Un lunes por la mañana, a inicios de octubre, las alumnas de primero de la escuela Norte, se encontraban en clase de pociones, con el profesor Luy.
Luy era un fauno. En lugar de piernas tenía patas de cabra, con el pelaje castaño. Las llevaba siempre cubiertas por unos pantalones. Su piel era negra, sus ojos marrones, y su pelo oscuro y rizado. Era muy delgado, con la nariz puntiaguda, y algo más bajito que Vanyan. No era un profesor que destacase por su belleza. Era bastante peculiar. Torpe e ingenuo. Nadie lo tomaba en serio. Pero era una gran persona y su torpeza hacía reír a las chicas; sus clases se hacían entretenidas solo por eso. Era imposible salir de una de sus clases sin haberle visto tropezar, chocar, o tirarse algo encima.
Su aula era de tonos tierra. Había una gran mesa de madera en forma de L, frente a la puerta. Era la mesa del profesor. Las alumnas se dividían por parejas, en mesas marrones, con taburetes altos. A su alrededor había armarios y estantes con el material de la asignatura. En las mesas tenían calderos y probetas para realizar las pociones.
Tras el maestro había una pizarra de tiza, donde el fauno había comenzado a escribir los ingredientes que necesitarían para el ejercicio.
Roxy hacia pareja con Lizzy, Misty con Merope, Morgan con Karin, y Lana con otra cambia pieles.
El profesor había prohibido que Lizzy y Morgan estuviesen cerca, ya que, al parecer, habían explotado el laboratorio el año anterior. Por eso repitieron de curso.
- Muy bien, estos son los ingredientes. Es una sencilla formula de cambio de color. Muy simple. Pero solo sirve para objetos. Procurad no tirárosla encima – Luy choco con su silla y casi tira el material que tenía sobre la mesa. El fauno rio, nervioso, e intento aparentar que no había pasado nada –. Jeje. Eh... Lo tenéis todo en los frasquitos que os he dejado. Sed cuidadosas, ni más ni menos, recordad. Cualquier mínimo error puede alterar el resultado, y no queremos accidentes.
Misty se tapó la boca para contener la risa.
La mayoría de accidentes los provocaba el profesor, y siempre contra sí mismo.
- ¿Cómo es posible que alguien tan torpe y descuidado pueda hacer pociones? - le pregunto en un susurro Roxy a la sirena.
- Llevo tiempo haciéndome la misma pregunta.
- Bien, empezad. Cualquier duda, preguntadme – concluyo el profesor.
La clase se llenó de murmullos y las chicas comenzaron a realizar la poción. Era bastante fácil, les habían dejado los ingredientes en pequeños frasquitos, y el orden para echarlos. Solo debían tener mucho cuidado en cuanto a las proporciones y el tiempo.
Pasaron veinte minutos y de repente Misty alzo la mano.
- Profesor Luy, ¿de qué color tenía que ponerse?
El profesor se encontraba revisando unos papeles, buscando algo.
- Al echarlo todo y mezclarlo, se pondrá gris, y al cabo de un rato en reposo a fuego lento, deberá volverse de cualquiera de los colores del arcoíris - respondió, sin apartar la vista de sus papeles.
Misty y Merope retrocedieron y se apartaron del frasco donde habían mezclado su poción.
- Ehh... ¿Y la parte de hervir cuando pasa? - cuestiono la elfa, alarmada.
- ¿Qué? - Luy levanto la vista y vio que el caldero de las chicas se encontraba hirviendo, su contenido era gris y se estaba llenando de espuma -. ¡Ay! ¡Apartaos, apartaos! - el profesor se aproximó al caldero, mientras las chicas se alejaban. De repente, este dio un fogonazo hacia arriba, y el fauno soltó un gritito –. ¡Que no cunda el pánico! - exclamo el profesor, claramente en pánico -. ¡El extintor! ¡No os acerquéis, ahora vuelvo! - salió corriendo del aula.
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La magia de Avalon: Bienvenidos [Libro 1]
FantasyAvalon es una escuela de magia, creada para unir a todos los seres mágicos del mundo: sirenas, hadas, magos, harpías, centauros, faunos... Con la idea de terminar con cualquier tipo de discriminación, dando fin a la desigualdad y el odio en el mundo...