Lie ||Yoonmin||

64

JiMin entró al departamento de Rose, y lo primero que escuchó fue el grito de Rose, y como esta estaba alegando con alguien más.

— ¿Que es lo que sucede?— Preguntó YoonGi.

— No lo se.

JiMin le dio la mano de Minji a YoonGi, y después caminó hasta la sala, donde vio a Rose regañando a Haneul.

— Tía. ¿Que sucede?— Preguntó JiMin.

— Dile, dile lo que hiciste— Le dijo Rose a Haneul, quien solo bajó su cabeza— Bien, si ella no te lo dice, entonces yo si. La niña se anda creyendo grande, y anda fumando junto con sus amiguitas. Y solo tiene catorce años.

JiMin frunció el ceño.

— Haneul— Llamó JiMin.

— Y-Yo solo quería ser como ellas.

— Pero la cosa no es así, niña. Si ellas quieren arruinar sus pulmones, es problema de ellas y de sus padres. Pero yo no voy a permitir que tu andes haciendo esas cosas. Eres solo una niña de catorce años.

— L-Lo siento— Se disculpó Haneul— No lo volveré a hacer.

— Por supuesto que no lo harás. Estarás castigada, sin salir a ningún lado.

Haneul asintió.

— Ve a tu habitación— Ordenó Rose.

Haneul se levantó e hizo una reverencia antes de subir a su habitación. Segundos después YoonGi y Minji aparecieron.

— ¿Que sucedió?— Preguntó YoonGi.

— Haneul andaba fumando— Respondió JiMin.

— Oh.

Minji soltó la mano de su padre.

— ¿Puedo ir con haneul?— Preguntó Minji, y Rose asintió.

Minji corrió hasta la escalera. YoonGi miró a Rose y negó.

— ¿Cuando te enteraste?

— Hoy. Llegó con olor a cigarro, no le quedó más de otra que confesar.

YoonGi rascó su nuca.

— Esta en una edad donde hace todo lo que sus amigas hacen. Se deja influenciar muy rapido— Dijo YoonGi.

— De ahora en adelante voy a ser estricta. Si lo hace una vez, puede hacerlo muchas veces.

JiMin asintió.

— Yo tomaba a su edad— Confesó JiMin— Pero lo dejé.

Rose se cruzó de brazos.

— Pero tía, lo hacía cuando estaba con mis padres. Ellos me dejaban, pero nunca llegué a quedar ebrio.

— Y espero nunca quedes ebrio— Dijo YoonGi— Al otro día andas con demasiado dolor de cabeza.

— Lo se. Taehyung siempre tomaba junto conmigo, y terminaba ebrio. Y para eso estaba yo, para cuidarlo.

JiMin se sentó en el sillón junto a YoonGi.

— Tía, queríamos invitarlas a la nieve.

— Haneul esta castigada.

— Pero vamos a ir todos juntos. Dudo que se escape a fumar. Puede castigarla cuando lleguemos. Deja que se divierta tía.

Rose dudó unos segundos.

— Bien— Dijo Rose y JiMin sonrió— Pero de todas formas castigaré a Haneul.

— Esta bien, tía.

JiMin corrió hasta la habitación de Haneul, provocando una risa en ambos mayores.

— Amor, alista tu ropa— Dijo JiMin.

— ¿Porqué?

— Vamos a ir a la nieve. Tu mamá ya te autorizó.

— ¡¿De verdad?!

— Si. Ahora alistate.

Haneul abrazó a JiMin.

— Pero prométeme que ya no harás alguna locura. Todavía eres una niña.

— Esta bien, primo.

— ¿Me lo juras?

— Lo juro.

JiMin sonrió y besó la frente de Haneul.

— Vamos, amor. Deja que Haneul se vista— Le dijo a Minji, quien solo asintió y tapó sus ojos hasta que JiMin lo sacó de la habitación.

— Estaba llorando— Dijo Minji a JiMin.

— ¿Si, amor?

— Si. No me gusta que ella llore.

JiMin sonrió y acarició la mejilla de Minji, antes de bajar hasta la sala.

— Rose se fue a vestir— Dijo YoonGi y JiMin asintió mientras se sentaba a su lado.

Minji se sentó en el suelo y jugó con sus juguetes que había llevado para no aburrirse.

— ¿Cuando le diremos a Minji que tú eres su padre?— Preguntó YoonGi, besando los labios de JiMin.

— Cuando sea el día indicado. Tengo miedo de que se lo tome mal.

— El te adora, mi amor.

— Pero no como papá.

— Eso nadie lo sabe. Solo el.

JiMin suspiró y besó los labios de YoonGi, quien sonrió y llevó su mano hasta la cintura del menor, para después bajar hasta el trasero de este.

— YoonGi— Advirtió JiMin.

— Solo hemos tenido sexo una vez después de tantos años. Te necesito, y mucho— Se quejó ocultando su rostro en el cuello del contrario.

— ¿Solo me quieres por sexo?

— Sabes que no, amor. Vamos, dime que tu también quieres que te folle todo el día.

— No exactamente todo el día.

— Pero si quieres que lo haga.

— Si.

— Perfecto. Entonces solo esperemos, al momento indicado.

Ambos sonrieron complices.