39

204 11 2
                                    

(Pov Kairi)

La puerta sonaba con bastante fuerza.

—¡Ya voy!—¿Quién puede estar molestando a esta hora?

Abrí la puerta.— ¡Kairi!— Entró muy nervioso.—¿Puedo preguntarte algo?

— Claro.— Nunca lo había visto en este estado.

—¿Que hiciste estos últimos cinco años?— Lo miré extrañada por su pregunta.— Solo respóndeme porfavor.

— Bueno... Hice muchas cosas.— Ahora tendré que recapitular todo.— Me uni a los Fatui, serví a Signora y a Tartaglia. Desde hace un tiempo estoy en Sumeru por ordenes de Dottore pero lo demás es historia que ya sabes.

—¿No te has enamorado de alguien dentro de los Fatui?— Rodé los ojos.

— No, he estado todo este tiempo sola.— Si que era mala mi vida sentimental.— Ningún hombre ha sido capaz de cautivarme lo suficiente.

Por cada palabra que decía, su ansiedad iba empeorando. No sé porque tantas preguntas sobre el pasado cuando el estuvo en su mayoría.

—¿No te suena el nombre Scaramouche?

— Nunca lo he oído, pero es un nombre bastante extraño y largo.

—¿Conoces al Sexto Heraldo de los Fatui?— Me reí un poco incrédula.

— El puesto lleva años vacío.— Aether me miraba impactado.— Signora me había dicho que no habían encontrado a una persona digna.

Aether puso sus manos en su cara en señal de frustración. ¿Que bicho le picó ahora?

— Se que es extraño que te hiciera preguntas, perdón por eso. Me debo ir.— Yo solo asentí extrañada.

Aether se fue y me dejó un poco extrañada.
¿Scaramouche? Que nombre tan extraño y feo.

(Pov Aether)

Maldición, todos olvidaron a Scaramouche, menos yo por ser de otro mundo.

Volvi al santuario para llevarme a Paimon a Inazuma, si Scaramouche borró su existencia, entonces la masacre de las cinco escuelas no tuvo que haber sucedido.

—¡Volviste!— Paimon fue volando hacia mi.— ¿Aun no encuentras respuestas?

—No, pero debemos ir a Inazuma a verificar algo.

Paimon se quejó por el largo viaje pero debía encontrar algún rastro de Scaramouche y saber si en verdad pudo cambiar el pasado.

Llegamos a Inazuma y quería preguntarle a algún herrero de un clan de las cinco escuelas de Raiden para saber la historia, si cambio el pasado no tuvo que haber existido el incidente de Tatarasuna ni el homicidio de las cinco escuelas.

Para mi suerte allí estaba mi peliblanco favorito.

—¡Aether!¡Paimon!— Kazuha nos saludaba.— No me esperaba verlos por esta nación.

—Kazuha.— Estrechamos nuestras manos.—¿Puedo preguntarte algo?

— Por supuesto.— Kazuha sonrió.

—¿Me podrías contar sobre la historia de las cinco escuelas?

—Vaya, no me esperaba que el gran viajero quisiera saber una historia tan oscura y trágica.— Kazuha puso su mano en el mentón.— Hace unos cien años ocurrió una masacre en las escuelas por parte de un herrero...

Kazuha me contó como un descendiente de un clan asesinó a la mayoría de herreros debido a la muerte de su padre en Tatarasuna, que entró a la fragua junto a un herrero pero ninguno de los dos volvieron.
Consumido por el odio cometió ese crimen.

El Sexto Herlado de los FatuiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora