OCTAVIO
1 día después...
Ya por fin se acabaron mis días de guardaespaldas técnicamente, ya que justo en este momento me encuentro conduciendo detrás del auto de Shiara en dirección a la academia.
A la cual estamos a 10 minutos de llegar ya que partimos de su morada hace mucho más de una hora.
Me sigo guiando de la camioneta de Shiara por alrededor de 10 minutos o más hasta que llegamos a la academia.
Pasamos por el código de seguridad y luego al gran estacionamiento, estacionando su vehículo cada quien en su puesto correspondiente.
Apago los motores de mi coche y me bajo de este cerrando la puerta detrás de mí en un suave portazo.
Empiezo a caminar con dirección a mi habitación. Paso por el lado de la camioneta de la mocosa pero ni me inmuto en esperarla. Aquí ya ella está segura, o bueno supongo, ya que estos últimos meses he empezado a dudar de la "excelente seguridad" de este lugar.
Paso por los jardines y camino directamente hacia mi habitación. Agradezco no encontrarme a ninguno de los chicos ya que ahora solo quiero un momento a solas.
Al llegar a mi habitación inserto la tarjeta RFID en la puerta y abro la misma. La mochila que traía colgada en uno de mis hombros la dejo caer en un sillón que hace parte de la decoración de la habitación.
Estos últimos días no he podido dormir bien y ahora siento que la falta de sueño me está pasando factura. Por eso a pesar de que apenas son las tres de la tarde me despojo de toda mi ropa y tomo una ducha de cuerpo completo, para luego lanzarme directo a mi cama con solo un boxer puesto, donde después de pocos minutos me quedo profundamente dormido.
#
El sonido punzante y estresante de mi celular me hace levantarme a regañadientes.
Me tallo los ojos con la parte trasera de mis manos y tomo el celular que está en la mesita de noche soltando un bostezo.
*Daniel*
Descuelgo la llamada sin mucho interés y me llevo el teléfono al oído lanzándome de espaldas a la cama nuevamente.
-¿Que quieres? -mi voz sale ronca.
-Me enteré que volviste y ni te has dignado en llamarme -habla del otro lado de la línea.
-¿Que quieres?, Nunca me dejas dormir en paz -le repito la misma pregunta, refunfuñando.
-No sé si te acuerdas que tenías algo que contarme cuando me pediste tal dirección.
-¿Para eso me llamas?, Joder, eres un estorbo -me vuelvo a tallar los ojos en un intento de espantar el sueño que aún habita en mí.
-¿Recuerdas las cámaras escondidas que pusimos en la entrada de tu puerta? -su voz toma un tono algo serio.
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Llamas Sobre Hielo
Teen FictionShiara, una chica de 18 años de edad; la cuál desde pequeña su mayor sueño ha sido ser la mejor patinadora artística en hielo. Desde muy pequeña siempre ha participado en eventos y torneos de patinaje artístico sobre hielo, pero luego de terminar la...