La magia de Avalon: Bienvenidos [Libro 1]

Capítulo 38: Maestro y aprendiz

Darion y Beck llegaron a la escuela Norte, para reunirse con los demás para la fiesta. Vanyan y Peters aguardaban en la entrada del edificio a que bajaran las chicas.

- ¿Seguro que no voy muy mal? - preguntó Beck, inseguro. Llevaba unos vaqueros, una camiseta de manga corta blanca y una americana.

- Tonterías, estás estupendo... - Darion quedó mudo al contemplar a Vanyan con su ropa de gala -. Ala - suspiro ensimismado.

Peters no pudo evitar reír ante las miradas cautivadas de ambos profesores. Darion llevaba unos mechones atados en la parte posterior de la cabeza, normalmente tenía un aspecto más desaliñado, y aquello pareció hipnotizar al elfo por un momento.

- Vaya, qué elegantes - dijo Peters cuando se acercaron.

Vanyan apartó la vista por un momento, intentando recomponerse y mostrar indiferencia ante Beck, pero era muy obvio.

- Nunca tanto como tú - respondió Darion.

- ¿Qué tal, Beck? - preguntó Peters al cambiepieles, poniéndole una mano en el hombro.

- Nervioso... un poco.

- Tranquilo, no te van a comer. Siempre y cuando Darion sea capaz de controlar el orgullo que siente por ti, o si no se te echarán encima.

- Haré lo que pueda - dijo Darion, haciendo sonreír a Beck, algo avergonzado.

- Perdón por la tardanza - escucharon la voz de Lizzy en la escalera.

Las dos chicas descendieron, ambas arregladas, muy elegantes. Lizzy llevaba un vestido de tirantes finos, de falda larga, de color azul claro, con adornos transparentes en forma de estrella de mar, y un chal de fiesta alrededor de sus brazos. Roxy vestía un vestido de tirantes bajo los hombros, con falda de vuelo corta, de color azul claro, y un cinturón y una diadema blancos de pedrería.

Peters sonrió al verlas. Su vista viajó hasta Vanyan un segundo, que miraba a la sirena con un conmovedor brillo en sus ojos. Ambos les tendieron la mano, para ayudarlas a bajar los escalones.

- Gracias - le dijo Lizzy al elfo. Ambos se miraron sin decir nada.

- Estáis preciosas, chicas - les dijo Peters.

- Gracias - contestó Roxy algo nerviosa.

Vanyan carraspeo.

- Bien. El plan es sencillo - comenzó a hablar -. Iremos a la gala, fiesta... o como queráis llamarlo. Nos dividiremos por el espacio. No os separéis, cuidadito con lo que decís, no uséis la magia a no ser que nosotros lo digamos, y...

- Hey, para el carro, amigo - lo detuvo Peters -. Vamos a una fiesta. Bastante muermo va a ser ya como para que tú lo llenes de reglas. Sabemos lo que tenemos que hacer, ¿ok?

"Lo dudo" pensó Lizzy.

- Yo no - le dijo Beck a Darion en un susurro. El mago respondió dándole una palmadita de ánimo en la espalda.

- Perfil bajo - les recordó Vanyan. Le ofreció el brazo a Lizzy y esta lo agarró, caminando junto al profesor con pose regia. Toda una princesa.

Roxy respiro hondo.

- ¿Lista? - le preguntó Peter ofreciéndole el brazo también.

- Sujétame si me desmayo.

- Siempre lo hago.

Roxy le sonrió y lo agarró del brazo. "No hay nada que temer" le decía la mirada del profesor. Pero no estaba tan segura.