ZET (The Walking Dead Fanfic)

36. BAD DAY

36. BAD DAY

-¿Siempre haces lo que él te dice? ¿Es que no tienes huevos para hacer lo que tú quieres?  –Le recriminé- Eres un puto cobarde, pero ve y bésale el culo a tu hermano

-LeeA, cálmate por favor… -Daryl me tomó de la mano, pero yo me alejé de él para romper el agarre- Saben que estás aquí.

-¿Qué? –pregunté atónita. Miré a Daryl, él tenía un aspecto serio y estaba notoriamente preocupado- ¿Cómo ha pasado?

-Veníamos hacia aquí y un tipo nos oyó hablar de ti... un tal Martínez. Merle dijo que lo arreglaría pero… no sé qué pensar.

-Sí el Gobernador llega a venir, estoy jodida –bufé-

-No voy a dejar que te pase nada. Si tengo que matar a ese tío, lo haré…. De verdad que tengo ganas  

-Tú no harás absolutamente nada por mí –dije señalándolo con el dedo índice, estaba bastante cabreada. Por mi cabeza sólo pasaba que Merle y Daryl querían largarse y el Gobernador sabía que estaba en la prisión, sentía que las cosas no podían ir peor, pero estaba segura que así pasaría- Más vale que no muevas ni un puto dedo más, para mí tú ya no formas parte de la prisión, haré como si te hubieras largado... Al fin y al cabo ya estoy acostumbrada a que desaparezcas.

-Yo no quería largarme, mi intención era convencer a Merle para que viniera aquí. Yo no te dejaría, te juro que no lo haría

-Permíteme que dude de ti, dicen que una vez alguien te falla, puede volver a hacerlo, y creo que tarde o temprano lo harás… -dije. No sabía si me estaba dejando llevar por el enfado que tenía o si verdaderamente lo pensaba. La cuestión era que se lo había dicho y debía atenerme a las consecuencias fueran cuales fueran.

No dije nada más. Daryl tampoco lo hizo. Tan solo cruzamos las miradas un par de veces más hasta que decidí marcharme de mi propia celda. Sentía que Daryl me había fallado, aunque quizás lo que me hubiera dicho fuera cierto, pero ¿Y si no lograba convencer a Merle, habría llegado a marcharse? La idea de volver a despertarme y que él no estuviera me aterraba, me hacía sentir como aquella vez, y quería evitar eso ante todo.

Salí del recinto, llegando hasta el patio. Me fijé que Glenn estaba en la torre haciendo vigilancia, me extrañó mucho no ver a Maggie junto a él. Quizás no había sido la única que había formado parte de una discusión.

Subí por las escaleras hasta lo más alto de la torre y me senté junto a mi amigo, quien tenía la mirada fija en los caminantes de fuera de la prisión.

-¿Una mala noche? –Pregunté en voz baja-

-Un mal año… - dijo con fastidio-

-Una mala vida –acabé diciendo yo. Glenn me miró y sonrió, pero enseguida borró su sonrisa- El tío que quiere matarme sabe que estoy aquí… -murmuré- y no sé qué hacer. No quiero que estéis en peligro por mi culpa.

-¿Crees que nos hará algo?

-El Gobernador está loco, es lo único que sé de él. Me mantenía con vida solo para poder hacerme sufrir más. Sé que no se quedará sin hacer nada sabiendo que estoy aquí…

-¿Y cómo se ha enterado? ¿Merle se lo ha dicho? –Preguntó intentando guardar la calma, pero lo conocía lo suficiente como para saber que estaba preocupado y era completamente lógico-

-Por casualidad, nadie tiene la culpa pero… la cuestión es que lo sabe. Siento que ya no voy a poder dormir tranquila. No hasta que… -entonces fue cuando lo vi todo tan claro, sentí que tenía la respuesta a mis preocupaciones-