Papá No Soy Un Error

LV

—M-Maatt —gimió con los ojos cerrados, a escasos centímetros de sus labios, apretando los dedos de sus pies, abrazándolo con fuerza, sabiendo que no aguantaría mucho más.

El castaño sonrió y se movió más rápido, haciéndolo jadear más fuerte, descendiendo sus labios hacia su cuello, para besarlo, mordiéndolo suavemente.

Sintió como Alex se corría entre el vientre de ambos, y unos segundos después, él también terminó eyaculando, subiendo hacia su boca para besarlo, sujetándolo de las caderas con fuerza, sin querer salir de él.

Alex lo tomó de la nuca, y lo besó suavemente, intentando recuperar el aliento, y al parecer, el castaño no quería terminar aún.

—Espera —sonrió saliendo con cuidado con él—. Iré por otro condón.

—De acuerdo —sonrió divertido el rubio, antes de que Matthew volviera a besarlo, pero...

—Pa, pa.

—No podemos seguir, Luz se despertó —le dijo Alex entre besos, al escuchar que la bebé se había despertado y lo estaba llamando.

—Pero Alex-

—No quiero que llore, tendremos que dejarlo para después.

—Lo hacemos rápido y vas.

—¿Y así querías otro bebé? —le dijo divertido, dándole un último beso antes de salir de la cama y tomar una bata.

Matthew suspiró y se fue al baño, se suponía que Luz ahora dormía más, y hacía solo una hora se había dormido ¿Por qué se había despertado tan rápido? Llevaba todo el día esperando llegar a su casa para estar con Alex, y su hija le había arruinado los planes.

El rubio fue hasta la habitación de la niña, que había empezado a lloriquear y la tomó en brazos, besando suavemente sus mejillas.

—¿Qué pasó mi amor? ¿Tuviste un sueño feo? —sonrió abrazándola a él—. No tienes que llorar, mi vida, aquí ya está papi contigo.

Regresó a su habitación y escuchó el agua de la ducha.

—Le prepararé un biberón a Luz ¿Tú quieres algo?

—Am, un sándwich —le dijo desde el baño—. Cuando salga pediré helado.

—De acuerdo y cuando tú salgas yo tomaré un baño —sonrió, besando la frente de Luz—. Ven cariño, vayamos a prepararte tu biberón.

***

—Al final no me dijiste que ibas a contarme —le dijo comiendo helado, antes de darle un poco a Luz, que lo observaba ansiosa.

—Ah, sí, pues...

—¿Pasó algo? —le preguntó Matthew preocupado, dándole un cucharada de helado de vainilla a Luz.

—Es que no sé cómo decirlo sin que tú vayas a enojarte, porqué sé que lo harás.

—Habla Alex ¿Qué pasó? —le inquirió ya serio.

—Esta mañana cuando salí con Luz a hacer compras, la mamá de tu otro hijo estaba aquí, en la puerta.

—¿Qué? ¿Cómo que vino hasta aquí? Ella sabe muy bien que no puede venir a mi casa.

—Dice que tú no le atendías las llamadas, que tenía que hablar contigo, por eso vino en persona, y obviamente estaba con él bebé. Cómo le dije que no estabas, habló con alguien por teléfono, y creo que era alguno de tus padres, porque se refirió a ti como "su hijo".

—Esa habrá sido mi mamá —pronunció con rabia—. Desde que empezó a tener contacto con esa enferma y su hijo, no ha perdido oportunidad de nombrármelos. Incluso en su oficina tiene foto del niño.

—Que lo quiera tanto es bueno.

—No es bueno si eso supone que me joda a mí. Ella sabe muy bien que no me interesa esa criatura. Dejando eso de lado ¿Te dijo algo Sabrina?

—Am sí, supongo que tu madre le dijo que era tu novia, y se puso furiosa en ese momento, peor aún al saber que Luz era nuestra hija.

—Le voy a terminar poniendo una perimetral a la enferma esa —pronunció con rabia, poniéndose de pie—. No quiero que esté cerca de ustedes.

—¿P-Pero a dónde vas?

—A hablar con mis padres, y luego denunciar a la otra por acoso.

...