10.26 Prueba

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Alexander Clerinton estaba muerto, no podía remediarse, su bomba explotó dejando marcas de quemaduras en el brazo de Rafael y los helicópteros caían sobre el asfalto.

El caos no podía ser peor.

Fred sintió que tiraban de su brazo y se alejó corriendo, la presencia de Lilith provocó que el ataque fuera más intenso y los camiones con los soldados aceleraban en ruta hacia los edificios de investigación.

Cielo volvió con Rafael - ¿estás bien?

- El escudo absorbió el mayor daño, estaré bien.

Eder se mantuvo estable, cubierto por el escudo que protegía a Rafael, de otra forma los disparos que venían de los helicópteros lo habrían matado.

Los soldados disparaban desde tierra y los ángeles sobrevolaban el cielo.

Eder levantó la mirada – este es el escenario que siempre te acompañará.

Las manos de Cielo se apretaron y se lamentó por el momento en el que perdió el control, pocas veces actuaba precipitadamente, excepto cuando la vida de Manon o Rafael estaba en peligro y esa bomba pudo hacerles daño a todos – quítalo de mi vista – le dijo a Rafael.

Él asintió y atrapó en su oscuridad a Eder para llevárselo.

El ejército se acercaba.

La lluvia se intensificó cayendo a raudales sobre el patio y Fred los miró irse.

- Desde el comienzo esta era una misión que no íbamos a pasar, ¿cierto? – se quejó Úrsula y buscó en su inventario una daga.

Liam sujetó la muñeca de Fred con más fuerza – pase lo que pase, volveré, quédate aquí – hizo lo mismo y salió de la protección del techo del edificio para caminar hacia Lilith.

Desde la cabina de control Erick miró la escena que se mostraba en las cámaras y se sintió molesto y frustrado por la muerte de J.T

Los ángeles volaron hacia la carretera y las camionetas que avanzaban cargadas con soldados y armamento, además de ellos Cielo envió más ángeles hacia el cielo para los helicópteros que se acercaban.

Esa era una misión fácil, sencilla y corta, al menos fue así como la imaginó, pero a donde quiera que iba la perseguía el caos, era de esa forma desde que era pequeña y por un breve momento pensó que tal vez Eder tenía razón y ella era el problema.

No tuvo tiempo para más pensamientos, Liam apareció por un costado cargando una daga roja y la atacó.

Los ojos de Fred se agrandaron - ¿qué es eso?

Dos de las gemas fueron tratadas como metal y convertidas en dagas de energía, eran todavía un prototipo, tanto Úrsula como Liam estuvieron de acuerdo en que no podían centrar sus esfuerzos en un solo tipo de arma y acordaron mantener la investigación a escondidas del resto.

Úrsula atacó a los ángeles y gracias a eso Liam llegó hasta Cielo.

Era mucho tiempo desde que un ser humano se acercaba tanto a la madre de los demonios y Cielo levantó la mirada ligeramente hacia su hermano – así que este es – pensó al pelear con la pareja predestinada de su hermano.

Liam notó esa mirada y atacó su rostro para evitar que lo mirara, sabía que en sus vidas previas fueron cercanos, pero ese era un mundo diferente y Limei era peligrosa.

Desde la cabina Erick odió quedarse fuera de la acción y contactó a la base, luego tomó el comunicador – Liam, cuando te dé la señal apártate de ella, lanzarán un misil a su posición, entretenla hasta entonces, cuento contigo grandote – cortó la comunicación para no escuchar sus quejas.

No soy un virus, soy un acosador (Segunda parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora