.31. segunda temporada

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Juan Pablo.

- ¿sabes que fue lo que me pregunto hoy?

Sus ojos mieles estaba aguados y su tono de voz se había transformado en bronca.

- Si tu vivirías con nosotras... pero ya veo que tu decisión es irte, es preferir tu trabajo antes que todo eso y... lo entiendo ¿Sabes? Porque jamás te obligue a ser su padre... jamás te obligue, ni quise que te hicieras cargo de todo esto, porque todo te quedo demasiado grande. La palabra papa, esa que hace días la viene repitiendo Nina, no se asemeja al hombre que eres y que ella necesita. ¿Y sabes qué? mejor vete.

- Hope... - susurre, lo que decía me dolía mas que su ausencia todos estos años.

- Hope, nada. – hablo con autoridad – Ya no entiendo que más quieres... ya elegiste, ya me lo has hecho saber. Vete.

Me limpie el rostro lleno de lágrimas, todo lo que decía me lo merecía y contra eso no podía ir. Estaba decidiendo por mis sueños cuando también las quería a ellas.

- Hope, por favor...

- ¿Por favor? – abrió sus ojos con sorpresa – tú no puedes suplicarme... Te creí. Pensé que te quedarías conmigo... - susurro – pero nuevamente te olvidaste de mí.

- Estoy haciendo esto por nuestro bien.

- ¿el nuestro o el tuyo y tu maldito ego?

Ella hablo con demasiado enojo.

- Mejor vete a cumplir tus sueños, porque ninguna de las dos entramos ahí. Y no te preocupes por Nina, yo me encargo de juntar tus platos rotos otra vez.

Patee molesto el escritorio de mi oficina mientras recordaba sus palabras. Hope tenía razón, pero mis sueños también pesaban. No había vuelta atrás porque lo había decidido y eso estaba bien o al menos eso creía.

Observe la fotografía que nos habíamos sacado los tres juntos. No me cansaría nunca de verla y debía asumir que, a partir de ahora, ese pequeño pedazo de papel, iba a ser mi escape cada vez que necesitara un poco de paz.

Escuche el sonido de la puerta. Me reincorporé en la silla cuando vi a mi papa observándome con demasiada curiosidad.

- ¿Hola?

- ¡Hola, papa! ¿Cómo estás? ¡Tanto tiempo! – hablo con sarcasmo, rodee mis ojos al escucharlo hablar de esa manera - ¿Puedo pasar o tendremos que hablar aquí?

Suspire y termine por asentir observándolo entrar luego. El cerro la puerta y tomo asiento frente a mí en silencio.

- ¿Qué? – pregunte con curiosidad.

- ¿Qué sucede contigo?

- ¿Por qué? – fruncí el ceño sin entender.

- Porque desapareces y luego apareces con Hope y... ¿Qué sucede, hijo? – volvió a preguntar con curiosidad.

- Me volví a encontrar con Hope en mi viaje a Nueva York y luego sucedió lo de Manuel... - el asintió recordando eso ultimo – Y luego descubrí que tengo una hija con ella, Nina... ese es su nombre.

Mi padre abrió sus ojos con sorpresa. Si, había ocultado todo esto porque simplemente me perdí en mi mundo con ellas. Me eché hacia atrás apretando mis labios y volví a observar aquella pequeña fotografía. La tomé unos instantes y sonreí con melancolía.

KARMA - Juan Pablo VillamilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora