Sasaeng [Y.M] [✓]

Epílogo

«Ya pasaron seis meses desde que la cantante y actriz Shin Suran ha desaparecido, además de la muerte de la modelo Kim Garam, según las investigaciones ambas estaban en una red de sasaeng conocida como D del famoso rapero Agust D según las fuentes ambas famosas por medio de dinero se unieron para estar cerca del rapero y poder alejarlo de su actual pareja Park Jimin.»

«Se dice que Kim Garam fue la responsable del incendio en la casa de Park Jimin, como otro intento de asesinato a este mismo, Shin Suran fue responsable de múltiples actos, entre ellos intento de homicidio, mentiras entre otras cosas, también se dio a conocer que hay algunos ídols que pertenecen a la red de sasaeng por lo cual están bajo investigación»

«En más noticias una persona intentó ingresar a la casa del famoso idol mientras esté descansaba junto con su pareja y su bebé recién nacida, provocando disparos, algunos fanáticos piden a la empresa mejor seguridad para el rapero y su familia»

Las flores caían en aquel hermoso jardín donde un chico de cabellos cafés miraba con amor a aquel pálido chico que le había robado el corazón, luego de muchos malos momentos ambos al fin estaban cumpliendo sus sueños, Yoongi por su parte cumplía el sueño de casarse con aquel hermoso chico que lo había conquistado en el colegio y que por él hizo muchas cosas, por otra parte Jimin estaba feliz por casarse con su rapero favorito un sueño que muchos deseaban tener y que solo él había logrado obtener, pese a todo lo malo que había hecho.

Nadie sabía que detrás de esos rostros de amor y humildad se escondía algo oscuro y totalmente perverso, un amor un tanto peculiar que solo ellos y los que se fueron a las tumbas llegaron a conocer. Su boda fue lo más privada que se pudo, solo ellos dos disfrutando del momento y cuando llegara el momento adecuado subirán las fotos de su tan ansiada boda, al anochecer ambos estaban en un hotel privado, Yoongi atendía a la bebé mientras que Jimin preparaba algunas cosas, ambos no confiaban en nadie para dejar a su pequeña rayo de luz producto de su amor y su locura.

—Yoonnie. —dijo Jimin mientras caminaba a su lado.

—¿Qué ocurre mi lindo sasaeng? —le beso la mano donde descansaba el anillo de bodas.

—Cumplió su promesa. —lo abrazo.

—Lo sé cariño. —rio.

—Ya no puede aceptar a nadie más que no sea yo. —lo tomó de las mejillas.

—Fuiste el único que me trajo los papeles a Seúl. —bromeó el pálido.

—Y lo haría una y otra vez. —sonrió Jimin. —mi querido D.