a nadie, vuelvo la mirada hacia Ben un con una expresión de confusión.

— ¡Sí, tu! La hermosa chica del vertido vino — me hace una seña para que me acerque y así lo hago, deteniendome a una distancia razonable.

— Vamos a qué te recueste amigo — Dylan intenta levantar al rubio pero este se niega.

— Quiero que me lleve _______ — arrastra las palabras mientras vuelve a sentarse sobre el sofá.

Dylan se vuelve hacia mí y le doy una pequeña sonrisa.

— Yo lo hago — el pelinegro asiente y doy unos pasos para detenerme frente a Ben — vamos niño terco.

El ojiverde obedece y se pone de pie quedando frente a frente conmigo. Paso su brazo por mis hombros y sujetandolo de la cintura comienzo a guiarlo hacia los escalones. Logramos subir a la segunda planta y entre tropiezos llegamos hasta la puerta de su habitación.

Abro está dejando ver una habitación incluso más grande que la que me tocó a mí y enciendo la luz. Me adentro junto con Ben a la habitación y lo guío hasta la cama, intento hacer que se recueste pero este se niega.

— No quiero dormir.

— Vamos Ben, me quedare contigo — digo en un tono tranquilo y el rubio posa sus ojos sobre los míos.

— ¿De verdad? — asiento mirándole a los ojos y termino haciendo que finalmente se recueste.

Me acerco hasta el final de la cama y le quitó los zapatos con cuidado para después volver hacia la cabecera de la cama donde veo que el chico observa todos mis movimientos. Me inclino un poco frente a él y aparto algunos mechones rubios de su rostro.

— Ya lo sé.

Frunzo el ceño ante sus palabras y me pongo en cuclillas.

— ¿Qué sabes Ben?

El rubio se relame los labios y veo su expresión cambiar a una que no puedo descifrar.

— Lo de tú y Gwil, — mi rostro se transforma — su relación falsa — continúa el rubio.

Me sostengo del colchón para no irme de espaldas y trato de mantenerme en calma.

— ¿Q-qué, que estás diciendo Ben?

El chico se incorpora un poco sobre la cama sin quitarme la mirada de encima.

— Te escuche anoche, — siento que el estómago se me revuelve y me quedo en silencio — y hay algo más.

Entreabro los labios dispuesta a hablar y en un abrí y cerrar los ojos ya tengo el rostro del rubio frente a mí y sus labios presionados con los míos. Aquello me toma por sorpresa dejándome congelada sobre mi lugar, sintiendo los labios del chico moviéndose con lentitud sobre los míos.

Cuando finalmente siento mi cuerpo reaccionar levantó mis manos y empujó al rubio por los hombros apartandolo de mi, haciendo que caiga de trasero al suelo.

Ben me mira con confusión y yo siento un nudo formarse en mi garganta.

— No

— Sí

— No

— _______, te a...

— ¡Cállate! — le interrumpo al rubio.

Me levanto del suelo pisando mi vestido un par de veces y soltando sonidos de fastidio. Veo a Ben sentarse sobre la cama y mirarme en silencio, entonces yo continúo hablando.

— No voy a dejar que me hagas esto Benjamín, — el rostro del rubio es de desconcierto y yo siento las lágrimas a punto de salir — no después de que he pasado mi vida entera enamorada de ti.

Los ojos del chico se abren de par en par y las primeras lágrimas abandonan mis ojos.

— ¿No lo sabías verdad? — preguntó con incredulidad y continuó hablando — no, ¡Que va! Todos lo sabían menos tu.

— ¿Porque no me lo dijiste? — su pregunta me hace hervir la sangre y suelto una risa sin gracia.

— Tal vez no te lo dije porque acababas de terminar una relación de años y después comenzaste a salir con otras chicas — digo fingiendo pensar.

El rostro de Ben se vuelve a uno neutro y se pone de pie e intenta dar unos pasos hacia mi a lo que yo lo detengo estirando mi mano para que se detenga.

Me talló el rostro sin importarme que el maquillaje se arruine y después miro al chico frente a mí.

— Voy a intentar comprenderte. Estás borracho, no sabes lo que dices y seguramente mañana no te acordarás que esto paso.

— Si lo voy a recordar — responde el chico con seriedad y yo niego.

— No, no te acordarás — vuelvo a responder con enfado — ya no pienso seguir discutiendo, estoy cansada y quiero dormir. Buenas noches.

— _______

Doy media vuelta y sujetando la falda del vestido camino a paso apresurado hacia la puerta escuchando cada vez más lejos la voz de Ben pidiéndome que esperé. Salgo al pasillo y una vez que llegó a la puerta de mi habitación abro está y adentrándome a la habitación me vuelvo para cerrarla y colocarle el seguro.

Un sollozo abandona mis labios y apenas doy unos cuantos pasos más por la habitación cuando las piernas me fallan y caigo de rodillas al suelo dejando salir todo el dolor que siento. Me llevo las manos a la boca para callar los sollozos y dejó que las lágrimas caigan libremente por mis mejillas.

¿Porqué me estaba haciendo esto ahora?