63. PAPAOUTAI
-Tienes que entrar por esa carretera –anuncié a Merle. Tenía escalofríos cada vez que veía algo que me recordaba mi pasado. Había tenido un día muy duro, pero lo que estaba por venir sería lo peor. Volver a casa, revivir mi pasado y, quién sabe, enfrentarme a cosas que ni siquiera pueda imaginar.
Guié a Merle primero por la pequeña carretera que guiaba hasta la urbanización en la que se alzaba la enorme casa. Todo parecía estar en la misma calma que en Washington y por un segundo me pregunté si sería tan peligroso como la ciudad. Esperaba que esta vez no hubiera nada que pudiera ponernos en peligro. Sentía presión por haberlos traído de verdad a un lugar seguro, por no ser la culpable de un fallo más, de un error más.
-Menudas casas… -Glenn miraba boquiabierto las casas, ahora las veía de una forma completamente distinta. En mi adolescencia, esas casas eran lo más normal, al irme de casa y acabar viviendo en un pequeño apartamento, había aprendido a valorar las cosas materiales. Ahora las cosas materiales no tenían valor alguno, lo importante de verdad era sobrevivir.
-Es aquella –dije con voz rota. El verdadero momento de enfrentarme a mi pasado había llegado. Estaba asustada por lo que podía encontrar dentro, no sabía si iba a ser capaz de disparar a mi padre si él estaba dentro, si había muerto y se había convertido-
Merle detuvo el coche y detrás de nosotros lo hicieron los otros dos coches. Todos poco a poco bajaron del coche. Rick enseguida vino hacia nosotros para ver cómo se encontraba su pequeña hija que no paraba de llorar.
-Tiene hambre… -dijo Maggie-
-Encontraremos algo para que coma… -añadió Glenn- En alguna de estas casas debe haber algo
Yo aún seguía dentro del coche, mirando la casa. Nada había cambiado, los árboles de alrededor estaban descuidados pero la estructura era igual: tan majestuosa, tan imponente. Un fiel reflejo de lo que mi padre deseaba ser.
-¿No piensas bajar? –Merle golpeó suavemente la ventanilla, obligándome a abandonar el trance el que estaba-
El corazón latía tan deprisa que pensé que se acabaría escapando de mi cuerpo en cualquier momento. Merle seguía a mi lado, mirándome atentamente. Creo que todos lo hacían, pero yo solo tenía ojos para aquella casa. Di un par de pasos hacia ella y volví a detenerme a mirarla.
-Yo entraré primero... –dije sin desviar la mirada de la casa- Daryl, Glenn y Sasha, vendréis conmigo.
Ni siquiera supe por qué los elegí a ellos, Glenn sabía moverse bien por sitios desconocidos, Sasha era fuerte y Daryl. A él simplemente lo necesitaba a mi lado.
-Tú no deberías entrar –dijo Rick- puede ser peligroso, iré yo en tu lugar
Miré a Rick y le dediqué una pequeña sonrisa, de verdad se preocupaba por mí y por el bebé. Además de alma de líder, en él se veía un fuerte instinto paternal.
-De nosotros nadie conoce esa casa mejor que yo, conozco hasta el escondrijo más pequeño… -expliqué-
-Entonces manos a la obra –dijo Glenn-
Nos preparamos. Maggie me dejó su pistola que era menos pesada que la mía y la dejé reposar en mi cinturón, ahora ensanchado al máximo. Saqué mi catana, desde que todo esto había comenzado había cogido mucha práctica con el uso de esta arma. Me había ayudado tantas veces, le debía la vida, literalmente.
-¿Estás lista? –murmuró Daryl muy cerca de mí, no sabía que lo tenía tan cerca por lo que me sobresalté un poco cuando hablé. - Ya no estás sola…
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ZET (The Walking Dead Fanfic)
Fanfiction-Esto tiene que ser una broma... -Dije con un fastidio notorio- Habría preferido que fueras un caminante... -No puede ser cierto, tú no puedes estar delante de mí... -dijo completamente confundido- Solté una pequeña risa cargada de prepotencia. El...