Algo prohibido

Capítulo 55

                               Especial

Nurbanu

Estaba pensando en lo que me dijo la Sultana Hurrem, sabía que ella tenía razón y que tenía que hacer algo para que Dilsha ya no sea una molestia en mi camino, Selim solo me llamaba para comer juntos o dar un paseo, nadie me toma en serio por qué piensan que soy una simple compañera de él o que me llevo bien con Selim por qué cuido de los príncipes y las Sultanas, Dilsha era una de las que creía eso, por eso no me ve como una amenaza, estaba muy confundida, yo me encargaría de sacarla para siempre de la cabeza de Selim.

- ¿Aún sigues pensando en eso nurbanu? - me preguntó Emine

- Tengo que pensar bien que hacer

- ¿Aún no se te ocurre nada?

- De hecho si, Dilsha no es alguien difícil, es muy arrogante por qué es la única mujer a la que el príncipe a vuelto a llamar, no me ve como una amenaza por qué piensa que el príncipe no está interesado en mi, solo hace falta quitarle la atención del principe Selim  y ella ya no será nada.

- Entonces ya sabes que hacer

- Si, ya se que hacer - le dije con una sonrisa enorme.

- La Sultana Hurrem te ayudará en eso, estoy segura.

- No quiero molestarla, está embarazada, iré con la Sultana Mihrimah

- Ella también quiere deshacerse de Dilsha así que te ayudará.

Ella tenía razón, Dilsha tenía en contra a un montón de personas, su arrogancia es su perdición.

- Voy a ver a la Sultana Mihrimah - le avisé - cuida de los príncipes y las Sultanas un momento, no olvides que nadie puede venir a verlos sin el permiso de la Sultana Hurrem - le recordé y ella asintio

Salí de los apocentos con dirección a la Sultana Mihrimah, esperaba que me ayudara.

- Vengo a ver a la Sultana Mihrimah - le dije a la criada que estaba fuera.

- Le preguntaré - asenti y espere su respuesta - Pasa - fue lo único que dijo.

- Sultana - la saludé cuando entre a sus apocentos.

- Nurbanu ¿Paso algo con mis hermanos? - preguntó

- No sultana, yo quería pedirle ayuda - ella frunció en ceño.

- ¿A mí? ¿Por qué no a mí madre? No me molesta, pero mayormente esas cosas las hablas con mi madre

- La Sultana está embarazada y no quiero molestarla - ella sonrió y asintio en comprensión.

- Entonces ¿En qué quieres mi ayuda?

- Quiero que me mande con el príncipe Selim - dije decidida.

- ¿Ya sacaras a Dilsha de tu camino? - dijo tranquilamente, solo asenti - Te ayudaré, mi madre está de acuerdo con esto y yo también, esa mujer puede hacer que ejecuten a Selim, su boca es demasiado suelta.

- Se lo agradezco sultana

- Fakria - llamo la Sultana

- Si sultana - entro la mujer que me había permitido la entrada.

- Prepara a nurbanu, irá con mi hermano Selim.

- Como ordené Sultana - me miró y lo tome como un aviso para ir con ella, la seguí - tienes el apoyo de la Sultana Hurrem y la sultana Mihrimah, será mejor que no lo heches a perder, ellas pueden ser muy buenas, pero si eres su enemiga te destruirán - dijo tranquila, pero había una leve amenaza en sus palabras

- Lo se, estuve con la Sultana Hurrem mucho tiempo - ella asintio y me llevo a los baños 

- Se que vienes de Venecia, pero esto es el impe..

- El imperio otomano, eso lo sé, la Sultana Hurrem me lo dijo - la interrumpí, ella sonrió con satisfacción.

- Entonces entra, te ayudarán a prepararte.
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Ya estaba lista, llevaba un hermoso vestido rojo, estaba nerviosa, pero estaba decidida a hacerlo.

- ¿Estás lista? - me preguntó Fakria, solo asenti - cuando entres tienes que..

- No levantar la cabeza hasta que él me lo permita y besar el doblaje de su traje, lo sé

- Parece que la Sultana Hurrem sabía que harías esto tarde o temprano - sonrió divertida, pero yo no dije nada.

Estaba frente a la habitación de Selim, mis nervios se habían bloqueado y ahora solo estaba totalmente decidida, cuando entre el estaba de espaldas y comenzó hablar, aún no veía quién era.

- Mi hermana te mando ¿No es así? - dijo volteando,  cuando me vio se congeló, yo tenía la cabeza levantada, no la agache en ningún momento, por lo cual reconocerme no fue nada difícil - Nurbanu - murmuró - ¿Por qué estás aquí?

- La Sultana Mihrimah me mandó a servirle hoy príncipe - respondí simplemente.

- Regresa con mi madre - eso fue lo único que dijo, pero no me iba a ir, no sin antes estar en su cama.

Me acerque a él ignorando su orden, posiblemente lo que estoy haciendo sea suficiente para que me ejecuten, pero no me importa, el que no arriesga, no gana.

- Nurbanu, te di una orden - me advirtió cuando ya estaba más cerca de él, pero no me detuve, me pare delante de él y lo miré a los ojos.

- Estoy aquí por qué quiero estar con usted, la Sultana Mihrimah solamente me ayudó a entrar a sus apocentos - fui sincera y él suspiro.

- ¿Cuál es tu intensión? Ayudas a mi mamá cuidando a mis hermanos ¿Por qué ahora estás aquí? - no le respondí, simplemente lo besé.

Si, ahora mismo el puede mandar a ejecutarme por faltarle el respeto de tal manera, pero no lo hizo, rodeo mi cintura con un brazo y me pegó más a él, solté un suspiro cuando corto el beso.

- Espero que seas consiente de lo que estás haciendo - estaba serio.

- Soy completamente consiente de lo que estoy haciendo - cuando termine de decirle eso, él se avalanzo sobre mi.

Estaba en sus apocentos, había logrado entrar, pero esto era tan solo el principio, que esté aquí no significa que ya no hará entrar a nadie más y eso yo lo sé, por eso durante toda la noche me aseguré de que él me viera como alguien única, mi primer objetivo era que Selim volviera a llamarme, si me vuelve a llamar eso quiere decir que le guste lo suficiente, poco a poco le quitaré a Dilsha de la cabeza, ella será historia, su pasado, yo seré su presente y su futuro.