El Sexto Herlado de los Fatui

25(+18)

(Pov Kairi)

Estuvimos bastante tiempo en la tumba de Tomo junto a mi hermano, cuando volvimos a la playa había un aura distinto entre Kaede y Scaramouche.

—Oye Kazuha.—Mi hermano me miró de inmediato.— Creo que este será nuestro último encuentro en Inazuma.

—¿Te irás?—Asentí algo triste.—¿Te irás con el fatui a otra región?

—Me iré a Sumeru. Ayudaré a Scaramouche en una misión.

—No estaremos tan alejados, yo me iré a Liyue por un tiempo con la flota y luego veremos hacia donde iremos.— Tomó mis manos y sonrió levemente.—Prometo visitarte en Sumeru cuando tenga un poco de tiempo libre.

—También yo. Si Scaramouche no me sobreexplota prometo visitarte.

Nos dimos nuestro último abrazo antes de separarnos por tal vez cuanto tiempo.

— Te quiero Kazuha.

—Y yo a ti Kairi, que el viento te cuide y te proteja.

Nos separamos y caminamos en dirección de nuestros acompañantes.

—¿Estás lista mortal?— Scaramouche estaba frente mio con los brazos cruzados.

— Por supuesto. Si tienes que ir hasta al mismo abismo iré contigo sin dudar.

Rodó los ojos.—Tan dramática como siempre.

Kazuha se acercó a Scaramouche y estrechó su mano.— Espero que cuides a Kairi por mi. Cuídala como si fuera lo más importante para ti como lo es para mi.

Scaramouche sonrió sombriamente y le estrechó la mano.— Cuidare muy bien de ella sin necesidad de qué tú me lo digas, Kazuha.—La mano de mi hermano estaba roja. Será imposible que Scara deje de ser un idiota.

Kaede estaba a mi lado y me abrazó levemente.— Cuidate mucho Kairi.—Susurró a mi oído.— Si te cansas de ese bueno para nada, puedes ir a Liyue a buscarme a mi y a Kazuha.—Me reí levemente.
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—No creo que suceda eso pero gracias.—Le susurré.— Espero que te conviertas luego en la novia de Kazuha eh.

Kaede se puso roja como un tomate y solo se rió avergonzada.

Me despedí con la mano nuevamente de mi hermano y nos fuimos al puerto.

Después de un gran silencio, Scaramouche habló.

— Mortal, desde ahora seremos unos prófugos de los Fatui, obviamente yo sigo con mi título de Heraldo por cuestión de tiempo.—Nos subimos al barco.— Me lleve la Gnosis Electro por cuenta propia y no para el deseo de la Tsaritsa.

—¿Estamos en peligro?— Estaba asustada. Temía por mi vida y la de Scaramouche.

—De momento no, solo estaremos como desaparecidos. Él único que sabe nuestro próximo paradero es Dottore.

—Que gran problema...—El barco comenzó a irse lentamente de Inazuma.—¿Cuánto tiempo estaremos en el mar?

—No lo sé, solo me importa llegar al destino con vida.—Levantó los hombros restándole importancia.

— Aveces me dan ganas de matarte con lo poco interesado que eres en algunos temas.— Lo fulmine con la mirada mientras nos adentrabamos en nuestro transporte.

—Deja de quejarte mortal.— Hablaba mientras abría la puerta de una habitación.—Gracias a mi bondad te mantienes con vida, aparte de ser tu "novio" soy tu maldito salvador y obviamente tu superior.

Rodé los ojos.— Amo tu humildad. Dame el libro que prometiste.— Me cruce de brazos.

—Primero quiero saber algunas cosas.—Se sentó en la cama y dejó el paraguas en otro lado.— Quiero que me digas lo que sepas de Sumeru. Si respondes bien te daré el libro e información prohibida.