SPUR OF THE MOMENT

Capítulo 35

-Nagnok, tienes una carta-, dijo el goblin Griphook mientras le entregaba una carta al otro goblin.

Nagnok asintió con la cabeza y cogió la carta de su superior. Abrió el sobre y sacó la carta. Canturreó al ver el nombre de su correspondencia, un hombre del que hacía tiempo que no tenía noticias.

Nagnok,

Hace tiempo que no me pongo en contacto contigo, pero necesito tu ayuda. Como gestor de mis cuentas y uno de los únicos goblins que conozco, eres el único en quien confío lo suficiente como para pedirte esto. Deseo reunirme con usted para discutir esto. Iré a Gringotts si lo requieres o puedes venir a Hogwarts. La decisión es tuya.

Firmado,
Severus T. Snape

Nagnok volvió a tararear. Hacía años que Severus Snape no se ponía en contacto con él. Sabía que el hombre no pedía ayuda a menos que la necesitara mucho y pedírsela a un duende... debía ser algo que sólo un duende sabría. Tomando un pergamino y una pluma, escribió su respuesta.

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-Harry, si no te levantas ahora, vas a llegar tarde-, dijo Severus, abriendo de un empujón la puerta de la habitación del Gryffindor.

-Me da igual. Estoy cansado-, murmuró Harry desde debajo del edredón.

-Harry, levántate. Tienes que ir a clase-, dijo Severus, acercándose a la cama. Harry lo ignoró y se metió más en la cama. -Muy bien-, murmuró el hombre y sacó la varita. -Aguamenti-.

Harry chilló y se cayó de la cama al recibir un chorro de agua fría. Cayó en un montón en el suelo y miró con odio a Severus, que lo miraba con una ceja levantada y una sonrisa burlona.

-Buenos días, señor Potter-, dijo Severus, guardándose de nuevo la varita.

-Bastardo-, dijo Harry y la sonrisa de Severus se amplió.

-No voy a dejar que faltes a clase. Date una ducha y prepárate. Puedes desayunar rápido aquí abajo- le dijo Severus y Harry dio un suspiro exagerado.

-Bien-, dijo Harry y se puso en pie. Al ponerse de pie y dejar caer el edredón, se dio cuenta de que se estaba congelando. -Maldita sea, hace frío-.

-Estás mojado y en las mazmorras. Claro que tienes frío-, dijo Severus y Harry lo fulminó con la mirada.

-¿Y de quién es la culpa?- Dijo Harry mientras entraba en su cuarto de baño. Severus simplemente se rió de él y salió de la habitación. Severus caminó por la sala de estar pero se detuvo cuando Ivory entró sosteniendo una carta.

-¿Desde cuándo me traes el correo?-. Severus enarcó una ceja mirando a su familiar mientras ella se posaba en su hombro y le entregaba la carta.

-Si es importante, lo traigo- dijo Ivory y Severus puso los ojos en blanco. La acarició ligeramente un par de veces antes de volver a la carta que tenía en las manos, miró la "G" del reverso y supo que era de Gringotts. -¿Cómo está Harry? Hace tiempo que no lo veo-.

-Está bien. Ahora está en la ducha. Ve a verle. Le gustará volver a verte-, le dijo Severus. Ella asintió y salió volando hacia la habitación de Harry.

Severus la vio marcharse antes de volver a la carta que sostenía. La abrió y sacó la carta.

Señor Snape,

Es un placer volver a saber de usted y me honra que me haya pedido ayuda. Si le parece bien, esta tarde iré a Hogwarts para hablar de lo que desee.

Firmado,
Nagnok
Encargado de las cámaras acorazadas de Snape y Prince.

Severus estaba agradecido de que su administrador pudiera venir, así que contestó rápidamente, diciendo que esa tarde estaba bien. Envió la carta por el Floo y se dirigió a la cocina para pedir un desayuno rápido.