"Capítulo 8"

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Oficialmente eran esposos pero... ¿Qué podría pasar en un matrimonio a base de conveniencia?

Los dos estaban abrumados y no sabían qué hacer o pensar con tantas cosas pasando a su alrededor en poco tiempo.

Casados sin conocerse del todo, siendo aún muy jóvenes. Todo para un beneficio mayor entre sus familias.

En todo eso pensaban cuando sus familiares se les acercaron a ambos para felicitarlos por la reciente boda.

—Mi niña se casó, aún no lo creo— Admitió Alice, mirando a su hija con una sonrisa, aún con lágrimas bajando por sus mejillas de la felicidad.

—No exageres mamá— Le pidió Betty, divertida.

—Hacen una muy linda pareja, hijos— Aseguró Hall, mirándolos, feliz.

—Concuerdo contigo, Hall— Dijo Fp, acercándose con su mujer al lado.

—Chicos, los fotógrafos los esperan. Deben tomarse las fotos para las revistas. Se ven increíbles— Les avisó Gladys, contenta.

Jughead suspiró y miró a Betty, con su brazo entrelazado al de ella. —Vamos, Betty—

Betty asintió y ambos fueron a hacerse la famosa sesión de fotos para revistas y demás en ángulos y paisajes realmente asombrosos que los fotógrafos reconocían muy bien; Los padres de la joven pareja habían contratado a los mejores fotógrafos del país para la sesión de fotos de sus hijos.

No les fue difícil a ellos verse como si estuvieran enamorados en aquellas fotos. Se suponía que eran recién casados y debían verse como tal.

Después de la sesión de fotos, llegó un momento realmente importante en la boda, por lo menos para los padres de Betty y Jughead.

La hora del baile.

En la pista de baile, adornada con luces y globos rosas de corazones especialmente para ellos, empezó el "romántico baile".

—Me imagino que recuerdas los ensayos que hicimos juntos... ¿Verdad?— Le preguntó Betty al chico, colocando ambos brazos sobre sus hombros.

Jughead asintió, poniendo ambas manos sobre la cintura de la ojiverde mientras la miraba fijamente. —Claro, además de que no es la primera vez que bailamos juntos. Recuerda la noche en el crucero—

Betty asintió, sonriéndole levemente, y empezó la suave melodía que daba inicio a su primer baile como esposos. Se movían lentamente, de un lado a otro al compás de la música.

Sabían fingir muy bien, porque sus miradas estaban tan conectadas que parecían muy enamorados.

O tal vez porque ahí había una chispa, aunque fuera pequeña. Nadie lo sabía, ni ellos mismos.

Y fuera de ese mágico escenario, dos almas que tal vez sí estaban destinadas a estar juntas observaban.

Archie estaba al lado de Verónica, observando igual que ella, y la miró. —Hola Ronnie—

Verónica lo miró y sonrió. —Hola, Arch—

Archie tomó aire, sin dejar de mirarla. —¿Y tú... Quieres bailar?—

Verónica asintió inmediatamente, rodeándolo con sus brazos sin dejar de mirarlo un momento. —Me encantaría—

No muy lejos de ese mismo escenario, dos chicas se habían inspirado tras ver esas parejas bailar.

—Toni...— La llamó Cheryl, acercándose a ella con un característico vestido rojo.

Toni la miró, con ojos brillantes. —¿Qué ocurre, Cher?—

°Dulce Matrimonio° 'Bughead' Donde viven las historias. Descúbrelo ahora