Cita De Juegos [Ben Hardy Y Tú] I & II COMPLETA ✔️

Capítulo 61

61. ¿Aun te gusta?

Ben


Sábado por la tarde. Me encontraba caminando por el vecindario ya conocido para mí.

Sabía justo a lo que venía, pero cuando logro divisar aquella casa de colores pasteles me doy cuenta de lo posiblemente absurdo que es el que es aquí haciendo esto.

Continúo por el pequeño camino hacia el pórtico y me detengo por unos escasos segundos frente a lis escalones.

— Si has venido a visitarlos déjame decirte que se han ido hace unos diez minutos. Hoy salen a cenar en algún sitio.

Aquella voz me hace volver la mirada hacia mi izquierda donde encuentro en los escalones del pórtico de la casa de al lado a una chica pelirroja la cual me sonríe ligeramente apenada en cuanto mi mirada va hacia ella.

Doy una rápida mirada hacia la puerta a unos escasos metros hacia mi y doy media vuelta encaminándome tranquilamente hacia donde la chica.

— Y es por eso que he venido hoy, y a esta hora. ¿Puedo sentarme?

La chica asiente con ligereza y me acerco a los escalones dónde tomo asiento en el otro extremo a una distancia prudente de ella.

— Si no te molesta puedo preguntar qué estás haciendo.

— Si puedes, — me remuevo sobre el escalón y del bolsillo de mi abrigo saco aquella cajita que había olvidado — vine a devolver esto.

Extiendo hacia el frente el regalo haciendo que la chica observé aquello con curiosidad y unos segundos después parece comprender.

— Ben, se que jamás hemos hablado mucho más que ahora.

— Y eso no te convierte en solo la vecina de… los Miller, Amy.

— Si yo fuera tú, conservaría eso. — murmura la chica señalando con la cabeza el regalo que llevo en manos y luego agrega — Aclaro, hablo por mi misma.

Cuando la mirada de la chica va hacia mí le sonrío con amabilidad a lo que sus pálidas mejillas se vuelven rojas.

— ¿Te confieso algo? Es difícil vivir sin ella, sin todo el caos que trae a tu vida y que después se lleva cuando se va, el silencio que se queda a cambio en parte es abrumador.

— Dímelo a mí, tuve que dejar atrás Londres y aprender a vivir sin el apoyo que ella me brindo durante mucho tiempo.

— Lo imagino, — admito en un susurro — ella siempre ha estado cuando la necesitamos e incluso cuando no.

— Esa es la ________ que todos conocemos.

Amy baja la cabeza hasta sus manos las cuales ha posado sobre su regazo.

Si bien no conozco mucho a Amy por lo poco que me contaba _______ y lo que se sabía de ella era que su padre había abandonado a su madre y a ella por una infidelidad de la primera, Amy solo tenía tres. Y desde entonces, su vecina e hija menor de los Miller se había vuelto su amiga más fiel e íntima y jamás la dejo sola cuando su mamá se perdía en su vicio descuidando de ella misma y de su propia hija.

No podía imaginar cómo es que pudo sobrellevar la ida de su padre y cuidar de su madre. Nunca podrás escuchar alguna queja, chisme o mal comentario acerca de ella, porque Amy Marsh no era una chica de problemas y con la cual no podrías entablar una conversación por su gran timidez y falta de socialización.

— ¿Aun te gusta?

— ¿Perdón?

Logro hacer que la pelirroja levanté la mirada hacia mi un tanto desconcertada.

— Oye, si algo reconozco bien es una mirada que solo le das a la persona que te gusta, y antes de que te fueras y cuando volviste pude ver exactamente esa mirada cuando la viste.

La joven se muerde el labios inferior mientras sus mejillas se tornan de un rojo carmesí encendido.

— Yo… Bueno — la escuchó suspirar ruidosamente y seguido decir — ni siquiera se en que momento comencé a verla así, solo… Jamás quise decir o hacer algo incorrecto para no alejarla de mi, ella tenía una vida genial fuera de mi, a veces deseaba ser ella pero jamás llegué a envidiarle. Entonces fue cuando me de cuenta de que no solo la admiraba, yo… — la miro vacilar entre continuar o no pero cuando le doy una sonrisa dándole a entender que está bien, lo hace — Yo la amaba. Pero ella te quería a ti, siempre ha sido así.

— Bueno, ya no más.

Ambos suspiramos ruidosamente y bajo mi mirada hacia mis manos dónde me encuentro jugando con mis dedos.

— Pero ahora estoy saliendo con su primo.

— ¿¡Qué!?

Me pongo de pie haciendo que la chica se exalte y me mire confundida.

— Por favor, dime qué no es el patán de Louis.

— Sí, es con él. Y no le digas así, por favor.

— Lo siento. Pero se me hace imposible que una chica tan educada y amable como tú salga con un consentido de papá grosero.

La joven se ríe de mis palabras a lo que unos segundos después yo le sigo.

— Vale, aunque por motivos personales no nos llevamos bien, me alegro que al menos tendrá alguien que lo enseñe a ir por un buen camino.

— Gracias Ben.

Solo unos cuantos minutos después que he notado que comienza a anochecer decido que es hora de irme y me despido de Amy y agradeciéndole por el consejo y la buena charla que hemos tenido.

En mi camino de regreso a casa voy por las calles ya poco concurridas a esta hora con los audífonos puestos y una canción de mis favoritas. Voy paseando mi mirada por toda la calle mientras apenas muevo los labios siguiendo la letra de la canción cuando al doblar una esquina no me doy cuenta y termino chocando con brusquedad con alguien.

— Discúlpame.

Me quitó un audífono para mirar a la otra persona y cuando logro ver su cara deseo poder retractar mis palabras pero se que no es posible.

— No, descuida.

Sin decir nada optó por seguir mi camino pero el chico no lo permite cuando me habla:

— Ey, Jones.

— ¿Qué quieres, Evan?

Incluso el solo decir su nombre me hace hervir la sangre pero lucho internamente por guardar la compostura y no terminar lo que iniciamos aquella noche en la fiesta de celebración.

— Solo, quería preguntarte si todo está bien.

— ¿Bien por lo de hace unos segundos? O ¿Bien porque me quitaste a mi chica?

— Ey, yo no tuve nada que ver en eso.— se queja mientras frunce el ceño — Tu fuiste él que decidí terminar y ella solo tomo la opción que mejor le convenía.

— Oh, ¿Enserio? — exclamó con incredulidad — venga Evan, no me digas que no habías estado esperando esta oportunidad desde hace mucho tiempo. ¡ Teníamos un puto trato y lo has roto!

— Me ofendería mucho de no saber que actúas así solo por qué estás cabreado por que ella me eligió a mi y no a ti.

No me contengo más y sin antes pensarlo levanto mi brazo con un puño formado y lo impacto sobre el rostro de Evan con toda la fuerza y rabia que había estado conteniendo. El rubio teñido se tambalea un poco dando unos paso hacia atrás para retomar el equilibrio, lo veo llevarse los dedos a su nariz de la cual brota sangre y enseguida su mirada va hacia mí.

— Vete al carajo Peters.

Doy media vuelta sobre mi lugar y emprendo nuevamente mi camino doblando la esquina.

— ¡Te prometo que lo haré Jones! ¡Y entonces habrás deseado que no lo hubiera hecho!

Ignoro aquellas palabras dichas por Evan y apresuró mi camino mientras vuelvo a colocarme el audífono para perderme una vez más en la canción.

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Estoy muy emocionada y ansiosa porque vengo a compartirles que el 10 de este mes es cuando daré por finalizada la historia, y que aún faltan muchos capítulos para cerrar así que les estaré trayendo actualizaciones muy prontas.

Sin más que decir les agradezco por todo el apoyo y nos leemos muy muy pronto, je.

Las tqm ❤️