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Juan Pablo.

1- Describir físicamente al compañero.

Fácil: horrible.

2- Especificar sus actividades favoritas

Fácil, punto numero dos: ser insoportable.

3- Características que la o lo definen como persona.

Nuevamente facilísimo: ser hueca.

4- ¿Algo que le agrade de esa persona?

Odiarla.

5- Preferencias en el sexo opuesto.

¿Quién había hecho este trabajo tan mal redactado? Bien, tenía que buscar a Hope para continuar estos malditos puntos.

Rasque mi cabeza nervioso, entablar una conversación serena y pacifica con ella era una tarea difícil. No sabía porque, pero tenía aquella necesidad de molestarla la mayoría del tiempo.

Caminé por los pasillos de la universidad, pude divisar la cabellera negra de Rebecca. Sonreí emocionado por verla, podría decir que a esta altura me encontraba enamorado de ella y que quizás, me gustaría pasar con ella toda la vida.

Fruncí el ceño cuando la vi hablando con un chico de la facultad de psicología.

- Hola. – fruncí el ceño cuando llegué a su lado.

Ambos sorprendidos, más bien asustados me observaron. Rebecca inhalo con fuerza y se acomodó el cabello hacia atrás con rapidez.

- ¡Amor! – sonrió y se abrazó por los hombros – pensé que hoy no vendrías.

- ¿Por qué no vendría? – confundido pregunte.

- No lo sé. – nerviosa, comento moviendo sus hombros.

- ¿Por qué te encuentras nerviosa? – la observe enarcando mi ceja.

- Solo, rindo hoy y nada solo eso... – comento, su vista viajo hacia el moreno que se encontraba en frente – Te presento a Tobías, él es Juan Pablo.

- El famoso Juan Pablo. – sonrió y ambos estrechamos las manos en forma de saludo

- Si, famoso. – susurre.

- ¡Papo!

La voz de Martin me quito la atención en aquella situación. Sentí otro brazo en mis hombros. Sonreí de costado cuando vi a mi amigo.

- Vamos, acompáñame.

- Espera – voltee antes de seguir caminando y me acerque a Rebecca para besarla rápidamente – te amo – susurre con una sonrisa.

Marque el territorio frente aquel sujeto, no iba a dejar que me quitara a mi novia.

Camine con Martin a mi lado hacia el salón de clases, mi mochila colgaba por uno de mis hombros y en mis manos tenia aquel papel en donde se encontraban aquellos puntos a cumplir. Fruncí el ceño cuando vi de lejos a Simón riéndose a carcajadas junto a Hope.

Si la observaba desde aquí, podría decir que su sonrisa me causaba ternura y sin contar que cada vez que escuchaba su risa sentía algo extraño dentro de mí que hacía que quisiera escucharla siempre. Pero vamos era Esperanza Lee, mi enemiga, aunque después de lo de ayer no había podido dejar de pensar en lo que había sucedido.

Me había aferrado a ella, sin saber quién era. Mi piel se erizo con solo pensar en lo que había pasado el día de ayer.

Sacudí mi cabeza cuando los vi acercándose a nosotros, su sonrisa se fue desvaneciendo y simplemente tuve que actuar como siempre: un vil y odioso chico que solo quería molestarla porque la odiaba.

KARMA - Juan Pablo VillamilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora