Capítulo 53

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Hurrem

No sé cuántas veces al día ruego para que esté embarazo no sea de tres bebés, habia pasado un mes desde que me enteré, pero yo aún seguia con temor a tener tres bebés de nuevo, no estaba segura de poder dar a luz a esa cantidad de bebés otra vez, pero si estaba segura que antes de morir mataría a mustafa, nadie le manda a dejar tres bebes en mi, uno es más que suficiente.

- Sultana - Nurbanu  entro en mis apocentos, últimamente ha estado muy desanimada, no le pregunté nada por qué pensé que sería cosa de unos días, pero aún sigue así.

- Nurbanu, quiero preguntarte algo - le dije y ella asintio.

- Claro sultana dígame ¿Hice algo que le molestará? - me preguntó y yo negué.

- Hace unas semanas has estado con esa cara triste ¿Paso algo?

- No sultana, solo son cosas sin importancia, en realidad esas cosas a mi no me incumben, mi deber es cuidar a los príncipes y las Sultanas  - ella decía eso, pero su cara decía otra cosa, estaba dolida.

- ¿Es por Selim? - ella se puso nerviosa y supuse que acerté - ¿Paso algo con él?

- No es nada grave, es solo que escuche que estaba viendo a una mujer muy seguido en sus apocentos, eso es normal considerando que él es un príncipe - dijo con una sonrisa forzada, no quería meterme en temas cómo esos, pero nadie dijo que no podía darle un consejo, me levanté para dirigirme a ella y la agarre de los hombros.

- Nurbanu si tú no le demuestras tu valor y no te respetas a ti misma, él no lo hará, se que el harem es normal para todos los demás, pero mustafa no lo hace y Selim puede dejar de hacerlo, solo tienes que ser inteligente, has pasado mucho tiempo conmigo - ella me miró atenta - te traje aqui con la intensión de que aprendieras cosas que te puedan ayudar, si te hubiera querido únicamente como cuidadora no te hubiera enseñado algunas cosas del harem, ni te hubiera educado en bailes y todo eso, demuéstrale a Selim cuánto vales - le dije segura, ella me miró un tiempo, su mirada ahora era decidida y eso me agradaba.

- Tiene razón sultana, lo haré, pondré en práctica todo lo que aprendí y no la decepcionaré - dijo segura.

- Se que no lo harás - sonreí.

- Me retiro sultana - dio una reverencia y salio.

- Parece ser que eres muy buena consejera madre, nurbanu entro con una cara triste, pero salio con una feliz - dijo Mihrimah entrando a mis apocentos.

- ¿Sabes quién es la mujer que estuvo viendo Selim últimamente? - pregunté directamente y ella se puso sería.

- Si, la vi un par de veces y no me agrada para nada - la mire curiosa - puede meter en problemas a mi hermano madre, estuvo diciendo que si mustafa fallecía por cualquier motivo Selim ocuparía el trono.

- ¿Como se llama esa mujer? - le pregunté molesta, no tenía intenciones de meterme en las relaciones de Selim, pero esto va mucho más allá que una simple relación, esa mujer puede hacer que ejecuten a Selim y no lo puedo permitir, no con todo lo que me costó mantenerlos completamente sanos.

- Dilsha madre - contesto de inmediato.

- Llévame con ella ahora mismo - le ordené y ella dirigió el camino.

Llegamos al lugar de las favoritas, entre sin ningún tipo de anuncio, yo podía hacerlo, dentro había una mujer rubia, era bonita, pero se veía demasiado arrogante.

- ¿Quien eres tú? ¿Como te atreves a entrar a mis apocentos de esta manera? Soy la favorita del principe Selim - afirmó.

- ¿Quien te crees tú qué eres para hablarle asi a mi m.. - levanté mi mano para que Mihrimah se detuviera y ella inmediatamente lo hizo.

- Señorita escuché que estuviste hablando de más sobre el príncipe Selim - le dije fríamente.

- No dije nada que no sea verdad - afirmó, me sorprendió que no me reconociera, eso quiere decir que está tan ocupada en ella que no se fija en lo que hay a su alrededor.

- Será mejor que cierres esa boca tuya o puedes acabar muy mal, no voy a permitir que una mujer cualquiera ponga en peligro la vida de mi hijo ¿Oíste? - le pregunté seriamente, ella se sorprendió cuando  escucho la palabra "hijo" salir de mi boca, rápidamente entendió quién era y me dió una reverencia.

- Lo siento sultana, no la reconocí, no era mi intención faltarle el respeto de esa manera - se disculpó inmediatamente, pero no me importaba.

- Te lo diré una vez más, no metas a Selim en problemas o me encargaré de que no puedas verlo nunca más en tu vida ¿Entendiste? - ella asintio rápidamente - No te creas mucho solo por qué eres su favorita, puede venir alguien a quitarte ese lugar y te quedarás sin nada - le advertí y salí de la habitación.

- ¿Esta bien no hacer nada más madre? - preguntó Mihrimah.

- Nurbanu se encargará de ella - aseguré.

- ¿Nurbanu? - preguntó confundida.

- Esa mujer, Dilsha, es una molestia para nurbanu y ella se va a deshacer de esa molestia, no quiero meterme en ese tipo de cosas, estoy segura que ella podrá hacerlo.

- Entiendo, bueno ella paso mucho tiempo a tu lado y parece ser una mujer fuerte.

- Lo es, es una mujer fuerte, solo faltaba pulirla.

Esperaba con ansias ver qué hacía nurbanu para deshacerse de Dilsha, sería interesante ver a una chica tan arrogante como Dilsha quedarse sin nada, sería una buena lección para ella, confía tanto en ser la favorita de Selim, pero eso no basta en este lugar y yo lo sé mejor que nadie, no se trata solo de ser la favorita, tienes que sobrevivir y acabar con tus enemigos, estoy segura que la actitud de ella le ha traído muchos enemigos, no sé cómo es que aún sigue con vida en un lugar como esté con la actitud que tiene.

Algo prohibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora