❝REMEMBER❞ [Yoonmin]

C i n c u e n t a y n u e v e

"Mi agonizante dolor fantasma sigue siendo el mismo ¿He perdido o te he ganado?"

Las manos del chico se mantenían sosteniendo una pluma, haciendo trazos en el papel sobre la mesa, formando palabras que le hacían sonreír sin darse cuenta. Cuando acabó de escribir, alzó la mirada. Su sonrisa se ensanchó al ver la sonrisa satisfecha en el rostro de su mayor.

— Me sorprendes cada día más, Park Jimin. — dijo su contrario, sacándole una sutil risa.

Giró su rostro cuando la puerta fue abierta. Kim Seokjin ingresó con una sonrisa, sosteniendo con cuidado un libro. — Lamento haber tardado tanto, pero no podía llevar a Seokjoon a la capital. — se disculpó. — ¿Qué hacen?

— El Omega Jimin estaba terminando de tomar notas. — contó Jung Hoseok con un tono burlesco. — ¿Lo trajiste? — le preguntó al mayor. 

Seokjin asintió antes de dejar el libro sobre la mesa. — Les dije que mis contactos eran los mejores. — alardeó — Lo que buscas debe estar en este libro. — le dijo al rubio.

Park Jimin tomó el libro con ambas manos, abriéndolo para leer las primeras paginas y asegurarse que aquello era lo que buscaba. Una vez lo comprobó asintió para si mismo y dejó el libro sobre la mesa. — Gracias hyung. 

Hoseok sonrió a la par que jugaba con una pequeña navaja entre sus manos. Pasó su dedo por la hoja afilada. Alzó su mirada y soltó una suave risa antes de guardar la pequeña arma y levantarse de su asiento. — Debo irme.

— ¿Irás a Kusan? — preguntó Seokjin. El pelirrojo rodó los ojos antes de fruncir los labios.

— La decisión no está en mis manos, Seokjin. Respetaré lo que Min diga, no puedo hacer nada mas. — murmuró en respuesta. 

El omega de cabellos rubios suspiró — ¿Usted quiere ir?

— Soy un sargento, Jimin. La situación en la capital de Kusan está empeorando cada día más. Si el Rey Kim pide ayuda a Seul y Yoongi decide enviarme, no puedo hacer nada. Es algo que escapa de mis manos. 

La mirada que le brindó el rubio hizo al pelirrojo sonreir. 

— Además, necesito algo de diversión en mi vida. Ya es aburrido tener que investigar homicidios o arrestar a los malos. Necesito algo de adrenalina. — dijo Hoseok antes de guiñar un ojo en dirección al menor. 

Kim Seokjin sonrió y se acercó al rubio. — No te preocupes, pequeño Jimin. Éste alborotado omega siempre termina regresando a casa luego de tener la adrenalina que busca. Cortará algunas cabezas, peleará con el Rey y luego regresará. — le susurró con voz calmada a la par que se apoyaba en el sargento. — ¿No es así, tonto Jung?

— Vuelve a llamarme "tonto Jung" y te golpearé con lo primero que tenga a la mano. — amenazó el omega con una sonrisa en el rostro. Sin embargo la voz habia sido tan segura que aquello causó escalofríos en el cuerpo del rubio.