Cita De Juegos [Ben Hardy Y Tú] I & II COMPLETA ✔️

Capítulo 3

3. Miren quién está de vuelta.

Las clases finalizan y me despido de mi compañera quién me ha dado un regalo que compró en sus vacaciones.

— Oh, es cierto, te compre esto  —veo a la chica sacar de su mochila un lindo libro de color azul y extenderlo hacia mi.

— Aww, gracias Julie — recibo aquel regalo y mis ojos se pierden en la portada del libro mientras leo el título.

— Estaba comprando más libros y el título llamó mi atención, leí la pequeña sinopsis y me acordé de ti. La chica de la historia es igual a ti con tu crush.

Abro el libro y leo la primer página y vuelvo a cerrarlo.

— Vale, ya te entendí — escuchó reír a la morena a mi lado y me guardo el regalo en la mochila.

Niego con diversión al recordar aquello y continuó mi camino hacia el estacionamiento. Al levantar la vista logro ver a Ben recargado sobre su auto conversando animadamente con Gwil, sonrío ligeramente y antes de que pueda llegar a ellos choco con el chico que ví pasar en la cafetería.

— Lo siento mucho — me inclino a ayudarle a recoger los papeles que le he tirado.

— Ten más cuidado pequeña.

Frunzo el ceño al escuchar aquella voz que me resulta tan familiar y dejando de recoger los papales levantó la vista encontrándome con una mirada que reconocería donde fuera.

— ¿E-evan?

El chico sonríe ampliamente y ambos nos incorporamos.

— Hola _______

Dejó caer nuevamente los papeles y me llevo las manos a la boca ahogando un jadeo de sorpresa. El ahora rubio se acerca para envolverme en un gran abrazo.

— ¿Todo bien?

Me separo rápidamente del chico al escuchar la voz de Ben y mis ojos dan con mis dos amigos quienes no disimulan el asombro al ver al chico que anteriormente abrazaba.

— ¡Miren quién está de vuelta! — exclama Gwil con alegría y se acerca a abrazar al chico quién lo recibe gustosa.

Miro de reojo a Ben y este me mira igual mientras tensa la mandíbula. Dirijo la mirada hacia los chicos que hablan un par de cosas y entonces ambos rubio se miran.

— Hola Benjamín.

— Hola Evan — responde el mencionado con cierto disgustos en su tono.

El silencio se hace presente al igual que una aura de tensión alrededor de nosotros. Entonces ahí va su servidora a romperlo.

— ¿Qué te trae de vuelta a Londres Evan? — los ojos del mencionado van hacia mí y me da un encantadora sonrisa.

— Estoy realizando mis servicios aquí en la facultad de ingeniería y también vine a ver a una linda chica de grandes mejillas — su mano va hacia mi mejilla y le da un pequeño apretón haciéndome sonreír.

Escuchamos a Ben afinarse la garganta y dar unos cuantos pasos hacia mi. Evan aparta su mano de mí rostro y nos mira a todos sonriente.

— ¿Y ahira ustedes son amigos? — pregunta el chico mientras señala a Gwilym y a Ben.

— Tenía que encontrar nuevos amigos después de que el mío se fuera a Los Ángeles — responde el ojiazul mientras le palmea la espalda a Ben quién ya se encuentra a mi lado.

El rubio sonríe ligeramente y asiente en comprensión, entonces su mirada vuelve a mí.

— Pero mírate cielo, ya eres toda una jovencita, ¿Y tú qué has hecho?

Mi sonrisa se vuelve más grande ante sus palabras y poco a poco se va borrando.

— Bueno, yo... — siento como sujetan mi mano y le doy una rápida mirada a Ben quién me sonríe ligeramente.

Los ojos de Evan van del gesto del rubio a mí y nos da una encantadora sonrisa.

— Wow, de verdad que estoy sorprendido, los mejores amigos ahora novios — noto en su voz un tono que no logro reconocer y cuando estoy por corregirle Ben habla.

— Así es, está linda señorita ahora es mi chica — el rubio toma con su mano libre mi rostro y planta sobre mi mejilla un tierno beso.

Evan continúa sonriendonos y da unos pasos hacia atrás.

— Bueno chicos, fue un placer verlos de nuevo. Por el momento me despido, pero estaremos viendonos por aquí — sus ojos van hacia los chicos junto a mi y finalmente toda su atención se centra en mi — adiós pequeña

El chico me guiña un ojo y con sus papeles hechos un desorden entre sus manos da media vuelta y comienza a dirigirse hacia un auto deportivo coordinador negro. Sin darme cuenta me he quedado mirando embelesada al chico hasta que Ben me pasa por un lado golpeándome el hombro.

Giró sobre mi lugar y me encuentro a Gwil quién se encuentra igual de desconcertado que yo por el comportamiento de Ben. Me despido del castaño claro y le prometo que le llamaré en la tarde para contarle todo lo sucedido el fin de semana, camino hacia el auto de Ben y una vez que estoy dentro el rubio arranca sin siquiera dejarme colocar el cinturón de seguridad.

Aquí vamos de nuevo.