—Deja de estresarte tanto —pronunció divertido.
—¿Cómo quieres que no me estrese? En tres semanas es el primer año de Luz ¡Su primer añito! Y hay tanto por hacer y comprar.
—No creo que debamos festejarle el cumpleaños a la niña —le dijo pensativo Matthew, dándole de comer a la bebé una papilla de vegetales—. Ella ni lo recordará.
—Pero nosotros sí, y será un recuerdo precioso que ella podrá apreciar en fotos cuántos sea más grande.
—Sigo creyendo que una celebración entre nosotros tres, un pastel y dos globos, es suficiente.
—No, quiero que mi hija tenga un cumpleaños hermoso.
—¿Qué tal un hermanito?
Alex escupió el jugo que estaba bebiendo al escuchar la sugerencia de Matthew, haciéndolo reír a carcajadas.
—¿Es que tú estás tonto? ¡¿C-Cómo se te ocurre siquiera pensarlo?!
—Porque cuando era niño siempre quise un hermano con quién jugar. Y es mejor que se críen juntos, siendo ambos pequeños.
—¿Tú te piensas que es fácil pasar un embarazo? Para ti es sencillo decirlo, porque no tienes que padecer los síntomas ni los dolores luego.
Matthew rodó los ojos y le limpió las mejillas a Luz.
—Era una sugerencia nomás, no es para que me recrimines lo que tuviste que pasar —murmuró.
Alex suspiró y se puso de pie para ir hasta él y abrazarlo, besando suavemente su mejilla.
—Nadie está recriminando nada, pero Luz recién va a cumplir su primer año, y quiero dedicarle el tiempo que se merece.
***
Matthew estaba trabajando por lo que el rubio había decido salir con la niña a ver algunas tiendas. Dependiendo de lo que la bebé eligiera, le harían la temática para el cumpleaños.
Pero al momento de salir de la casa, Alex se encontró con una joven castaña, cargando un bebé en brazos... Que reconoció rápidamente gracias a su suegra.
—¿Quién eres tú?
—Am, hola primero ¿No? —le dijo frunciendo el ceño, al ver cómo esa mujer lo observaba con molestia.
—Claro, hola. Ahora ¿Quién eres tú?
—Mi nombre es Alex ¿Y tú? ¿A quién estás buscando?
—¿No es obvio? A Matthew estoy buscando.
—Él no está en este momento.
—Sigues sin responder quien eres. ¿Eres uno de sus amigos? Porque acabas de salir de su casa.
—No —pronunció serio.
—Como sea —pronunció con fastidio—. Necesito hablar con él y no me atiende el teléfono.
—Él no está, ya te lo dije.
Chasqueó la lengua y tomó su celular, haciendo una llamada.
—Hola, sí, estoy aquí, pero su hijo no está. ¿Una chica? No, sólo hay un muchacho aquí.
Sabrina escuchó lo que le decían por teléfono y luego miró a Alex confundida, antes de cortar.
—¿Tú eres Alexa?
—Sí, Alexa...
—¿Tú eres la novia de Matthew?
—Sí.
—¿Y esa niña es...?
—Nuestra hija, Luz.
Abrió los ojos sorprendida, mirando a Alex y luego a Luz, antes de cambiar sus rasgos por uno de rabia pura.
—¿Cómo que su hija? ¡¿Cómo puede ser posible que tenga otro hijo?! ¡¿Desde cuándo tú vives con él?! ¡Él se negó a pagar lo que pedí por mi hijo por alegar que no tenía fondos para hacerlo! Pero claro, ahora lo entiendo ¡Tiene otro hijo!
—En primer lugar, no grites en frente de mi hija ¿Okay? Y hazlo por respeto a tu bebé también, que bastante asustado se ve —le dijo serio, abrazando a Luz—. Y en todo caso, tu bebé es el otro hijo, porque Luz es mayor a él por dos meses.
—¿Y tú qué mierda sabes cuántos meses tiene mi hijo?
—Porque a diferencia tuya, Matthew y yo tenemos una buena relación, y él me cuenta todo. Sé que tu hijo se llama Ramsés, y tiene diez meses. Y lamento mucho todo lo que ha tenido que pasar, pero-
—¡¿Quién te crees que eres para venir a sentir lástima de él?! ¡Mi hijo no necesita la lástima de nadie! Y mucho menos de una de las zorras de Matthew.
Alex la vio irse así como llegó, dejándolo desconcertado. Esa mujer estaba loca.
...
ESTÁS LEYENDO
Papá No Soy Un Error
Teen FictionHistoria Mpreg... Si no te gusta este tipo de narrativa, te aconsejo no entrar ❤️❤️
