La ultima sombra de estos tiempos

No importa lo que piensen de ti

Yoru se sentó en el suelo

Yoru: espera, espera, yo no--

No pudo terminar su frase, ya que Hi cerró su puño y de su mano cerrada nació una luz blanca, y esa misma luz salió de debajo de los grilletes que Yoru tenía puestos.

Ahora, no hace falta ser un gran científico o químico para saber que la oscuridad y la luz son enemigos naturales; digo, miren la fuerza de Star Wars: el lado oscuro, el Imperio; el lado luminoso, la resistencia, ustedes me entienden.

El punto es que al momento de que esa luz emanara de debajo de los grilletes de Yoru, él pudo sentir como toda la zona ocupada por dichos grilletes era quemada con un fuerte calor, haciendo que dé un grito de dolor y caiga de espalda al suelo otra vez.

Hi (seria): no te dije que te pudieras levantar. Ahora respondeme, Yoru.

Yoru (adolorido): ay... Si que estás enojada, ni siquiera me llamas "Onii-chan" o "Yoru-nii"...

Hi (seria): eso era antes de saber que eras un demonio.

Yoru (aun adolorido, en tono dramático): bueno, ahora me duelen mis brazos... Y mi corazón :(

Hi (molesta): ah, te hacés el piola -dijo levantando su puño emanando luz nuevamente.

Yoru (con un poco de miedo): está bien, está bien, no te enojes... Te diré, pero no sé si me creas... -serio- Yo no soy un demonio.

Hi (escéptica): ¿en serio? ¿Y ese desierto lleno de monstruos? ¿Y esa forma con cuernos y cola que llamas "modo demonio"?

Yoru (nervioso): eso último fué al calor del momento, y lo del desierto fué... Bueno,  desquitarse... Jeje, jeje...

Hi volteó a ver escéptica al lector

Yoru (preocupado) : ... ¿A quien mirás?

Hi: no importa -dijo volteando a verlo otra vez-, ¿como es eso de que no eres un demonio?

Yoru: verás, resulta que los demonios no existen

Hi (confundida): ¿eh?

Yoru (serio): como lo oyes. ¿Recuerdas la historia de los Titanes?

Hi (confundida): si... Se supone que el Titán oscuro inició una guerra; esa historia tiene tres finales distintos pero... -voltea a ver a un lado como si hubiera alguién ahí parado- alguién me contó un cuarto final, dónde el Titán oscuro mató a todos los demás pero sus almas--

Yoru: pero sus almas sobrevivieron -dijo Yoru al mismo tiempo-.

Hi (sorprendida): si... ¿Como lo...

Yoru: y como tú usas la luz... -dijo interrumpiendo nuevamente- y ahora volteaste a verlo a él... -dijo viendo directamente a un chico de de cabello blanco y ojos amarillos- tú debes ser la portadora del Titán de luz -dijo finalmente viendo a Hi.

El chico parado al lado de Hi lo miro estupefacto. No se suponía que Yoru lo pudiera ver. De cualquier manera, el chico vestía lo que parecía ser una toga romana, era un poco más alto que Hi, aunque no más viejo. Y como dije, tenía cabello blanco y ojos amarillos.

Hi (sorprendida): tú... ¿¡Puedes verlo!? Pero, el contrato decía...

Yoru: ¿que nadie más además del portador podía ver al Titán? -dijo interrumpiendo otra vez.

Hi (molesta): ya me están cansando tus interrupciones

Yoru: (nervioso): pe...perdón jeje. Si, puedo verlo -dijo con un tono de voz más sereno-, y creo que se debe a ésto -dijo señalando que su ojo derecho también tenía las líneas Rojas