Capítulo 35

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Capítulo 35
Bharet Mustly.
La necesito a ella.




Estoy en el aeropuerto esperando por Tyler y Ryle los necesito si voy a trabajar con Beethzart Asghari, son mi gente de confianza y con ellos he sacado mi aplicación y mi empresa ha delante.

Saludo en la  distancia a ambos, es mucho con lo que estoy lidiando en estos momentos y necesito ayuda.

──Hola… ──Saludo a ambos.

──¡Amigo! Te ves fatal… ──bromea Ryle abrazándome.

──¿Estás durmiendo? Tienes mala cara. ──musita Tyler.

──No, no estoy durmiendo y comparado a como me siento, me veo increíble. Vámonos. ──indico.

Los guío hasta la camioneta y arrancamos hasta el apartamento de Hailey.

Las cosas están peor que nunca, Grace me está ignorando, no contesta mis llamadas, ni mis mensajes… y las persecuciones de Hailey me están sacando de quicio.

──Presentaste un proyecto sin nosotros, Bharet. ¿Porqué hiciste eso? ──cuestiona Tyler.

──Porque quería encargarme yo solo, además es mi proyecto… ──Sentencio. ──. Era una oportunidad que no podía desaprovechar, es mi empresa y tengo que buscar su progreso. ¿Vas a estar sí o no?

Lo observó por el espejo retrovisor.

──Sabes que sí, sino no estuviera aquí. Es solo que me sorprendió, no lo habías discutido con nosotros.

──¡En realidad! Si lo había discutido, por lo menos conmigo sí. ──susurra Ryle con una amplia sonrisa para hacer gruñir a Tyler.

Solo Ryle sabía lo que haría, y me alegra solo haberle informado a él, supo guardar el secreto, y eso me permitió llegar a Beethzart Asghari.

──¡Maravilloso eso!


──Si, lo fue.

El camino transcurre con calma, mientras hablamos sobre la aplicación que me ha desvelado, esa la excusa que le doy a Hailey, aunque la verdad mis desvelos son por Grace…

Solo por ella. 

──¿Cómo está tu novia? ──pregunta Tyler.

──Bien. ──respondo seco sin ninguna emoción.

──¿Y todo está bien entre ustedes?

──Aja… vamos a que coman algo y luego descansan, mientras yo tengo que hacer una cosa.

Desvío el tema porque lo que menos deseo es hablar de mi supuesta relación con Hailey, una relación que cada día se ha puesto peor.

Y como si fuese invocada, llama.

──¿Estas con ellos?

──Si. Vamos a comer algo antes de llegar.

──Pero yo les preparé comida, Bharet.

──No lo sabía.

──Bueno, ya lo sabes. Los espero. ──musita trancando la llamada.

¡Mierda!

Llegar al apartamento y almorzar todos junto era algo que no estaba en mis planes pero lo hago, me recuerda el tiempo en el que ellos intentaban sacarme de mi depresión, planeando cualquier cosa, hablando de tonterías, o contando chistes malos para sacarme una sonrisa.

Me relajo un poco, no mucho pero mi concentración solo está en un persona y ella no está aquí.

Mi mente divaga en saber que estará haciendo, si el idiota de Jason estará con ella, si él se queda a dormir con ella… sí tienen sexo…

Me voy a volver loco.

No la he visto desde lo que pasó en su apartamento, y he planeado miles de veces aparecerme allí y abrir la puerta con esa llave de repuesto que me mostró Hope pero debo calmarme porque no sé lo que haría si entro y ella está con él.
Me levanto de golpe de la mesa llamando la atención de todo.

──¿Qué pasó? ──pregunta la castaña tomando mi mano.

──Nada. ──tomando mi vaso y caminando hacia la cocina.

──Necesito un taxi para mañana. ──dice Tyler.

──Yo puedo llevarte a donde quieras. ──me ofrezco pero niega con una amplia sonrisa.

──Gracias pero, no.

Hailey ríe divertida.

──¿A dónde vas?

──Por allí, a visitar a unos amigos… solo eso. Igual no empezaremos a trabajar mañana mismo ¿O si?

──No, mañana descansen. No hay problema…

──¿Qué amigas vas a ver? ──pregunta Ryle lleno de curiosidad hacia Tyler.

──No es tu problema.

Mientras Hailey se pone al día con los muchachos y ellos la mantienen de alguna manera ocupada, salgo del apartamento en busca de alguna floristería.

Necesito enviarle unas flores, necesito conseguir que ella quiera hablar conmigo.

Me está evadiendo de mil maneras, y me está frustrando la situación demasiado, aparco la camioneta al conseguir mi objetivo pero lo que llama mi atención no es en sí, la floristería, es el idiota de Jason riendo como una mujer que evidentemente no es Grace.

Me quedo en la distancia observando que hacen, conversan tranquilamente, no hay nada del otro mundo y siento que me enfurezco por no poder conseguir algo que lo aleje de ella, que lo aleje de mi bella.

Él está con ella…

Desisto de ir por él, y Entro al local, pido un encargo especial, un encargo que llegara todos los días de esta semana a su apartamento.

Rosas blancas…

Muchas rosas blancas de tallo largo para ella.

La tarde pasa más rápido de lo esperado, pero mi ansiedad por verla va aumentando con creces, mientras Tyler y Ryle duermen, Hailey por su parte está intentando llamar mi atención acostada a mi lado hablando de algo que sencillamente no me interesa. Finjo prestar atención, mientras cuento los minutos para que también se duerma y poder irme a ver a Grace.

Ya no puedo más.

Iré a verla.

La castaña intenta recostarse en mi hombro, pero la esquivo dándole la espalda para acostarme.

──¿Vas a dormir? ──pregunta paseando sus manos por mí espalda.

──Si. ──me abrigo lo más que puedo.

──Quiero sexo, tienes semanas que no me tocas, Bharet. ──se queja.

──Tengo migraña, y no estoy de ánimos. ──susurro cerrando mis ojos para escucharla bufar.

──Tenemos que ir al médico, esas migrañas me están empezando a preocupar demasiado, amor. ──susurra. ──. Te están dando muy seguido.

Deja un beso en mi cabello y se abraza a mi cuerpo, necesito irme de aquí rápido o voy a volverme loco, no es su toque el que quiero, no son sus besos.

Yo necesito a Grace…

La necesito ahora.

Espero a que Hailey se quedé dormida, la hora que pasa me parece condenadamente interminable, cuando está dormida salgo de cama con cuidado.

Ella abraza su almohada y yo salgo de la habitación con mis tenis en mis manos, Ryle está en cocina con su laptop en las piernas y chocolate en su boca.

──Jet lag. ──susurra al verme cerrar la puerta con cuidado, son más de la una de la mañana. ──. ¿Y tu?

──Grace Asghari. ──musito para verlo abrir sus ojos en demasía.

──¿Irás a esta hora? ──asiento colocándome mis zapatos y buscando mi abrigo. ──. ¡Mierda! ¿Y Hailey?

──Si se despierta dile que fui a una emergencia por la migraña o hazte el dormido… pero no pienso quedarme aquí, tengo que ir a verla. ──susurro.

Mi amigo asiente y se levanta con la laptop en sus manos.

──Vi esto hace dos días… antes de venir. Estaban en un disco duro, intente buscar más pero Tyler llegó y bueno… ──me muestra la pantalla y el corazón me late a millón.

Él me dijo que todo se había perdido.
Las fotografías se habían borrado.
Esos momentos solo existían en mi memoria.

Ella me besa y yo tomo la fotografía, ese día nos reímos demasiado, en la siguiente la cargo y ella me besa, ese día pasamos todo el día caminando por las calles de Las Vegas.

──Envíamelas a mi teléfono. ──digo pasando mis dedos por la pantalla.

──¿No te parece raro que Tyler las tenía?

Demasiado…

──Si. ¿Podrías buscar las demás?

──Lo intentaré.

──Perfecto me voy…

Me despido de mi amigo y salgo directo al edificio en el que vive Grace, aparco mi camioneta viendo las fotografías que Ryle acaba de enviarme.


Amo esto…

Amo lo que veo en la pantalla de mi teléfono, y lo sentí con ella esos días.

Ingreso el código que el asegure de aprender cuando Hope lo ingreso y subo las escaleras para llegar al cuarto piso en busca de esa pequeña maceta que oculta la llave.

Observo el par de llaves en mis manos, y la puerta.

Solo ruego que él no esté con ella… solo ruego que ella esté sola..

Abro con cuidado, y cierro pasando los seguros. Todo está apagado, la luz de la luna guía mi camino, su bolso está en la encimera de cocina, las rosas están perfectamente acomodadas en una esquina.

Mi mirada vieja a ese sofá donde hicimos el amor…

No sé cuál es su habitación, pero no pienso irme de aquí.

Así que camino por el pequeño pasillo, abriendo con cuidado dos de las puertas que consigo para darme cuenta que la tercera es su habitación.

Siento mi pecho arder, ella está acostada… su cabello rubio está dándome la bienvenida.

Se remueve un poco y se gira, sus ojos se abren y se asusta sentándose en la cama de golpe.

──¡Soy yo! ──digo elevando mis manos.

──¡Que Mierda! ¿Cómo carajos entraste? ──pregunta lanzándome una almohada. ──. ¡Estás loco! Casi me matas del susto. ¡Maldición!

Lleva su mano a su pecho, enciendo la luz… y ella cubre su rostro, sus ojos se van adaptando a la claridad y yo me quedo sin habla al verla.

Un delicado vestido de seda para dormir cubre su cuerpo, su mirada se eleva para ver a los ojos.

──¿Qué haces aquí Bharet? Son las dos de la mañana y entras en mi apartamento sin ser invitado…

No digo nada…

Solo me disfruto la imagen que tengo frente a mí…

Camino hacia a ella en silencio y me arrodilló estando a la orilla de la cama, su mirada sigue cada uno de movimientos, pero no dice nada, mi mano va hacia su rostro, acarició su mejilla con dulzura.

──¿Qué haces aquí? ──susurra muy bajito, mis dedos viajan hasta su cuello, bajando un poco más hasta llegar a su pecho.

──Dime que me marche Grace… ──pido haciendo que me mire a los ojos.

──No puedo hacerlo, por más que quiera… no puedo. ──susurra y me acerco a ella para besarla.

Y soy recibido por sus brazos y sus labios…


Grace AsghariDonde viven las historias. Descúbrelo ahora