❝REMEMBER❞ [Yoonmin]

C u a t r o

" Estoy asustado, incluso mi corazón se agita, porque el destino debe estar celoso de nosostros."

Sus pies se movían con nerviosismo. Llevaban esperando ya al rededor de unos quince minutos, pero parecía que hubiera sido una eternidad. Su lobo se había recostado en su interior moviendo tristemente su cola, al mismo tiempo que soltaba chillidos llenos de tristeza y dolor.

- Yoongi ¿puedes calmarte y dejar de mover tu pie? Me haces poner aún más nervioso. - le reclamó Seokjin, quien estaba sentado a su lado acariciando su abdomen demostrando lo nervioso que estaba.

- Ah... si. - respondió el rey en un susurro.

¿Qué cosa era lo que esperaban? Desde hace ya un par de días Jimin había estado devolviendo la comida y presentando mareos constantes, sin contar que habia perdido peso notablemente. El médico real había llegado, y se había encerrado en la habitación junto al rubio; no se podía escuchar nada de lo que pasaba allí dentro.

- Lamento la tardanza, hubo un pequeño problema con uno de los caballos ¿Aún no sale nadie? - preguntó Namjoon, quien apenas había llegado.

Seokjin negó rápidamente - Ya verán que sólo le calló mal una comida, solamente debe ser eso. - murmuró, parecía que intentaba convencerse a sí mismo que nada grave le pasaría a su menor.

- Claro, ha demostrado ser un chico fuerte en estos dias. Soporta el humor de perros de nuestro rey, es invencible. - dijo Namjoon pasando su brazo por los hombros del omega, sentándose a su lado, apegandolo a su cuerpo. - Todo estará bien, calma... - le susurró acariciando sus cabellos con cariño.

Yoongi les miró de reojo. No podía mentir, muchas veces se había sentido solo al ver cómo ese par se daban cariño de una forma tan hermosa; pero tampoco quería traicionar a ella. Prefería estar solo, así no tendría que ocuparse de nadie más.

Iba a soltar un grito para que ellos dejaran de ser tan empalagosos, cuando la puerta de la habitación asignada para el rubio se abrió. El joven omega salió corriendo con su mano cubriendo su boca, detrás de él iba el médico.

Yoongi miró a Seokjin y Namjoon, quienes también habían volteado en su dirección. - ¿Los seguimos? - preguntó Namjoon confundido.

Yoongi asintió, empezando a correr para intentar alcanzar a el par que apenas había abandonado la habitación. Vio al médico tocando nerviosamente la puerta de uno de los baños cercanos, por lo que dejó de correr para empezar a acercarse a pasos rápidos.

- Omega Jimin, por favor abra la puerta. - pidió el hombre de cabellos carnosos antes de soltar una suspiro.

- ¿Qué demonios es lo que está pasando? - preguntó Yoongi.

El hombre le miró nerviosamente - ¿Es el joven su omega, mi señor? - preguntó mirando directamente al pálido.

- ¿Q-Qué...? ¡Por supuesto que no! - dijo mientras fruncia su ceño. - ¿Cómo se atreve a siquiera pensar en esa posibilidad?