Capítulo 25

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-Señor Manden, me alegra ver que por fin ha despertado- dijo Severus mientras levantaba la vista de donde estaba examinando a Harry. Caleb Manden estaba en la cama contigua a la de Harry en el ala del hospital, donde ambos chicos llevaban ya dos días.

-Hola, profesor-, dijo Caleb y miró a Harry, que seguía inconsciente en la cama.

-¿Qué ha pasado? ¿Está bien?-, preguntó.

-Cuando se enfrentó al señor Fields y al señor Reed, utilizó magia sin varita para crear un escudo a su alrededor y evitar que le golpearan con algún hechizo. Sin embargo, la magia sin varita es agotadora cuando no se perfecciona. Acababa de salir de mis habitaciones después de una sesión de entrenamiento en la que practicamos su magia sin varita, por lo que sus niveles de magia eran más bajos de lo habitual. Cuando levantó el escudo, usó más de su magia y eso drenó sus niveles de magia. Ha caído en un coma inducido mágicamente para reponer su magia- explicó Severus y Caleb asintió.

-Entonces, ¿se pondrá bien?- preguntó Caleb.

-Sí, debería despertar en algún momento de hoy. Sin embargo, es posible que le duela la cabeza. Se golpeó la cabeza al caer-. Severus asintió.

-Bien-, dijo Caleb.

-Señor Manden, ahora que está despierto, tal vez pueda arrojar algo de luz sobre lo que ocurrió aquella noche-, dijo Severus, de pie junto a la cama del chico.

-Fields y Reed me estaban golpeando porque había dicho que Harry era mi amigo y que no hay nada de malo en que usted y Harry sean amigos. Dijeron que yo era un traidor y que no era un Slytherin y empezaron a pegarme. Harry vino por el pasillo y les dijo que me dejaran en paz. Empezaron a gritarse y a enviarse hechizos. Aturdió a Reed y utilizó el Petrificus Totalus sobre Fields, pero luego él también se desplomó y no pude despertarlo-, explicó Caleb los acontecimientos.

-Gracias, señor Manden. El señor Fields y el señor Reed han recibido tres meses de castigo y no podrán ir a Hogsmeade durante el resto del año. No deberían molestarte, pero si lo hacen, quiero que me lo digas-, dijo Severus y Caleb asintió.

-Sí, señor-.

-Muy bien. Descansa un par de horas más y Madam Pomfrey te examinará. Deberías ser dado de alta antes de la cena-, dijo Severus.

-Sí, señor-, dijo Caleb y se volvió a acomodar en la cama para intentar dormir de nuevo.

Severus esperó a que Caleb estuviera dormido antes de volver con Harry. Cuando se había enterado de lo sucedido, se había preocupado y enfurecido. Harry debería haber sabido que no debía usar su magia sin varita. Severus sacudió la cabeza. Definitivamente, él y Harry iban a tener algunas palabras cuando se despertara.

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Harry gimió en silencio mientras volvía a la conciencia, sin quererlo. Se sentía agotado, como si no hubiera dormido durante días. No quería despertarse. Quería seguir durmiendo. Sin embargo, su cuerpo no escuchaba sus deseos y pronto estuvo mirando el techo de piedra del ala del hospital. Volvió a gemir cuando se dio cuenta de que estaba de nuevo en la enfermería.

Todos tenían razón. Realmente era propenso a los accidentes y atraía los problemas.

-Buenas noches, señor Potter-, dijo una voz grave y familiar y Harry gimió por tercera vez.

Conocía ese tono.

Estaba en problemas.

Genial.

Harry giró la cabeza para mirar a su izquierda y se encontró con los brillantes ojos negros de Severus Snape. No parecía complacido.

SPUR OF THE MOMENTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora