60 | mucho por lo que vivr

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Mientras Tommy se marchaba y era perseguido por Luca Changretta y sus hombres, Tessa Shelby permaneció en su casa. Había descubierto que estaba embarazada casi una semana antes y actualmente estaba sentada en el piso de la cocina, vomitando intensamente en el recipiente más cercano que pudo encontrar. Se secó la boca con disgusto y se miró el estómago.

—Eres de terror —le dijo Tessa al bebé—. Disfruté bastante mi desayuno antes de vomitarlo todo.

—Tess, ¿con quién estás hablando? —preguntó Mason, caminando hacia la cocina con Bella en sus brazos.

Tessa sonrió—. Con mi bebé.

Mason se quedó en silencio, y Tessa prácticamente podía ver como intentaba entender lo que había escuchado—. ¿Qué bebé?

—Estoy embarazada, Mase —dijo Tessa sonriendo—. Pero no se lo digas a nadie porque Tommy no lo sabe todavía.

—¿Qué es embarazada, mamá? —preguntó Bella, retorciéndose en los brazos de Mason hasta que él la bajo.

Tessa acercó a Bella e hizo un gesto hacia su estómago—. Aquí está tu hermanito o hermanita —explicó Tessa—. Y cuando haya crecido y esté listo, o lista, vendrá al mundo.

—¿Como un regalo? —preguntó Bella.

—Sí, como un regalo.

—¿Voy a tener un hermano o una hermana? —preguntó Bella, y Tessa sonrió.

—Sí, Bell —dijo Tessa—. ¿Cómo deberíamos nombrarla si es una niña?

—¡Bella! —exclamó su hija, y Tessa y Mason se echaron a reír.

—¿Y si es un niño? —preguntó Mason, todavía riendo.

—¡Le pondremos tu nombre, tío Mase! —dijo Bella, señalando a su tío—. Porque eres el mejor.

Tessa sonrió, ya tenía un nombre en mente para él en caso de que fuera un niño. Ella y Mason se dirigieron a la sala de estar, donde Mason mantuvo a Bella ocupada mientras Tessa iba a limpiarse, todavía sintiéndose mareada. Estuvo tentada de comer algunas tostadas, pero incluso la idea de comer cualquier cosa la hacía sentir enferma de nuevo.

—Dios, tengo hambre —dijo Tessa, frotándose el estómago—. Será mejor que este bebé no haga esto todo el tiempo.

Un golpe en la puerta interrumpió su monólogo, y se dirigió hacia la planta baja para encontrar a Polly en el pasillo. La mujer la miró—. ¿Regresó Tommy?

—No —respondió Tessa—. Volverá pronto.

—Eso espero —susurró Polly.

—¿Por qué? —preguntó Tessa—. No es como si algo fuera a salir mal, ¿no?

Polly no respondió, porque en ese momento apareció el propio Tommy, con aspecto agotador. Llevaba la gorra en la mano y una pistola al hombro, lo que no pasó desapercibido por Tessa.

—Necesito hablar contigo —dijo Tommy.

Tessa se paró frente a él, bloqueando su camino—. Lo siento, no. El arma se queda junto a la puerta.

Tommy colgó su gorra y su arma antes de dirigirse a la sala de estar, donde Mason y Bella estaban jugando con los soldados de juguete que Arthur le había regalado por Navidad. Tommy se derrumbó en el sofá, cerró los ojos y suspiró.

—¿Qué pasó? —preguntó Tessa—. ¿Tommy?

—Me atacaron —respondió Tommy—. Los italianos sabían dónde iba a estar y me atacaron. Moss y la policía aparecieron antes de que pudiera acabar con ellos, y Changretta se escapó.

Polly se quedó detrás de ellos, escuchándolos hablar hasta que pareció agitarse, sirvió un trago para Tommy y lo colocó en la mesa. Sacó el mechero de entre sus dedos y encendió el cigarrillo para él, sacando a Tommy de su estado desconcertante. Mason se sentó con las piernas cruzadas en el suelo mientras Tessa se posaba en el apoyabrazos de la silla en la que Tommy estaba sentado.

—Recuerdo la primera vez que golpeaste a un policía —dijo Polly—. ¿Te acuerdas, Tess?

Tessa asintió—. Fue después de esa pelea en la que se metió, la cual se convirtió en una pelea callejera muy innecesaria.

—¿Por qué te habías peleado? —preguntó Mason, sonriendo como si ya supiera la respuesta.

—El bastardo se lo merecía —murmuró Tommy—. Tenía sus manos sobre mi chica.

—No solo tenía sus manos sobre mi —dijo Tessa, mientras el brazo de Tommy se enroscaba alrededor de su cintura y descansaba contra su cadera—. Estoy bastante segura de que también estaban debajo de mi falda. Nunca te había visto tan enojado en toda mi vida. Lo golpeaste hasta que quedó inconsciente.

—Sí, pero lo hizo por ti —dijo Mason—. Todavía recuerdo la expresión de su rostro cuando lo miraste en busca de ayuda.

—La policía intentó separarlos —recordó Tessa—. Y Tommy estaba tan enojado que le dio un cabezazo tan fuerte como pudo.

Polly rió al recordar el asalto de Tommy a un policía—. Después de tu OBE no pensé que volvería a pasar.

—Siempre hay una próxima vez con nuestro Tom —dijo Mason.

Polly se acercó a la ventana—. ¿Qué le vas a decir a Arthur?

—Le diré la verdad —respondió Tommy.

Un automóvil se detuvo afuera, anunciando la llegada de Arthur y Linda. Polly apartó la cortina—. Bueno, ya llegaron.

Salió de la habitación apresurada, y Mason la siguió. Tommy y Tessa permanecieron en la sala de estar, finalmente solos salvo por la presencia de su hija.

—Pudo haberte matado, Tom —dijo Tessa, poniendo una mano en la mejilla de Tommy—. Por favor, no vuelvas a hacer nada parecido.

—Lo intentaré —dijo Tommy—. Es más fácil decirlo que hacerlo.

Tommy todavía podía recordar la amenaza que Luca gritó a través del tiroteo sobre cómo iba a apoderarse de Tessa y sobre las cosas que dijo que le haría cuando lo hiciera. Dijo "cuando", no "si", lo que implicaba que Luca tenía un plan y que Tommy necesitaba mantenerse alerta si quería proteger a su esposa.

—Bueno, que no te disparen —dijo Tessa—. Tienes más agujeros de bala que un maniquí en un club de tiro.

Tommy sonrió—. ¿Pero estoy muerto? No.

—Cierto, pero siempre existe ese peligro —dijo Tessa.

Bella tiró de su falda—. Mamá, ¿dónde está el tío Mase?

—Ya se fue, cariño —respondió Tessa—. Le diré que dijiste que querías que volviera a jugar contigo.

—Mase es divertido —dijo Bella—. Juega a los soldados conmigo.

Tessa se volvió hacia Tommy—. ¿Ves por qué tienes que vivir? No tires todo a la borda por el deseo de eliminar a un hombre, Tommy. Por el amor de Dios, deja que alguien más lo haga.

Tommy asintió, besando la frente de Tessa—. Te prometo que lo intentaré.

VIOLENT ENDS | Thomas Shelby ²Donde viven las historias. Descúbrelo ahora