Capítulo 26: Jimin

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[Del día en donde Jungkook se quedó a dormir con Namjoon y Seokjin.]

No fue mala idea regresar al departamento de aquel chico, amigo de Yoongi, para cerciorarme de que la fiesta seguía en pie. Subí las escaleras, el sonido resonante de la fiesta se escuchaba desde abajo y fue incrementando cuando llegué al ingreso, no había seguridad por ningún lado, así que me interné en el lugar con facilidad.

Revisé alrededor con la mirada, no vi rostros conocidos, no hallé a la persona que vine a buscar. Seguí directo hasta la barra improvisada, me detuve para poder escanear el lugar de rincón a rincón, me detuve cuando lo encontré. Vante estaba sentado en uno de los sofás muy bien abrazado con una chica, no había rastros de Jungkook por ningún lado. Era el momento perfecto.

Avancé hasta él con toda la seguridad del mundo, esbozando una sonrisa. Tomé asiento a su lado y él se volteó a verme cuando yo toqué su brazo. Nunca lo vi tan de cerca como pude hacerlo esa noche. Me estremecí al contemplar su gran atractivo, tenía los rasgos definidos y simétricos... así como Taehyung.

Evidentemente Vante no era Taehyung, pero sentí nostalgia al encontrar gran parecido entre ellos. A Jungkook le gustó Vante porque se parecía a Taehyung, eso sucede.

Aunque por un momento creí que le había encontrado...

—Hola, ha pasado tiempo, ¿no crees?

Me sonrió, yo acaricié su brazo.


Vante era diferente, era descarado y por alguna razón eso me gustaba. No, no solo quería tener algo con Vante porque estaba con Jungkook — aunque ese fue mi plan inicialmente—, sino porque es muy, muy atractivo. No lo tendría difícil, porque está aquí besándose con otra chica, por supuesto cambiaría a Jungkook por cualquiera.

Muy bien, eso Jungkook, sufre... siente el dolor de la infidelidad y de un corazón roto, espero que te queme y te duela en carne propia.

—Sí, puede ser.

—¿Tienes planes esta noche, Vante?

—Sí.

Él se distrajo cuando la chica jaló de su manga para que le prestara atención. Se besaron una vez más, yo no me moví ni un centímetro de ahí, solo recordé los rumores que comentaban los demás de que Vante se acuesta y sale con muchas personas, lo compruebo ahora. Sin embargo tenía la duda de si... ¿Jungkook permitía esto o simplemente no lo sabía?

Claro que no lo sabe y verlo directamente podría destruir su corazón.

—Vante, ¿te gustaría salir afuera? —Le pregunté cuando él se separó de la chica.

—No, hace frío.

—Me refiero a que... ya sabes, podríamos darnos una vuelta.

—Claro.


Me levanté a par de Vante, sin embargo la chica que le acompañaba, tomó de su brazo y le obligó a retomar su lugar en el sofá. Él soltó una estridente risa y acarició la mejilla de su acompañante.

—Vante...

—En otra ocasión, bonito —me dijo con tranquilidad, aunque la chica estuviera fulminándome con la mirada.

Vante se centró en ella e intentó ignorar mi presencia. Yo pensé velozmente, no podía dejar que el plan se me escapara de las manos así de fácil, tenía que aprovechar la ausencia de Jungkook esta noche, sabía que no tendría otra oportunidad más adelante.

—Si tú estás aquí liándote con una chica, ¿qué crees que está haciendo Jungkook ahora mismo? —Le pregunté como si fuera lo más común del mundo, ni siquiera tuve que mirarle para saber que él tenía toda la atención sobre mí.

—...

—Me dijiste que ustedes no eran novios, pero a veces actúan como tal, ¿o solo lo dijiste porque querías tener mi número?

—No tenemos nada... —La seriedad en su voz me dio a entender que Jungkook podría importarle más de lo que dice negándolo. ¿Qué hizo Jungkook para tener la atención de un chico como Vante? Maldije internamente.

Tenía que seguir con el plan.

—Es bueno saberlo, ¿sabes? Él y yo éramos mejores amigos, le consideré como un hermano, pero me traicionó, él aparenta ser un chico sensible e inocente pero es todo lo contrario, lo has notado, ¿no?


—No.

Levanté mi cabeza para encontrarme con sus ojos, tenía una mirada seria y yo borré mi sonrisa para reemplazarla con una expresión de melancolía fingida.

—¿Cómo es posible que no lo notaras? —Toqué mi frente con aparente nerviosismo.— No sé si contarte esto... tú eres su amigo y no creo que deba contarte esto...

—Hazlo.

Todo estaba marchando a la perfección, solté un suspiro pesado. La chica jaló del brazo de Vante, pero él la apartó y ella se fue muy molesta hacia la barra.

—Jungkook... seduce a los hombres por dinero o satisfacción. —Solté otro suspiro con aflicción.— Jungkook actúa noble e inocente para atraer a los hombres, siempre lo ha hecho. Yo tenía un novio hace tiempo... — sabía que Vante podría hablar con Yoongi y éste corroboraría que lo que dije no es cierto, así que seguiría inventando la historia— y sintió envidia, no lo sé exactamente, pero hizo de todo para arrebatármelo y al final terminó acostándose con él y... me envió un video de ellos haciéndolo.

—...

—Tal vez notaste que él siempre me mira mal y siente rabia al verme, yo intenté perdonarle, pero él cada vez que comporta peor conmigo. En serio quiero perdonarle, pero cada día es imposible, menos cuando le ha estado coqueteando a mi novio, a Suga.

—¿Perdón? —Vante tenía una expresión incrédula, mezclada con preocupación. Yo fingí secar una lágrima de mi ojo.


—Así es... ahora que hemos vuelto a encontrarnos, él quiere quitarme lo que más quiero, como lo hizo antes, me quiere hacer daño. —Cubrí mis ojos y sollocé.— Es por esa razón que ya no quiero que mi novio venga a las fiestas de carreras o las de aquí, porque... tengo miedo de que él me lo arrebate.

Vante se quedó mudo, mirándome, como si no pudiera creer mis palabras. Yo sequé mis "lágrimas" con mi manga, agradeciendo que las luces estuvieran bajas y cambiaran de color, para que no comprobara si realmente estaba llorando.

—Es por esa razón...

—Sí, pero por favor no le digas nada de esto, si llega a saber que yo te lo conté podría matarme y ya estoy demasiado aterrado como para soportar eso.

—No diré nada...

Vante se dejó caer sobre el respaldo del sofá y soltó un suspiro. Vi su expresión, él estaba decepcionado. Había cumplido con mi misión.

—Vante.

—Tengo que irme —dijo de pronto, poniéndose de pie, yo logré sujetar su brazo antes de que se marchara.

—¿Puedes llevarme? E-estoy muy conmocionado...

—Claro.

Bajamos las escaleras en silencio. Sentí rabia, rabia porque su manera de actuar me afirmaba que él sentía algo por ese imbécil y eso me haría


más difícil la tarea de poder tener algo con él, aún peor, me hacía imposible tener algo con él y que Jungkook lo viera.

—Yo te daré las indicaciones.

Vante me ofreció el casco de su motocicleta y yo lo tomé con gusto. Subí cuando él encontró estabilidad y me abracé a su torso con fuerza antes de que partiera a toda velocidad. Contuve una risa de felicidad, era la hora. Jungkook no podría escapar a los brazos de Jin o de Namjoon para refugiarse, ya no podría hacerlo, sin Vante, ¿quién le protegería? Esta vez sí podría hacer mi venganza más certera, lo de antes solo se trataba de un juego, yo quería verlo arrastrarse...

Cerré los ojos y pensé en Taehyung. No importaba dónde se encontrara, sabía que él tanto como yo deseábamos esta venganza. Primero Jungkook y luego... Yoongi.

Vante llegó en menos de media hora a mi departamento. Si tan solo Yoongi se hubiera emborrachado y dormido en un bar, podría invitarle a pasar, lastimosamente no es así. Bajé de la motocicleta, le entregué el casco y solté un suspiro profundo.

—Gracias por traerme, Vante.

—No es nada.

—Aquí vivo... si me necesitas solo tienes que buscarme y yo estaré aquí para ti, ¿de acuerdo?

Él asintió y despeinó mis cabellos, antes de ponerse el casco y partir lejos de mí. Entonces ahí pude soltar la risa estridente que no pude contener. Los buenos siempre ganan, los buenos siempre ganamos, Jungkook. Lo aprenderás.


Di media vuelta, ingresé al edificio y tomé el ascensor para llegar a mi piso. Luego me dirigí por el pasillo hasta la puerta, ingresé sin hacer mucho ruido. Las luces seguían encendidas. Yoongi apareció por el umbral de la puerta de la cocina, esbozó una sonrisa al verme.

—¿Y las bolsas? ¿Por qué tardaste tanto? Te marqué como cincuenta veces.

—Ah... es que ya no había carne. —Tenía que inventarle una excusa creíble a Yoongi.— Tuve que ir a otros supermercados más alejados, pero tampoco encontré la que yo quería...

—No debiste hacer eso, pudo ser peligroso.

—No, aquí es muy seguro, no te preocupes... emh.

—Vale, vale, no me preocupo. —Caminó lentamente hacia mí.— ¿Ahora qué cenaremos, cariño?

—La verdad es que no tengo mucha hambre... déjalo, mañana la compraremos.

—No me gusta que te saltes las comidas.

—Sí, pero solo será una vez, amor.

—Solo una y nada más, ¿sí, bebé?

—Sí...

Él se acercó a mí para abrazar mi cintura y besar mis labios. ¿Desde cuándo todo mi amor se desvaneció y solo siento asco por él? ¿En serio llegué a sentir amor por él? ¿En serio?

Yoongi, jodéte.







Jungkook, el chico flor ➳taekook [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora