Papá No Soy Un Error

LVIII

—Luces muy tranquilo, hijo.

—Estoy tranquilo porque estoy seguro del resultado —pronunció con fastidio.

Estaba en la cafetería de la clínica de sus padres, y los resultados del análisis de parentesco habían llegado. Los padres de Matthew tenían el sobre, y ahora que el castaño había llegado, lo iban a abrir.

—¿Cómo puedes estar tan seguro cuando esa niña ni se parece a ti? —le dijo su madre.

—En cambio Ramsés es obvio que es tu hijo, desde su nacimiento se notaba su parecido a ti —secundó su padre.

—No tengo ganas de oírlos, abran de una vez ese resultado y terminemos con esto.

—Prefiero que lo abras tú, hijo, después de todo, tú estás tan seguro —le dijo dándole el sobre su mamá.

Matthew suspiró y tomó el sobre, abriéndolo. Sacó la hoja y leyó lo que allí decía, frunciendo el ceño.

—¿Entonces?

—Dice que no hay parentesco —murmuró.

—¡Te lo dije! Esa niña ni siquiera-

—Cierra la boca, mamá —masculló con molestia, dejando la hoja sobre la mesa, tomando su celular y marcando un número—. Ariel, hola, habla Matt.

—Bueno, al menos ya sabemos que la niña no es tu hija biológica, y que el único heredero es Ramsés —sonrió su padre.

Matthew los ignoró, dándoles la espalda.

—Ajá, envíame el resultado por correo ahora, y en papel luego me lo das.

Cortó la llamada y miró a sus padres.

—La verdad, no entiendo cual es su problema con Alex y Luz, especialmente con Alex, cuando él fue tan amable con ustedes, e intentó tantas veces que yo mejorara mi relación con ustedes. En cambio a la otra zorra barata que los demandó en la primera oportunidad que tuvo, ¿ahora la defienden a muerte?

—Porque esa tan Alexa te mintió, hijo ¿Por qué no puedes aceptarlo? ¡Tú único hijo es Ramsés!

—¡Mi única hija es Luz! —exclamó harto—. Yo mismo le realicé la prueba a Alex cuando estaba gestando, y como no confío en ustedes, porque nadie racional defendería a quien lo demandó desde un comienzo, yo también hice otra prueba por mi parte. Y aunque fuera negativa también, no me importa ¿Saben por qué? ¡Porque yo solo amo a Luz!

Su celular sonó en una notificación, y abrió el correo, viendo que era el resultado del laboratorio que él mismo había hecho por su parte. Lo miró y sonrió, antes de enseñárselo a sus padres.

—Vaya, acá también dice que es mi hija, que extraño que de tres, el único que dió que no era, es donde ustedes lo enviaron.

—La prueba debe estar contaminada, es un laboratorio muy prestigioso dónde nosotros lo hicimos. Es-

—Está claro que son unos enfermos —pronunció serio, intentando ocultar la decepción que sentía—. Saben, con esto acaban de eliminar cualquier posibilidad de que yo me acercara a ese niño, porque ahora lo aborrezco tanto como a ustedes. No los quiero volver a ver cerca de mi familia. Sabrina ya tiene una orden de alejamiento, y ustedes se ganarán otra si los vuelvo a ver por mi casa —masculló antes de irse.

Al diablo con sus padres, ahora tendría que buscar un nuevo empleo.

***

—Matt ¿Qué pasó?

—Nada —sonrió levemente, tomándolo del rostro para darle un beso corto en los labios.

—¿Tus papás ya aceptaron que Luz es tu hija? —le preguntó preocupado Alex, mirándolo a los ojos.

—No, no lo hicieron, pero eso no importa ¿Sabes? Porque yo estoy seguro que es mi hija, y sólo eso importa.

—¿Discutieron?

—Mm, un poco —murmuró—. Pero tú no pienses en eso ¿Está bien? Así como tus padres decidieron alejarse de ti, mis padres también de mí. Ahora tendré que buscar un nuevo empleo.

...

A pocos capítulos del final.